Sol en invierno - Pronto se irá a BORRADOR

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Mats｡

Brock, Brock, Brock... Esa malcriada siempre me sorprende para mal, solo que ahora trato de verle el lado divertido. Algo de todo su parloteo agresivo se me grabó en la cabeza <<es lo que he aprendido en cinco años de experiencia>> ¿Cinco años de experiencia... en qué? Isis tiene ocho años. Odio estar suponiendo sobre la historia de Brock, tanto como querer saber sobre ella, tanto como esa voz que me dice <<pregúntale>>. ¿No ha sido consciente de cómo me trata cada vez que le pregunto algo?

Las sigo camino a su casa, a buena distancia para que no me vean. No es mi intención pasar tiempo los tres, solo me creo capaz de alcanzar a Brock si veo que pierde el equilibrio, también me creo capaz de cargarla hasta su casa si fuera necesario y dejarla adentro junto con su hija, sanas y salva.

Las dos se meten a su casa y yo vuelvo al local, no fui necesario para Brock en este viaje y eso es bueno, necesito estar tranquilo, no quiero pasar otra noche sin dormir.

Quien también se enteró del incidente y me visita en el local, es Clío, lo que me sorprende.

Lo que le mencioné a Jimmy en la entrevista, sobre la relación que tenemos Clío y yo, también se lo expliqué a ella, por ende, su presencia está muy fuera de lugar.

Me hace las mismas preguntas que Ana, Emmet y James, le cuento lo sucedido pero en muy breves palabras, solo porque el relato ya me tiene harto. Luego expresa su preocupación por mí y la conversación se va por ese lado. Yo me desligo, que Ana y Emmet continúen con el diálogo.

Clío saca su teléfono. Claramente teclea. Por la duración, puede que sea un mensaje. Entonces levanta los ojos hacia mí y mi teléfono emite una vibración. Creo que sé lo que aquí pasó. Saco mi teléfono del bolsillo de mi pantalón. Lo primero que veo al desbloquearlo es el video editado por los usuarios de internet, donde aparece Brock y su sonrisa. Cuando ella me devolvió mi teléfono luego de ver ese mismo video, recuerdo que solo lo bloqueé y me lo guardé. El video de unos breves segundos se repite dos veces y se detiene al finalizar, donde luego me aparecen dos opciones: Repetir/Ver más videos. Aprieto repetir. Se repite tres, cuatro, cinco veces. Es un video adictivo, la sonrisa de Brock lo es. Hay tanta felicidad, travesura y vitalidad en su expresión que... Que el video se repite siete, ocho, nueve veces y me olvido del mensaje de Clío hasta que ella carraspea.

Me salgo de la pestaña y abro el mensaje que recibí.

Clío: Vamos a un motel. Traigo lencería nueva.

Levanto los ojos hasta los de ella. Me arde el cuerpo. Esta mujer juega las cartas que sabe le harán ganar el juego de la seducción. Me encanta que tenga una expresión angelical mientras sus pensamientos son todo lo contrario.

<<Vamos>>, dicen mis labios, sin emitir ni un solo sonido.

***

<<Natural conducta inquieta y curiosa de los niños>>, ese es mi visión de ellos. Hasta ahora, Isis sigue mostrándose naturalmente curiosa, pero, gracias a todos los milagros del mundo, no se ha mostrado inquieta. Antes pensaba que era porque era tímida, ahora creo que no es inquieta porque tiene una buena crianza.

La tengo muy cerca de mí, pero del otro lado del vidrio de pared que separa mi estudio del vestíbulo. Tiene las palmas apoyadas en el cristal y los ojos siguiendo cada movimiento de las agujas que clavo en la piel de mi cliente.

—¿Es tu hija? —me pregunta.

Pongo los ojos en blanco.

—Dímelo tú, ¿se parece a mí?