Dereck.
Estoy demasiado estresado, Valeria no a querido separarse de mi ni un solo segundo y ya me tiene cansado. En mi mente solo ronda Amelia, según me informó el médico solo le falta una semana para salir y estará como nueva pero que tiene que seguir tomando terapias por los traumas que las violaciones y todo el daño que le hicieron pudo causarle.
—Llévame a mi casa.
—Tienes auto, puedes irte tú sola, tengo cosas que hacer.
—Bien, entonces te espero para que nos vayamos juntos, como la pareja que somos— me río.
—¿Qué dijiste? ¿La pareja que somos? Mira te recuerdo que no estoy con nadie por el momento.
—Volviste conmigo, te lo recuerdo.
—Solo lo dije para que te dejaras coger como en serio me gusta, sin quejas ni nada por el estilo.
Se cruza de brazos y resopla.
—Aunque no te guste estas conmigo.
—¿Por qué Valeria? Sabes que te engañe y sigues aquí, sabes que no dejaré a Amelia y aún sigues insistiendo.
—Eso no me importa— se sienta en mi regazo y empieza a mover sus caderas— Eres mío.
—Corrección, no soy de nadie y quítate.
Cuando no lo hace yo mismo la aparto, mi mirada viaja a las cámara la cual se supone estaba apagada. Adrián debió encenderla.
—Es tarde ya, vete a casa.
—Te espero a que termines y nos vamos los dos, ya dije.
—Lastima porque yo no quiero ir contigo. Así que ya vete.
—Te recuerdo que prometiste no dejarme.
—Así como prometí respetarte, pero pues que te digo.— me mira algo enojada— Vamos, tu presencia me distrae, vete déjame trabajar que tengo cosas que hacer antes de irme a New York.
—¿Por que ella? Dereck te lo he preguntado muchas veces y sigo sin entender. Amelia solo te a causado problemas y a pesar de eso sigues ahí.
—Sigo ahí porque me importa, si estos problemas los tuviera con cualquiera me alejaría y huyera de eso, pero en esta ocasión me quedo porque es Amelia, no cualquiera.
—¿Y que es Amelia para ti?
No contesto y vuelvo a concentrarme en la computadora, cuando Valeria intenta acercarse levanto mi mano poniendo un alto.
—Vete— rueda los ojos y se va derrotada.
Me llega una notificación de la clínica y la abro.
Tienes permiso para hablar con ella 15 minutos contando desde ya.
Me llega una video llamada y sonrío por inercia, contesto la llamada y la observo al otro lado de la pantalla.
—Hola hermosa— sonríe— ¿Cómo vas?
—Mucho mejor, no sabes, me estoy recuperando de maravilla y la abstinencia a desaparecido.— me alegra tanto escuchar eso.
—Estoy orgulloso de ti nena, sabia que lo lograrías, quisiera atravesar la pantalla y besarte.
—Todo esto es gracias a ti, gracias por motivarme, te amo. En una semana ya saldré de aquí y podré estar con mi familia.
—¿Solo con tu familia?— medio se ríe.
—También contigo.
Como quisiera poder estar con ella, abrazarla y besarla, este tiempo sin ella a sido una completa tortura solo la visitaba muy pocas veces y cuando tenía que irme sentía como me arrancaban mi otra mitad. Se ve preciosa sonriendo y da un suspiro.

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DESTINADOS
Teen FictionDespués de cinco largos años, Amelia a vuelto a creer en el amor y está rehaciendo su vida amorosa junto a Liam. Todo es perfecto hasta que nuevamente vuelve aparecer el hombre que cambió su vida, Dereck Reyson vuelve a Londres, pero lleva con el a...