Etéreo

Nuestro Futuro.

Los siguientes días en verdad la pasaron bien, durante el día ambos iban a trabajar y cuando regresaban Hugo les contaba lo mucho que se había divertido con los abuelos, hoy durante uno de sus momentos libres se encontraron con ellos en el hospital ya que querían participar de la consulta, se encargaron de llevar al pequeño ya que recién estaba entendiendo que tendría un hermanito o hermanita.

Como llegaron temprano aprovecharon para sentarse en la sala de espera y charlar un poco, Esteban trataba de calmar a Hugo que relacionaba el hospital con sus idas a que le pongan una vacuna o con consultas de rutina, detestaba esos momentos como todo niño, así que ahora no estaba tan seguro de que realmente venían por su mamá y no por él. Aunque pronto se dio cuenta que el consultorio no era para nada parecido a los que normalmente su papá lo obligaba a entrar, al notar eso se calmo, en especial cuando vio que era a su mamá a quien revisaban.

– Tu presión se encuentra estable ¿Haz notado alguna cosa inusual?

– No, a veces un poco de náuseas en la mañana, he estado más cansada pero supongo que es porque estamos avanzando

– ¿Respetaste tu dieta?

– Si me salí un poco pero tengo una buena excusa

– A ver ¿Cuál es la excusa?

– Fue el cumpleaños de mi hijo y había muchos postres, tampoco exagere, que conste

– Está bien — sonríe negando — Ve a ponerte la bata para que podamos ver a ese bebé

En lo que Auria le hacía conversación a la obstetra, Marcia fue a quitarse el vestido para reemplazarlo con una bata un tanto grande para ella, subió a la mesa de procedimientos con ayuda de Esteban y cubrió sus piernas con una de esas mantas quirúrgicas, dejó al descubierto su vientre y ahí sólo le tocó esperar un poco para poder ver al bebé. Cuando su pequeña silueta apareció en la pantalla, Esteban tomó a su hijo en brazos para enseñarle donde se encontraba su hermanito o hermanita, mientras que los abuelos veían emocionados la pantalla.

– Todo se ve excelente, como hoy vino casi toda la familia — ríe bromeando — Le subiré un poco al volumen para que todos puedan oír el corazón

– ¿Pudo ver si es niña o niño? — indagó Don Paco — Es que estamos ansiosos por saber

– Si me regalan un minuto o dos veré de resolver esa duda — dijo amable

– ¿Ya viste Hugo? Ese es el bebé — señala Esteban

– Es chiquito ¿Por qué?

– Porque todavía le falta crecer mucho

– ¿Por qué lo hace tan despacio? ¿No duerme? Papá dijiste que si no duermo no crezco

– El bebé duerme, sólo que como tú también te tardas un tiempo en crecer, el también