Todos se habían reunido y ahora estaban llevando todos los snacks que habían adquirido en un estado de dudosa moralidad hasta la gasolinera donde estaba la furgoneta que Quirón les había dejado. El grupo se acomodó en sus asientos para comenzar su largo viaje hasta San Francisco.
Durante los primeros minutos de viaje todo transcurrió con tranquilidad, la carretera era aburrida para la gran mayoría de miembros del equipo, pero no hacían anda para remediarlo. Thalia seguía inconsciente, Grover estaba dando mantenimiento a su flauta, Bianca estaba mirando por la ventana en busca de algo ya que parecía muy interesada en todo lo que había fuera, y Percy estaba mirando al infinito, como si estuviese pensando en algo, pero lo único que podía pensar era en la pelea que había tenido antes. Si se volvía a encontrar con un enemigo como el león o los esqueletos no sabría que hacer. Esos enemigos eran prácticamente invencibles si no sabías de su debilidad por lo que tendría que estudiar más a las criaturas a las que cazaba, para saber como derrotarlas y conocerlas mejor.
El tiempo fue pasando y Bianca terminó viendo algo que le llamó mucho la atención y no era algo bueno precisamente.
- Chicos, creo que nos están siguiendo. - Dijo Bianca causando que todos en el vehículo.
- ¿En que sentido? - Dijo Thalia la cual se había despertado hace un rato.
- En el sentido de que algunos esqueletos están corriendo detrás de nosotros causando el pánico en las personas. - Dijo la cazadora novicia causando que todos se centraran en ese tema.
Los demás se pusieron a mirar a su alrededor y efectivamente había un pequeño grupo de cinco esqueletos que estaban corriendo detrás de la furgoneta causando que Zöe se pusiese un poco más temeraria al conducir, y cuando decía temeraria fue que se puso a conducir a más de cien kilómetros hora en zona urbana.
Estos hacía tiempo que habían salid de Nueva York y ahora estaban en la ciudad de Filadelfia corriendo como si fuesen pilotos de vehículos de carreras por una ciudad que no era la suya y mucho menos el mismo estado.
Corrían por las calles causando que los demás coches les tocaran el claxon por su brusquedad para luego asustarse porque una horda de algo que no entendían les estaba persiguiendo.
- ¡Por allí! - Indicó Bianca señalando la boca del metro.
Zöe vio la entrada y rápidamente maniobró para terminar dando un giro que terminó bloqueando la entrada al subterráneo con la furgoneta en una posición lateral. Esto hizo que solo una parte del coche pudiese salir directa al metro por lo que todos salieron dejando atrás la furgoneta.
El grupo no miró hacia atrás pero su pudo escuchar como los esqueletos intentaban mover el vehículo para poder pasar. Por suerte para ellos un tren estaba haciendo su entrada por lo que no perdieron el tiempo en montarse y esperar que los mandasen a otro punto de la ciudad lo suficientemente lejos como para que los esqueletos tardasen en encontrarlos.
- ¿Cómo nos han encontrado? - Dijo Thalia. - Esos bichos no tienen nariz como para captar nuestro olor.
- A lo mejor se sientes atraídos por nosotros. - Dijo Binca mientras jadeaba, no se había acostumbrado todavía a la vida de semidiós.
- Puede ser. - Dijo Zöe mientras se aferraba a una barra de acero para mantener el equilibrio. - Pero por el momento esperaremos como tres o cuatro paradas para poner una buena distancia entre nosotros.
- Además estamos rodeados de gente, por lo que puede que nos tarden en rastrear. - Dijo el sátiro mirando a su alrededor y observando como cada persona se preocupaba solo por lo suyo sin prestarles atención. - Con un poco de suerte podremos encontrar una alternativa de vehículo hasta San Francisco.
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Hijo de la luna
Fanfiction¿Qué pasaría si en esta línea temporal y universo al que hacen mención en la profecía se pensara que no fuese Percy sino Thalia? En este mundo Poseidón se enamora y deja embarazada a una mujer casada y, tras un incidente Percy queda solo en el bosqu...