Capitulo 26

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Pov Marti

Ya estaba en un avion volviendo a Nueva York. Cuando vi a Lourdes besar a Julian senti que todo lo que estaba intentando hacer por ella era en vano, porque habia llegado tarde. Y esa era absolutamente toda culpa mía por no haber sido capaz de decirle lo que sentía.

Brisa fue por mi al aeropuerto y lo primero que hizo al verme fue golpearme con su cartera.

—¡Auch! —le manifeste mi dolor.

—¿Como te vas a ir a Filadelfia con Lourdes y no avisarme nada? ¡POR DOS SEMANAS! —ella se entero por Angie que le conto Lourdes todo lo que habia pasado.

—Perdon, no estaba pensando en nada más cuando me fui. —le respondi.

—Si ya veo. —entrecerro sus ojos. —Ni en tu prometido.

—Por favor no toques ese tema, no quiero que me empiece a doler la cabeza otra vez. —me puse mis lentes de sol y empece a caminar hasta la camioneta de mi amiga.

—Es el tema que tu papá no para de tocar con el mio. —me dijo.

—Llevame al Palace, estoy tan cansada para lidiar con esto. —ella no dijo nada más y me hizo caso.

Se ofrecio a quedarse conmigo pero yo preferi que no, le dije que cuando me sintiera mejor saldriamos a comer con Nicolas, quien tambien estaba insistente con sus mensajes queriendo saber que pasaba con mi vida.

Ni yo sabia la respuesta.

—Señorita Martina..—hablo la mucama. —El señor Odoguardi esta en la puerta ¿lo dejo pasar? —esperaba mi respuesta. Después de pensar unos segundos si era buena idea di mi visto bueno.

—Hola, perdon por venir sin avisar. —se disculpo Gian mientras se acomodaba en el sillon.

—No pasa nada. —respondí. —¿Algo para tomar? —negó y yo me servi un vaso de whiskey para mi.

—¿Todo bien con la hermana de Lourdes? —pregunto de manera sincera.

—Si, por suerte ya esta fuera de peligro. —le conteste. —Y escucha..

—Yo...—hablamos ambos al mismo tiempo. —Adelante, habla. —me dio la palabra a mi.

—Me quiero disculpar por haberme ido, por haberte engañado con todo el tema de Lourdes, por no haber sido sincera cuando acepte lo del viaje a Hawaii para ser una pareja más seria, yo sabia que no iba a poder y aún asi te dije que si. —me confese. —Mi intención no era lastimarte pero lo hice de todas formas así que...perdón.

—Esta bien, no tenes que disculparte...lo que no entiendo es ¿por qué aceptaste de todas formas? ¿por qué seguiste adelante si estabas enamorada de alguien más? —lo notaba algo afligido por este tema, buscando respuestas.

—Porque pense que si me quedaba con vos, no iba a tener que enfrentarme a lo que sentia por ella. —agache la cabeza. —Me equivoque porque jugue con tus sentimientos, con los de Lourdes y con los mios, pero al mismo de tiempo no tenia opcion con nuestros padres presionandonos.

—La cena con mi madre, ese día discutiste con tu padre y te fuiste, ¿fue por nosotros? —yo negue y el espero que le explicara el por qué de esa pelea.

—Mi padre no esta de acuerdo con el 99% de las cosas que hago y la mejor forma de hacermelo saber es amenazandome. —él asintió pero confundido, no estaba segura si entendia mucho pero no quiso seguir mencionando el tema.

—¡Miren quienes estan aca! —justo, hablando de Roma. —Los noviecitos que justo estaba buscando.

—Señor Benza. —saludo Gian.

Delicate || MartuliDonde viven las historias. Descúbrelo ahora