Capitulo 17

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CHARLIE

Chris llegó a la cocina y sacó dos refresco del refrigerador, regreso a donde yo estaba y me dio una, después se dirigió hacia la sala y le quitó la sábana que cubría del polvo a uno de los sillones, su apartamento era extremadamente grande, nada que ver con mi pequeña casa.

–siéntate por favor.

Hice lo que me dijo y me senté en el sillón, el se acomodo a mi lado, dejo el refresco en la mesa que estaba frente a nosotros y volteo a verme, puso su mano en mi mejilla y comenzó a acariciarla, cerré los ojos ante su contacto, después solo sentí sus labios sobre mi mejilla, empece a temblar como siempre pero necesitaba tanto su tacto que me deje llevar por un momento. Cuando sentí que se alejo de mi abrí los ojos y me tope con su hermosa sonrisa. Este hombre tenia magia, un solo gesto hacia girar mi mundo.

—tu piel es muy suave– acaricio mi mejilla con su pulgar.

—gracias Chris, por no presionarme, se que tu deseas... lo mismo que yo.

—¿Que deseas Charlie?– me miro coqueto –dímelo.

Sonreí tímidamente a sus palabras, me encantaba todo de Chris, pero no podía desprenderme del miedo tan fácilmente, ¿que pensara cuando se entere que me violaron? tal vez le de asco y se aleje de mi, baje la mirada triste al pensar que él me odiaría por todo lo que hice y todo lo que soy.

—¿que pasa?– levanto mi rostro –ten confianza en mi.

—no soy una buena mujer para ti Chris, tu mereces a una mujer que no cargue tantos problemas como yo, una mujer digna de ti y yo no lo soy.

—Charlie, deja ya eso, quiero ayudarte, pero a veces no sé de qué hablas, me gustaría mucho que confiaras en mi, dime que pasa¿A que le tienes tanto miedo?

—hace como un año, yo…– el miedo no me dejaba decirle la verdad —un antiguo jefe…– lleve mis manos a mi rostro, sino me veía podía ser mas facil –el me violo Chris… mi ex jefe me violo.

—¡oh dios! Perdoname nena, no tenia idea– se acercó a mí y me abrazó –por eso tienes tanto miedo cuando me acerco y te toco.

—desearía que no fuera asi– comencé a llorar –aún tengo pesadillas, él me escondio detras de unas maquinarias y ahí me violó, después me golpeó y me obligo a que le hiciera sexo oral, fue uno de los peores dias de mi vida, por culpa de ese maldito jamás volví a conseguir un empleo decente.

—ahora entiendo muchas cosas, perdoname si alguna vez te hice sentir incomoda o si te obligue a algo –acarició mi cabellera y suspiro –recuerdo una noche, cuando me tenías encerrado en tu casa, te  escuche gritar, ¿estabas teniendo una pesadilla aquella vez?

–si, las pesadillas a veces son muy reales y vuelvo a revivir todo lo que paso aquel dia, casi no puedo dormir y a veces voy al trabajo sin haber dormido, pero no le digo nada a Betty para no preocuparla.

—has sufrido mucho– volvio a besar mi mejilla –¿Has ido a terapia?

—no– sonreí triste –Betty queria pagarla por mi, pero me negué, ella necesita el dinero para su esposo.

—ya veo...

—Lo ves Chris, por eso te digo que no soy mujer para ti, debo de darte asco.

—mírame– hizo que levantara el rostro y lo viera a los ojos –jamás me provocaras asco, al contrario, creo que sabes perfectamente que me siento atraido por ti y se que también te gusto, pero ahora que me has dicho esto, no volveré a forzarte a nada, todo será a tu ritmo, cuando tu te sientas segura.

No debería amarte Donde viven las historias. Descúbrelo ahora