Capítulo 21

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Darrell

Sin darme cuenta golpeo el hombro de alguien y acaba en el suelo. Levanto la mirada del libro y veo a Kate recogiendo sus cosas a toda prisa, metiéndolas en su bandolera. Ella levanta la mirada lentamente. Pongo los ojos en blanco y le tiendo una mano para ayudarla a levantarse. Parece un cachorro asustado y, aunque he de reconocer que es divertido ver como tiembla, es un poco ridículo.

Kate mira mi mano durante unos segundos, sin saber si fiarse de mí o no.

-¡Venga, no tengo todo el día! -exclamo.

Me da la mano rápidamente, y la levanto con facilidad.

-Perdona, no te había visto -digo seriamente.

-No... no pasa nada -dice nerviosa, rehuyendo mi mirada.

Nos quedamos en silencio durante unos segundos.

-Bueno... Mmmm... ¡Adiós!

-No, espera, espera -digo agarrándola del brazo.

Me inclino hacia adelante para que nuestros rostros estén separados por escasos milímetros y sonrío al notar que vuelve a temblar.

-Como me entere que metes mierda en mi relación con Cassie, iré a por ti -la amenazo-. Me importa un carajo que seas una tía, no soy machista. -Me encojo de hombros-. Las mujeres son iguales que los hombres, ¿no? ¿Por qué iba a poder darle su merecido a una si es igual que yo?

Ella traga con dificultad y da un paso hacia atrás, empalideciendo. La suelto del todo y se marcha prácticamente corriendo. Queda avisada, más le vale hacerme caso. Y sobre todo más le vale no irse de la lengua como hizo Anna. Puta chivata.

Entre la gente que va de aquí para allá visualizo a Ted y a James, que están al final del pasillo, esperándome. Ninguno de los dos parece estar muy contento con la presencia del otro. Joder, si Ted no estuviera con el mono de la maría y James no tuviera la testosterona por las nubes no tendríamos peleas tan estúpidas. A veces pienso que el único cuerdo aquí soy yo.

-¿Dónde coño estabas? -dice Ted. Puto amargado.

-Follando -me limito a contestar.

-¿Con Cass? -pregunta James, sonriendo.

Pongo los ojos en blanco. ¿Con quién si no?

-Algún día te convenceré y me contarás cómo es en la cama.

-Estás enfermo, amigo mío -suspiro-. Tendremos que llevarte a terapias de adictos al sexo.

-A ti tampoco te vendría mal tener un loquero -comenta Ted, fulminándome con la mirada.

Ignoro las ganas de darle de hostias que tengo en estos momentos y sonrío. Guardo el libro de Hamlet, que le he quitado a Cassie, y comienzo a buscar en mi mochila. Quiere que me interese más por la literatura y eso estoy haciendo, al fin y al cabo esto es historia. Encuentro lo que quería y lo saco, mostrándoselo a Ted.

-Un presente para mi insoportable amigo -digo dejándole el porro en las manos-. De nada.

-No lo quiero -dice mirando fijamente el porro-. No... no lo quiero.

-Sólo una caladita -digo sacando el mechero-. ¿Vamos al cuarto de baño para comprobar si es buena mercancía?

Aunque dice que no una y otra vez, no tardamos en encerrarnos en el baño. Le quito el porro de las manos, me lo coloco en la boca y lo enciendo, dándose una calada. James sujeta a Ted para que no huya, y le echo el humo en la cara. No va a tardar en caer, hace demasiado tiempo que fuma, no aguantará mucho más sin hacerlo. En cambio, James está rehabilitado, no creo que se atreva ni siquiera a coger el porro.

Ted me quita la maría de las manos y da una calada antes de soltar el humo lentamente, suspirando de alivio. Esta hierba es realmente buena, unas pocas de caladas y ya estoy colocado. Es la hostia.

Comienzo a reír cuando la cara de Ted comienza a ponerse roja y esboza una sonrisa de fumado. Me restriego los ojos con fuerza cuando comienzan a escocerme a causa del humo que Ted me echa en la cara y saco de la mochila una petaca llena de whisky. Me llevo la boca de la petaca a los labios y dejo que el líquido me abrase la garganta. Toso un poco antes de pasársela a Ted, a cambio de la marihuana.

-¿Colocados y borrachos? -dice James y sonríe ampliamente-. ¿Por qué tengo la sensación de que esto no acabará bien?

Saco una bolsita del bolsillo de mi pantalón y esparzo el polvo blanco por el lavabo, haciendo una raya tras otra. Blasfemo en voz alta cuando no encuentro nada con lo esnifar la coca, y Ted me pasa un billete de cinco dólares enrollado. ≪Para estar colocado es bastante ingenioso por su parte.≫ James hace una cuenta atrás, y comenzamos a esnifar todo lo que podamos. Como de costumbre, Ted arrasa con lo que pilla y, como premio de consolación, me quedo con lo que queda del porro.

Ted y yo nos miramos y me echo la mochila al hombro antes de salir por la puerta del cuarto de baño, tras acabarme el porro. Le echo el humo a una chica que pasa a mi lado, y ésta da un salto, mirándome asustada. Suelto una carcajada cuando sale corriendo y le quito la petaca a Ted mientras salimos del Haines Hall. La gente nos mira extrañado, pero enseguida se dan cuenta que les conviene no hacerlo.

-Algo divertido -dice Ted quitándome el whisky de las manos-. ¿Cuándo fue la última vez que robamos un coche? Joder, cómo echaba de menos esto.

-Hermano, hoy va a ser un día grande -digo sonriendo con malicia. Va a ser un día muy grande.

-No valen coches de mierda -dice James-. Vamos a ver si Ted sigue siendo tan bueno después de su periodo de abstinencia.

Me froto la nariz cuando comienza a picarme y paro en seco cuando un gilipollas con gafas hípster se cocha conmigo. ≪Esmirriado, siento informarte de que morirás joven.≫

-¡Eh, cuidado! -exclama recogiendo su mochila del suelo, que se le ha caído.

Sonrío mirando a los chicos, viendo cómo James va sacando el móvil. Da gusto estar como en los viejos tiempos.

-Podrías disculparte al menos, ¿no? -Se queja-. No sé cómo pueden dejar entrar a gente tan idiota en la universidad -murmura, colocándose bien las gafas.

Giro la cabeza lentamente hacia él, que comienza a ponerse nervioso.

-Este idiota te va a presentar a alguien -gruño y saco la navaja.

Agarro al gilipollas del cuello de la camisa y lo estampo contra el árbol más cercano, colocándole la hoja de la navaja en la yugular. Miro por encima del hombro a James.

-¿Estás grabando? -pregunto.

-Sí.

Vuelvo a mirar al chico y sonrío.

-Que empiece el show.




Hi!!! ¿Qué tal el cap.? Sí, ya sé que Darrell está muuuuuuy loco. Quedó muy claro en el cap que le falta un tornillo, ¿no? ajajaj espero que os haya gustado. En multimedia os dejo a Kate (India Eisley). Intenté dejar una foto suya en caps. anteriores pero no se guardó la foto espero que ésta sí lo haga.

Bueno, besos, abrazos y ciao que es muy tarde :))

Alicia Lowell

DARRELL © [D #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora