No había nada mejor que una hermosa vista, acompañada de una brisa fresca, la frescura que le hacia sentir el césped debajo de él le traía tranquilidad, la vista al cielo era solemne había remanecido en esa posición por un par de horas sin sentir cansancio, notando como la noche se acercaba cada vez más, tomo la difícil decisión de regresar a casa.
Tenía tanto que empacar, en dos días partiría a Waterloo, la nueva universidad lo estaba esperando para seguir con el cuarto bimestre que estaba cursando, no estaba dispuesto a dejar pasar el año, sus padres habían sugerido iniciar el próximo año, para que tuviera tiempo de despejarse.
Me da igual lo que crean o piensen de mí, a diferencia de ti hago lo que realmente quiero sin darle gusto a otros. Las palabras se Sai aparecieron en su mente.
Estar lejos de Sasuke le permitiría reflexionar mejor su actuar, dudaba que quedara relación entre Sasuke y el después del último encuentro.
*
—Bienvenido socio, soy Shinki tu compañero de morada, adelante ponte cómodo, como vez hay suficiente espacio, así que no te preocupes por la privacidad, hay de sobra.
—Gracias, soy Naruto U...
—Lo se chico, lo sé, bien espero no te sientas intimidado por mí, al ser de un grado mayor.
—Para nada.
—Bien, deja tus cosas ahí, tengo practica de natación y voy tarde, como sea fue un placer chico, nos vemos.
—Claro igualmente. – se dirigió a la que sería su habitación solo suspiro mientras tiraba su pesada mochila al suelo y aun lado las maletas, se lanzó a la cama dispuesto a descansar, era el comienzo, su comienzo.
Después de su primera clase tuvo la oportunidad de congeniar con sus nuevos compañeros quienes lo invitaron a almorzar, ahí platico con ellos de diversos temas entre los cuales destaco el deporte, siendo un tema muy común facilitándole la simpatía, para ser su primer día de clases no estuvo nada mal.
En menos de dos semanas había logrado acoplarse, Sakura era una gran compañera y una gran amiga, al cabo de un mes eran sin separables, le estaba muy agradecido ya que lo ayudaba a alejar a las chicas de las diferentes facultades que intentaban invitarlo a salir.
No era que le desagradara salir a citas, lo veía más como un distractor, ciertamente su cabeza era un lio, no se concentraba en algunas materias.
—Hola que haces chiquillo. –dijo Sakura dándole un leve golpecito en la cabeza.
—Lo de siempre.-dijo jalando una silla para que se sentara al lado suyo.
—Pero qué tenemos aquí, mmm ¿Química?, creí que eras bueno, no se supone que no tenías problemas con ella ¿Qué paso? –expreso mirando como Naruto se encogía de hombros. —Sigues pensando en el ¿Verdad?
—N-no claro que no -se sonrojo, Sakura le inspiraba confianza lo suficiente como para haberle contado el motivo de su traslado. —No es eso, es que...
—En fin, yo que tu iba a solicitar un tutor o anexarme a un club de estudio.
—Si, el profesor Kakashi me sugirió eso, de hecho ya llene una solicitud para la asignación de un tutor. Después de clases voy a la oficina a recoger la respuesta.
—¡Qué bien! Si quieres te acompaño.
Después de su última clase se dirigieron a la oficina académica una vez ahí Naruto recibió el sobre de aceptación con el nombre de su nueva tutora llamada Sasame, quien lo vería al día siguiente en el salón 2-D.
Naruto se dirigió puntual al punto de encuentro pero después de una hora su tutora de cuarto bimestre no apareció, al parecer se había enfermado, por lo que la secretaria le informo que se le asignaría otro.
Su nuevo tutor también era una chica, se asombró al saber que pertenecía al primer año.
—Valla que tienes suerte, no siempre hay tutores disponibles. Algunos esperan demasiado tiempo que llegan arrastrando materias hasta la titulación.
—Es de primer año. –dijo Naruto preocupado mientras daba un mordisco su emparedado.
—¿Y? Debe de ser muy bueno, por algo está ahí. –expreso Kankuro.
—Buena, es una chica. –interrumpió Sakura.
—No veo problema, hay varios cerebritos que son menores de edad, no te preocupes, mejor enfócate a repasar lo más que puedas.
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LYCORIS O
HorrorCuando el amor obsesivo se dispara, nada parece detenerlo. El sentido común, la farmacoterapia, la terapia electroconpulsiva, los médium, la regresión y la hipnosis fracasan al unísono. Ni magia ni terapia. La adicción afectiva es el peor de...