– ¿Pero estás segura o no? — cruza los brazos
– No, no estoy segura y... Y tampoco sé si lo quiero averiguar — abre la puerta
– No es como si tuvieras mucha opción — va tras ella — ¿Qué no se cuidan?
– Por supuesto que si pero los accidentes pasan
– Pues si, ahí esta Rafa — ríe — Ay Marcia, como yo lo veo, deberíamos ir a la farmacia y averiguarlo, ahora que tenemos tiempo y no esta pegado a ti mi hermano
– ¿Pero y si sale positivo? Ya tengo tres en casa, tu hermano cuenta como un hijo más
– ¿Te empujó por las escaleras?
– ¡Lucrecia! — se apoya por la columna
– ¿Qué? Es una opción ¡Televisa siempre la utiliza!
– ¿Y si me rompo el cuello qué?
– No pues... Ahí si tienes razón — hace un puchero viendo sus pies al caminar — Si te mueres me moriría de aburrimiento
– Además, ni siquiera tenemos una certeza, empecé a dudar porque ya van cuatro años y aparentemente no paso nada, hay demasiada calma y me genera ansiedad
– ¿Calma? Calma es lo que menos hay entre ustedes, también es bien sorprendente para mi que en estos cuatro años no salieran con su accidente feliz nuevamente — la encara — ¿Te sientes mal? ¿Estas atrasada? Si la respuesta es si ¿Cuántos días? Ve soltando la sopa
– No, sigo tan regular como un reloj y malestar una que otra migraña
– El día que fui a tu casa para beber una copa y que al final fue la mitad de una botella... ¿Ustedes dos? ¡Ay no mejor no me digas!
– Fuimos juiciosos — ríe de la cara que hace — Es que si me da pánico, aunque Hugo ya es grande, Rafa sigue siendo chiquito y me sería complicado
– Pero para eso esta la Nana, digo ustedes dos son padres presentes y van a absolutamente todos sus partidos, obras escolares y competencias, la Nana los mantendría a raya en caso de que me hicieran tía de nuevo
– Lo sé pero tenemos una rutina funcional, son buenos niños, tanto que si viene un bebé estoy segura que lo van amar mucho pero me da miedo no poder con tres
– Bueno ya lidias con tres todos los días, en teoría serían cuatro — ríe bajando las escaleras — Creo que lo mejor sería que las dos fuéramos a una farmacia ahora, aprovechando que estamos bien relajadas gracias al Spa
– Tengo muchas cosas pendientes en la oficina
– Vamos a la farmacia Marcia — la toma de la muñeca
– Pero... Esperate, caminas muy rápido
Aunque se apuraron bastante para salir del estacionamiento del Spa no sirvió de mucho ya que se atascaron en el tráfico, para hacer el viaje más ligero Lucrecia puso su playlist de ABBA. Pronto las dos andaban cantando y montando toda una coreografía desde sus asientos pero desgraciadamente perdieron mucho tiempo en el tráfico por lo que tuvieron que entrar por la parte de los coches y ordenar una prueba de embarazo. Llegar a la oficina fue un poco menos complicado por lo menos.
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Etéreo
FanficAlgo etéreo es intangible o poco definido pero a la vez sutil, incluso sublime... Algo así es lo que buscamos todos o es lo que me gustaría pensar. - Marcia.