- Cap. 16 -

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Día de la prueba física, era durante la tarde así que esa mañana, todo el equipo de investigación viajó junto a mi. Cuando llegamos a la ciudad, almorzamos juntos y nos quedamos en el lugar donde serían las pruebas, un estadio de fútbol.

Media hora antes de empezar, llegó Fin junto a todo su equipo, mi mamá, su novio y Demian. Prioricé mi atención en Demian a quien cargué en brazos dándole un beso en sus pronunciadas mejillas.

Todos se sentaron el las gradas, el único que bajó junto a mí fue Hank.

También estaba el detalle de que todos llevábamos una camiseta azul oscuro que llevaba mi nombre en la espalda.

Un hombre robusto, con la típica pinta de profesor de educación física o de entrenador de fútbol infantil, se paró delante de todos nosotros y nos explico lo que iba a suceder. Nos paramos como nos indicó y esperamos a que todo comenzara

Hank lo único que hizo fue verme desde lejos.

El hombre de las indicaciones pitó el comienzo de la prueba y tenía un minuto para hacer flexiones, si llegaba a 71 era puntuación perfecta (10).

Tenía a alguien supervisando la validez de cada flexión.

— ¡Últimos 10 segundos! — gritó alguien a la distancia

Había perdido la cuenta en algún momento, pero estaba segura de que estaba en las 50 y algo con el detalle de que mis brazos estaban ya pidiendo un descanso.

— 10 más Julieta, 10 más — dijo Voight

Respire profundo, todas las palabras de apoyo volvían a mi llenandome como la cafeína en estos últimos meses.

1
2
3
4
5
6

— 5 segundos — volvieron a anunciar

7
...
...

— ¡Vamos Julieta vamos!

8
9
..
10

Dejé caer mi cuerpo sobre el césped, sentía los músculos de mis brazos arder.

Hank golpeó mi espalda un par de veces.

— Julieta Voight, 10 puntos — dijo el muchacho que estaba contándome las flexiones. 

Comenzaron a correr los 5 minutos de descanso así que Hank me ayudó a estirar un poco los músculos.

— Siguen las sentadillas, no mires ni escuches a nadie ¿Está bien? Concéntrate en tí

— Está bien, lo entiendo — le contesté dando una rápida mirada a las gradas

La prueba comenzó pasados los 5 minutos de descanso, logré 62 sentadillas lo que me dió un total de 9 puntos.

Lo siguiente era el Sprint de 300 metros que se lleva a cabo en la pista que rodea el césped.

— Ambos sabemos que este es tu fuerte, así que concéntrate, confío en ti — dijo Hank

Tomé agua, me saqué el sudor del rostro y me preparé.

— Todos los candidatos de la primera rueda a sus lugares, repito, todos los candidatos de la primera rueda a sus lugares. — dijo una voz a través de un parlante

Me puse en mi lugar, justo en medio de todos los carriles.

Di una última vista hacia donde estaban todos, por un segundo me puse sentimental, jamás creí que tanta gente vendría a verme.

Anunciaron la salida, la bocina sonó y comencé a correr, correr y correr. De a momentos sentía las zapatillas resbalosas, perdía estabilidad en mi y las vueltas se volvían eternas, Hank me daba ánimos cada que cruzaba cerca de él y en ningún momento dejaron de gritar todas esas personas que llevaban una camiseta con mi nombre.

Soy Olivia Benson, un gustoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora