Delicate || Martuli

Capitulo 1

Pov Luli

Eran las 8 de la mañana y estaba despertandome en mi primer día en Nueva York. Había llegado ayer por la tarde al departamento y no tuve tiempo de recorrer nada. Hoy tenía mi primer día en el estudio de fotografia y eso me tenia tan asustada como ansiosa.

Después de apagar por cuarta vez mi alarma, decidí que ya era momento de levantarme. Abri las cortinas, tome unas toallas y me dirigi a la ducha. Cuando termine de bañarme, me lave los dientes y abri la ventana para chequear el clima. El día estaba fresco, habia bastante viento, asique tome la decisión de ponerme un pantalon negro suelto, un buzo blanco, un gorro de lana de igual color y un camperon abrigado tambien color negro. Por último, me calze unas nike beige y me prepare un cafe para llevar. Eran las 9 y a las 10 tenia que estar en el estudio, no tenia tiempo de desayunar si quería llegar con tiempo. Por último, tome mi mochila, guarde mi camara entre otras cosas y baje inmediatamente.

Eran aproximadamente 10 cuadras hasta llegar, cualquier otro día tomaria el riesgo de ir caminando pero hoy no decidí hacer todo con el mayor margen de tiempo a mi favor posible. Con mi bolso en una mano y mi cafe en la otra, llame un taxi que enseguida freno. Una vez arriba le indique la dirección y arranco enseguida para allá.

Al llegar, vi un inmeso edificio, que tenia al rededor de 30 pisos. Me senti un poco intimidada, pero suspire profundo y entre.

—Hola buenos días. ¿En que puedo ayudarte? —me hablo con una voz muy amable la chica de recepción.

—Buenos días. —respondí. —Vengo porque soy pasante y me citaron a las 10, ¿sabes a donde tengo que ir? —pregunte algo nerviosa.

—Si, anda hacia el ascensor y marca el piso 13. —me señalo el lugar donde habian 4 ascensores enormes. —En la puerta te anuncias con tu nombre, es la sala de reuniones, tenes que esperar ahí. —explico.

—Genial, muchisimas gracias. —le agradeci y me dirigi hacia los ascensores.

Cuando subi, para mi suerte no habia nadie. Así que hasta llegar al piso 13 eramos solo mis pensamientos y yo. Una vez que el ascensor llego al piso correspondiente, camine por un pasillo hasta llegar a la única puerta que había allí.

—Buen día señorita, ¿su nombre? —preguntó el guardia en la entrada.

—Lourdes Gonzalez. —respondí yo.

—Puede pasar. —me permitio el acceso despues de chequear que mi nombre estuviera en la lista.

Cuando entre, la sala era enorme, habian 10 sillas acomodadas en dos hileras y un escritorio en frente con una pizarra detrás. Ya habian bastantes personas así que me dirigi a escoger un asiento. Fui duditativa pero termine eligiendo uno de la segunda fila. Estaba nerviosa, miraba el reloj y el tiempo se me pasaba super lento. Mi pie se movia solo, denotando más la ansiedad que tenía por estar alli.

Después de 20 minutos, la puerta se abrio llamando la atención de todas las personas que estabamos en el lugar. Era ella, era Selena Mosca. Yo era muy fan de su trabajo, de hecho, me inspire mucho en su historia para seguir adelante con mi sueño de ser fotografa, todo lo que había logrado con tan solo 26 años, me impresionaba. Yo realmente la admiraba.

—Buenos días a todos. —nos saludo sentandose en el escritorio. Los murmullos para contestarle no tardaron en llegar. —Como veran, solo hay 10 de ustedes sentados aca en frente mio y aunque no lo crean, en ese lugar que estan ocupado sus lindos traseros, hay más de 500 personas que estaban deseando ocuparlos. —empezo a hablar. —Y entre toda esa gente, ustedes fueron los seleccionados por mi para que sean parte de este estudio, es una oportunidad única, importante, que tienen que saber aprovechar. —sus palabras hacian que yo tiemble cada vez más. —Estan aca porque entre todas esas personas que aplicaron, sus portafolios fueron los que más llamaron mi atención. —sentí eso como una pequeña victoria. —Así que les voy a ser breve y sincera, no espero menos de eso a partir de ahora. Sus trabajos tienen que ir reinventandose y superandose cada vez más, tienen que lograr sorprenderme, hacer un buen trabajo que me recuerde constantemente por qué los elegí. —todo lo que escuchaba salir de la boca de esta mujer me ponía cada vez más nerviosa. —Como veran, este enorme edificio tiene 30 pisos y cada uno de ustedes fue traido hasta aca porque tienen formas distintas de ver el mundo y la fotografia, y yo tengo distintos tipos de areas que cubrir. —empezo a explicar. —Ahora mi asistente va a pasar dandoles sobres, en ellos van a encontrar toda la información necesaria junto con sus contratos, solo uno de ustedes va a trabajar conmigo como mi pasante directo, al resto los delegue con otros jefes de area de fotografia en distintos pisos donde yo crei que serian mas convenientes. —enseguida un chico moreno de rulos paso repartiendonos los sobres.