Julieta había despertado antes de que el sol saliera del todo, mirando a Olivia mientras dormía profundamente a su lado. Era temprano, demasiado para empezar el día, pero su mente ya estaba trabajando en los detalles del plan que llevaba días preparando. Ella sabía que Olivia había olvidado la fecha, y sinceramente, no la culpaba. Después de todo lo que habían vivido recientemente, no esperaba que su esposa tuviera cabeza para recordarlo. Pero para Julieta, eso no importaba. El olvido de Olivia era comprensible, y no lo tomaría como un desaire. De hecho, lo había previsto y planeado a su favor.
Con cuidado de no despertar a Olivia, Julieta se deslizó fuera de la cama y se dirigió al baño. Mientras se cepillaba los dientes, pensó en los pequeños detalles que ya tenía listos: las flores que había pedido a Stuart que consiguiera, la cena especial que tenía preparada en el restaurante donde solían ir cuando recién empezaban a salir, y el detalle final que sería la sorpresa perfecta para Olivia. El aniversario de su boda era hoy, y aunque Olivia no lo recordara, Julieta se aseguraría de que fuera una noche que no olvidarían.
Horas después, cuando Olivia despertó, Julieta fingió no saber nada y mantuvo la conversación ligera y normal. No había necesidad de que Olivia se sintiera mal. Lo importante era lo que había preparado para más tarde.
– Hoy tengo que ir a la oficina un rato – mencionó Olivia mientras buscaba algo cómodo para ponerse. – Nada pesado, pero Fin quiere que revisemos unos detalles del caso antes de cerrar por completo.
– Está bien, yo también tengo algunas cosas que hacer – respondió Julieta, intentando sonar casual mientras contenía una sonrisa. Sabía que Olivia no sospechaba nada.
A medida que la mañana avanzaba, Julieta se dedicó a ultimar los detalles. Llamó a Amanda para asegurarse de que el restaurante estaba listo, revisó con Fin que Noah estuviera entretenido para no tener que preocuparse por él más tarde, y pidió que su coche fuera lavado y listo para la ocasión especial. Quería que todo fuera perfecto para Olivia.
Más tarde, cuando Olivia regresó a casa, exhausta pero satisfecha por haber cerrado los últimos cabos del caso, se sorprendió al abrir la puerta. El aroma de las flores llenaba el aire, y las velas suaves iluminaban el salón, creando un ambiente acogedor. Olivia se detuvo, mirando a su alrededor con una mezcla de sorpresa y desconcierto.
– ¿Qué es todo esto? – preguntó Olivia mientras observaba la mesa preparada con flores frescas y velas encendidas.
Julieta apareció desde la cocina, con una sonrisa en el rostro y una copa de vino en la mano. Estaba vestida con algo sencillo pero elegante.
– Bienvenida a casa, Liv – dijo Julieta, acercándose con una expresión serena. – Feliz aniversario.
Olivia se quedó congelada por un momento. La culpabilidad la golpeó de inmediato al recordar lo que había olvidado.
– ¡Oh, Dios mío! – Olivia se llevó una mano a la cabeza. – Jules, lo olvidé por completo. Ni siquiera pensé en el aniversario...
Julieta, sin perder la calma, dejó la copa en la mesa y se acercó para tomar las manos de Olivia. Sus ojos transmitían comprensión y amor, no había ni un atisbo de reproche.
– Lo sé – respondió con una pequeña risa. – Sabía que lo olvidarías, Liv. No te preocupes, todo está bien.
Olivia la miró, confundida pero agradecida por su comprensión. Julieta había previsto todo, y la culpa que Olivia sentía empezaba a desvanecerse poco a poco.
– No puedo creer que lo olvidé... – murmuró Olivia, mirando a Julieta con una mezcla de admiración y remordimiento.
– No necesitas recordarlo todo para saber cuánto te amo – Julieta le acarició el rostro suavemente. – Esta noche no se trata de lo que se olvida, sino de lo que hemos construido juntas. Y eso es lo que vamos a celebrar.
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Soy Olivia Benson, un gusto
RandomUna joven oficial con un pasado difícil, un presente firme y un futuro muy prometedor. Una sargento con una vida difícil, muy dedicada a su trabajo. Dos mujeres con pasado difícil, muy trabajadoras y buenas oficiales. ¿Pasara algo cuando se encuentr...