Pelea en el patio y voces

83 9 0
                                    

El grupo de semidioses estaba enfrente de una Kampe muy enfadada. Ella había tratado de hacer que esas dos chicas se quedaran calladitas y sin hacer nada, pero ahora la habían hartado.

Kampe desplegó las alas y alzó el vuelo y subió hasta las nubes haciendo que los tres se quedaran completamente quietos esperando que la carcelera apareciese por algún lado dispuesta a atacarlos. Grover se ubicó un poco más alejado del resto en una zona de difícil acceso para evitar que lo volvieran a atrapar y estaba dispuesto a dar todo el apoyo que pudiera tocando la flauta de pan.

Por otro lado Annabeth y Thalia se pusieron espalda con espalda para intentar que esa no legara a sorprenderlas cuando descendiera. Ellas miraron a su alrededor durante un tiempo hasta que el sonido de el batir de unas alas se hizo presente.

Thalia se giró para mirar al monstruo que estaba descendiendo a toda velocidad mientras preparaba su látigo para atacar. La hija de Zeus soltó un grito para advertir a Annabeth y las dos saltaron a un lado, pero la hija de Atenea recibió una ataque que no esperaban en ese momento.

Una de las cabezas que Kampe tenía en su cintura lanzó una ráfaga de fuego que terminó dando a Annabeth prendiendo parte de su ropa. Inmediatamente ella se puso a rodar por el suelo ignorando por completo que Kampe todavía estaba cerca, lo que ganó un golpe en la cara con su látigo causando u corte en su mejilla que no paraba de sangrar .

Thalia intentó ir en su ayuda, pero Kampe fue con toda su velocidad a placar a Thalia haciendo que esta saliese volando hasta un poste donde se sustentaba la canasta en la cancha de baloncesto abollando el poste y dejando aturdida a la hija de Zeus.

Grover intentó ayudar a Annabeth haciendo que crecieran plantas con cuerpos vegetales abundantes en agua a su alrededor, para que ella o kampe las rompieran y sofocaran el fuego que la chica tenía, pero Kampe se dio cuenta de eso y no hizo completamente nada para seguir molestando a Annabeth, se limitó a esperar que se desmallara por el dolor de las quemaduras, las cuales se iban haciendo cada vez más pronunciadas ya que por el crecimiento de las plantas la chica casi no podía moverse.

Teniendo una preocupación menos Kampe salió volando nuevamente y se camufló entre las nubes. Thalia estaba atontada por el golpe, por lo que no podía ver con mucha claridad a su alrededor, por lo que no podía llegar a ubicarse con claridad.

Como pudo miró a su alrededor y llegó a discernir que Kampe no estaba en la zona y que había ido hacia arriba. Thalia también pudo ver que Annabeth estaba en grandes problemas, por lo que decidió hacer algo que nunca había probado y que Quirón le había hecho entrenar.

Intentó canalizar todo su poder como pudo hasta que sintió un gran tirón en sus entrañas, pero esa sensación se vio recompensada al ver como el cielo comenzó a pasar de color azul con unas pocas nubes ha un cielo completamente cubierto de nubes de tormenta que no dejaban de tronar y pocos segundos después comenzó a llover apagando el fuego que tenía Annabeth en su ropa, para luego ir como pudo a ayudar a su amiga.

Con la ayuda de su lanza pudo llegar e intentar romper las plantas que Grover había intentado cortar las plantas, pero Kampe se hizo presente y lanzó un latigazo hacia Thalia haciendo que que esta cayese al suelo haciendo que Kampe la pisara para que no se levantase y comenzara a patearla.

Grover presencio todo esto y sabía que él no podría hacer nada físicamente hablando, buscó la forma en la que pudiera ayudar, pero no pudo ver nada, lo único que pudo sacarlo de su pensamiento fue un ruido muy fuerte que sonó desde el interior de la cárcel.

Momentos antes.

 Briares, un centimano estaba sentado acurrucado en la esquina de una celda en la prisión de alcatraz. Este ya había perdido toda esperanza al ver a todos los de su especie desaparecer en el olvido estando encerrado en la misma prisión durante un buen tiempo.

Hijo de la lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora