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La situación se resolvió con la disolución de la fraternidad a la que pretendía entrar Hotaru, quien además fue expulsada ya que no era la primera vez molestaba a alguien. Después de que pasara ese acontecer Naruto le dio su espacio, no la busco

—Hola. –Hinata volteo a ambos lados, dándose cuenta de que era a ella a quien se dirigían. No le gustaba estar en la cafetería pero ese día no tenía opción ya que moría de hambre desde su primera clase —Eres Hinata ¿Verdad?

Aquella chica tomo asiento a su lado, la fulmino con la mirada esperando que notara su molestia. Pero esa chica lo ignoro.

—Qué tal, soy Fuu, estoy en la carrera de medicina, quizás te estés preguntando qué hago yo aquí, la respuesta es muy sencilla, me agradas y me gustaría que fuéramos amigas. –la cara de Hinata no podía dejar más en claro lo que pensaba.

¡Está loca!

—Yo también fui tutora, bueno, lo fui por un mes, ah... ¿Te parece bien si almorzamos juntas?

Hinata la miro de arriba para abajo, era una de las chicas perfectas, aquellas que siempre vestían de rosa y actuaban como muñequitas, aquellas que no escuchaban un no como respuesta.

—Este lado de la cafetería me encanta...-saco un pañuelo y acomodo sus cubiertos.

—No recuerdo haberte dicho que te sentaras. No quiero ni necesito amigas. –cerro de golpe el libro que leía.

—Uy pero que carácter, no te harían falta algunas clases de modales, mira, no te acomplejes, no quiero que te sientas abrumada con mi presencia, relájate. Sé que puede ser algo sorpresivo o asombroso que yo esté aquí, hablándote, solo piensa que soy una mortal más como tú.

Por su mente se figuraba la clase de pensamiento que rondaba por la cabeza de esa chica, se sentía y creía ser alguien grandiosa, a quien todos les honraría que les hablara.

—Sera mejor que te largues, no estoy interesada en bromas estúpidas.-cruzo sus brazos a la altura de su pecho, atravez de sus anteojos su mirada seguía enunciando su disgusto.

El rostro de esa chica paso de angelical a inicuo.

—Así que es verdad, eres una amargada. No sé cómo es que Naruto te soporta. –Hinata oculto su sorpresa, no esperaba que esa chica hablada con tanta familiaridad de él. —Me dijeron que eres pésima persona, amargada y petulante, pero Naruto me dijo que eras alguien increíble, no puede estar más equivocado. Es una lástima que no seas como sus demás amigos, ellos si son geniales.

Ella se quedó estática apretando su libro hasta que sus nudillos se pusieron blancos.

—Bueno, mejor me voy, es evidente que no podemos ser amigas. Al menos lo intente. Chao. –recogió sus cosas y se alejó, por su parte Hinata solo escuchaba el eco de las zapatillas de Fuu hasta que esta desapareció.

Fue a su clase sintiéndose extraña, tenía la mente ida ya que su pensamiento solo daba vueltas, cuando el timbre sonó anunciando el fin de sus clases, se dirigió al campo de práctica del equipo de futbol americano.

Ahí lo busco con la mirada con algo de inquietud, habían otros estudiantes mirándolos practicar ya que era muy entretenido hacerlo no era de extrañar que la mayoría eran chicas, se quedó hasta que terminara el entrenamiento porque necesitaba con urgencia hablar con él, camino hacia el borde de la cancha para acercarse cuando terminaron.

Estaba a unos cuantos metros, en su mente le estaba rondando la pregunta que le haría, se percató de la chica llamada Fuu, la misma de la cafetería quien estaba sentada en una de las gradas más cercanas y no estaba sola, iba acompañada de otras tres chicas, supuso que eran amigas de esta.

Naruto camino a ellas, siendo Fuu quien corrió a su encuentro para terminar colgarse de su cuello y besarlo.

Hinata se detuvo en seco algo en su pecho se estrujo, era como si el tiempo se detuviera y al mismo tiempo la golpeara. Una sensación nueva.

Cuando se separaron Naruto movió la cabeza mirando hacia abajo mientras Fuu parecía decirle algo sonriendo, le tomo el mentón obligándolo a verla, el giro la cabeza evitando que ella lo besara de nuevo y ambos rieron.

Hinata sentía un sinfín de emociones, todas ellas oprimentes, cuando sus pies reaccionaron se dieron media vuelta y se fue. Sakura la vio alejarse ya que habían asistido para motivar a su amigo.

+

Naruto camino por el campus cargando con su bolsa de ropa deportiva sucia, y una bolsa más en la que llevaba un panque, miro a Sakura quien ese encontraba al frente, parecía estar esperándolo.

—Hola, qué hay Sakura, ¿Qué haces aquí? Es algo tarde no crees.

—Esta zona es muy segura, más bien tú, ¿Qué hay? Desde que Fuu la perfecta te ronda ya no sales con los amigos.

—Pero qué dices, eso no es verdad.

—Lo es, esa actúa como si llevaran meses, hasta años, apenas llevan saliendo tres días, ¿No?

—¿A qué viene esto?, acaso estas celosa.

—Ni de chiste.

—No veo el por qué me dices esto, si fuiste tú quien me dijo que saliera con alguien.

—Sí, es verdad, pero te dije que salgas, que conozcas a alguien no que te hicieras novio de la primera que pasara, y para variar elegiste a la más mimada de toda la escuela.

—Solo estoy siguiendo tu consejo.

—Te tomas las cosas literalmente. Sabes, vi a Hinata.

—Mhhh –movió los hombros con desinterés.

—Como que mhhh, creí que estarías acompañándola, no te he visto hacerlo.

—Y para qué, al parecer siempre tienes razón, ella siempre se molesta conmigo aun cuando trato de ayudarla, o acompañarla. Mis atenciones la molestan, he decidido mantener distancia, tal vez sea lo mejor para ella.

—La vi esta tarde, en tu práctica.

—¿Qué?

—Sí, así como lo oyes, al parecer si te tiene algo de aprecio, sino porque se tomaría el tiempo para irte a ver.

—¿De verdad? No, me estas engañando, ella jamás lo haría.

—Y porque no.

—Se lo he pedido varias veces, incluso la he tenido casi obligar.

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LYCORIS ODonde viven las historias. Descúbrelo ahora