- Cap. 42 -

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El tiempo pasó rápido, las cosas se acomodaron rápidamente y por suerte Olivia estaba superando bastante bien todo el tema de Lewis.

En mi trabajo todo estaba bien, me alegraba ver lo mucho que avanzaron las relaciones con mis compañeros y que ahora confíen plenamente en mi.

Hace ya un mes que me mudé con Olivia, ella me lo pidió y no pude decirle que no.

Hoy es mi día libre, lo dediqué a limpiar y organizar la casa, después de todo estaba sola ya que Liv estaba trabajando. Llegando la noche, decidí preparar algo distinto y más casero para salir un poco de la comida rápida.

Adorne la mesa, puse la serie favorita de Olivia en el televisor y me senté en el sofá a esperarla.

💭 Olivia ❤️

Nos demoramos unos minutos con
un testigo pero ya estoy saliendo.

Okey, te estoy esperando.

Bajé a planta baja y salí a la calle a esperarla, el garaje estaba a la vuelta del edificio y siempre que podía, salía a esperarla para que no caminara sola en la calle y tan tarde.

A los pocos minutos ví llegar su auto. Luego de bajar se acercó, saludando con un corto beso en los labios.

- Ciao bellezza - saludé sonriendo, desde que sabía que Olivia habla italiano, me propuse aprender algunas frases solo por diversión

- Ciao amore - contestó ella riendo - sigues insistente con lo del italiano

- Claro que sí, no está mal aprender otros idiomas

Tomadas de las manos salimos hasta el departamento.

Le abrí la puerta para que entrara y al ver el panorama lo primero que hizo fue verme con una cara de reproche que se podía interpretar de varias maneras.

— No tenías por qué — dijimos al mismo tiempo, ella como un reproche y yo imitando sus gestos

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— No tenías por qué — dijimos al mismo tiempo, ella como un reproche y yo imitando sus gestos

— Se que no Liv, pero siempre dices lo mismo y siempre te contesto lo mismo, lo hago porque quiero y me gusta consentirte — contesté — disfrutemos al máximo está oportunidad de pasar un tiempo juntas 

Algo que falta en nuestra relación desde hace un tiempo, es justamente tiempo, mi trabajo me consume mucho y el de ella no es muy distinto, más desde que Olivia se acerca al puesto de capitán.

Fue a cambiarse, me senté a esperarla, asegurándome de que todo estuviera en su lugar. Cuando regresó cambio las cosas para poder sentarse a mi lado y quedar ambas frente al televisor. 

Pasamos una linda velada juntas, me habló mucho del chico nuevo, Dominik Carisi, aparentemente el chico aún tiene mucho que aprender para adaptarse al equipo. 

— Necesito preguntarte algo — mencionó dejando el tenedor y viéndome directamente 

— Adelante — dije imitando su acción 

— ¿Tienes algún interés en tener hijos? — preguntó la castaña 

Agradecí haber dejado de comer para escucharla porque realmente era una pregunta que no me esperaba. Traté de entender a que se debía 

— No lo se Liv, no es algo que me preocupe realmente como para pensarlo ¿Por qué lo preguntas? 

Me tomó de las manos y se acomodó en su silla, la conozco lo suficiente para saber que está buscando las palabras adecuadas para hablar 

— Se que es así, pero yo si suelo pensar en eso, quizá es tonto o apresurado, pero tengo el deseo de ser madre y siento que se me va la vida muy rápido — confesó con aparente pena

— Te entiendo y no voy a criticarte por ello, a decir verdad para mi es algo demasiado nuevo y repentino, pero voy a apoyarte en la decisión que tomes con respecto al tema, no puedo prometer ser la mejor madre del mundo pero si poner lo mejor de mi para acompañarles 

Ella me abrazo con fuerza, acomodándose en mi hombro. 

— Gracias — murmuró 

— Creo que si me lo pienso un rato, puede empezar a hacerme ilusión formar una familia contigo — confesé acariciando su espalda

— Eso espero — contestó separándose un poco para verme — quiero que sea algo que ambas disfrutemos, que no te sientas obligada solo por ser mi pareja 

— Si me arrepiento te avisaré, puedes estar tranquila — aseguré sonriendo 

Volvió a abrazarme, estuvimos así un rato hasta decidir que ya era hora de ir a dormir, ella se acurrucó a mi lado y al poco tiempo estaba dormida. Pero en mi mentes aún daba vueltas la repentina confesión de querer un hijo, es totalmente normal tener ese deseo de maternidad, pero para ser sincera me parecía una confesión muy repentina y precipitada ya que después de todo, entre nuestros trabajos peligrosos y la falta de tiempo, sería muy complicado criar un niño.  

Traté de sacarme el tema de la cabeza y dormir, luego de un rato, por suerte lo conseguí. 

 . . . 

No volvimos a hablar del tema por un buen tiempo hasta que una noche de sábado, mientras tomábamos una cerveza en un bar Olivia comenzó a hablarme sobre su caso mas reciente.

Estaban a la busca y caza de aparentemente un traficante con un imperio dentro del mercado sexual, entre sus victimas una tal Ellie Porter, una mujer adicta que fue violada por Jhonny Drake, el traficante, a sus 16 años. Esta chica fue vendida al Pequeño Tino quien la volvió adicta a algunas sustancias como heroína. Ellie quedó embarazada de Jhonny D y aunque tuviera solo 16 años decidió tener al niño, Noah, quien ahora está en alguna casa de acogida. 

— Ella esta tratando de salir adelante por su hijo y nosotros hacemos todo lo que podemos para atrapar a Jhonny D. 

— No debe de ser fácil, la prostituían tan joven, debió tener una vida muy difícil — contesté — Pobre niño, desconoce lo que es realmente un hogar

— Pero sabe sobre el amor, a pesar de todo, Ellie lo ama y se lo hace saber 

— Bueno, si realmente es así, entonces quizá pronto puedan ser una familia feliz.

Volvimos temprano a casa, Olivia tenía que seguir trabajando así que no se quedó mucho tiempo junto a mi. Nuevamente estaba sola en casa.
































Soy Olivia Benson, un gustoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora