- Cap. 84 -

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El reloj marcaba poco más de un día desde la desaparición de Olivia y Julieta, y la preocupación se cernía sobre la oficina del FBI como una nube oscura. En la oficina de Isobel, Fin y Jubal  se reunieron con ella para analizar la grave situación.

—Es inaceptable —dijo Fin, golpeando la mesa con frustración—. Un día entero sin avances y no tenemos ni una pista. Tenemos que hacer algo más.

Isobel cruzó los brazos, sintiendo el peso de la responsabilidad. Había trabajado codo a codo con ambas durante años, y la idea de que estaban en peligro la inquietaba profundamente.

—No podemos dejar que esto se convierta en un caso frío —agregó Jubal, su voz grave resonando en la sala—. La comunidad necesita saber lo que está sucediendo. Si no actuamos ahora, podríamos perder la oportunidad de encontrarlas.

Fin asintió, la determinación brillando en su mirada.

—Hagámoslo. Una conferencia de prensa. Necesitamos la ayuda del público, y no hay tiempo que perder. —Se volvió hacia Isobel—. ¿Estás lista para dar la cara?

Isobel tomó un respiro profundo. Sabía que esto significaba asumir un riesgo, pero no había tiempo para el miedo.

—Sí, lo haré. Pero debemos ser claros sobre lo que hemos hecho y lo que Olivia y Julieta significan para esta ciudad. No son solo agentes; son héroes que se preocupan por la gente, y necesitamos que la comunidad se involucre —respondió, su voz firme.

La sala se llenó de un aire de esperanza y resolución. La decisión estaba tomada, y mientras Isobel se preparaba, los tres compartieron miradas de complicidad, conscientes de que su deber era mayor que sus miedos individuales.

La conferencia de prensa fue un evento tenso, con los medios de comunicación alineados y las cámaras listas para capturar cada momento. Isobel se presentó ante el micrófono, su postura erguida, mostrando una fuerza que escondía su preocupación.

—Buenas tardes a todos. Estoy aquí para informarles sobre un asunto de gran importancia —comenzó, su voz resonando en la sala—. La Capitán Olivia Benson y la Detective Julieta Voight Tutuola han estado desaparecidas por más de 24 horas. Ambas son fundamentales para nuestras comunidades y han dedicado sus vidas a servir y proteger a esta ciudad.

La atención de los periodistas se intensificó, y los murmullos comenzaron a surgir entre la multitud.

—No estamos aquí solo para pedir su ayuda, sino para recordarles lo que ambas representan —continuó Isobel—. Son profesionales valientes que han hecho sacrificios enormes para mantener la seguridad de todos. Pedimos que, si alguien tiene información sobre su paradero, no duden en comunicarse con nosotros. Cada detalle es crucial.

La desesperación en su tono resonaba en la sala, y los flashes de las cámaras estallaban mientras se enfocaban en su rostro, visiblemente preocupado pero decidido.

Detrás de Isobel, Fin y Jubal intercambiaron miradas. Sabían que la decisión de hacer la conferencia era una señal de que el tiempo se les estaba acabando, pero también sentían una nueva energía, una unidad en la misión que tenían por delante.

Mientras la noticia se expandía rápidamente, el equipo del FBI se dividió en grupos, cada uno enfocado en diferentes aspectos de la investigación. Fin y Jubal revisaban grabaciones de seguridad en la oficina, intentando descifrar el último lugar donde fueron vistas Olivia y Julieta.

—Mira esto —dijo Fin, apuntando a la pantalla—. Aquí están. ¿Por qué se detuvieron en este lugar?

Jubal se acercó, observando la imagen detenidamente. En el video, las dos mujeres parecían discutir algo con una persona fuera de la vista de la cámara. La incertidumbre crecía entre ellos.

Soy Olivia Benson, un gustoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora