Pov Marti
2 semanas pasaron desde la última pelea con Lourdes, pero yo sentía que era una eternidad. Le mandaba mensajes pero no recibía respuestas y ya no sabía a este punto que era lo que tenía que hacer. Estaba quedandome con Brisa porque no era lo suficientemente fuerte para volver sola a mi suite. Ella ya se había arreglado con Angie, cosa que me ponía feliz por mi mejor amiga pero verlas juntas y bien de nuevo me hacian preguntarme si en algún momento Lourdes me perdonaría.
—Vamos a ir al cine, ¿queres venir? —pregunto Brisa.
—Vayan tranquilas, hoy no tengo muchas ganas de salir. —conteste.
—¿Segura? —se quiso asegurar de mi respuesta.
—Si, aparte tambien merecen salir solas, hace dias que soy como su hija adoptada. —las tres reimos.
—No nos molesta para nada. —hablo Angie esta vez.
—Lo se pero de verdad hoy no estoy de animos. —ambas aceptaron mi negativa y se prepararon para salir.
Cuando Brisa fue al baño me quede sola con Angie, las ganas de preguntarle por la ojiverde eran más grandes de lo que aparentaba, despues de unos segundos no resisti más y lo hice.
—Angie...—llame su atención y ella volteo a verme.
—¿Qué? —preguntó.
—Se que quizas...no se, no deberia pero...—intente hablar pero me interrumpió.
—Lourdes esta bien. —ya sabía lo que le iba a preguntar.
Yo solo asentí. Entendía que ella tomara partido por su amiga, pero necesitaba saber más, aunque me alcanzaba con saber que estaba bien.
Ambas se fueron y yo me quede viendo peliculas hasta quedarme dormida. Al otro día me levante y me pegue una ducha, hoy tenia una reunion con mi padre en la constructora y no tenía muchas ganas pero nuestra relación ya estaba lo suficientemente tirante como para que empeore.
Al llegar, habian bastantes personas que yo no conocía, las oficinas eran completamente nuevas y el edificio era enorme. Entre a la sala de juntas y tome mi lugar, una vez que todos entraron, mi padre se hizo presente.
Dio un largo sermon que les voy a ahorrar escuchar porque los va a aburrir tanto como a mi, yo ya no veia la hora de irme. Cuando la reunion estaba llegando a su fin, solo quedaba presentar a su nuevo inversionista.
—Por último, toda esta nueva era no sería posible sin esta persona que confio en el proyecto. —empezo a preparar el terreno para la presentación. —Él y su hijo van a ser partes fundamentales de la empresa, así que quiero que le den una calida bienvenida al señor Victor Odoguardi y a su hijo, Gianfranco Odoguardi. —no había manera, esto no podía estar sucediendo.
Me alarme por completo al ver que el hijo del nuevo socio de mi padre era el tipo con el que estuve en la fiesta de Selena. ¿El universo me odiaba o algo parecido? Hicimos contacto visual y él me sonrió algo sorprendido por verme acá.
La reunion termino y yo sali disparada de ahí, no queria hablar con nadie. Pero la secretaria de mi padre me detuvo dandome una caja llena de archivos que tenia que llevar a mi nueva oficina.
—¡Martina! —escuche que me llamaban y voltee, era Gian. —Que loco cruzarte aca.
—Es la empresa de mi padre. —dije levantando los hombros.
—Si..o sea, lo se, lo que quiero decir es que...no esperaba que la proxima vez que nos volvieramos a ver sería aca. —estaba nervioso.
—Bueno, espero que tengas un lindo día. —le dije cortando la charla.
ESTÁS LEYENDO
Delicate || Martuli
FanfictionMartina Benza es la hija del empresario y dueño de la cadena de hoteles más importante de todo Nueva York. Después del fallecimiento de su madre, las peleas por la rebeldía de la chica rubia formaban parte de la rutina de Dan Benza. Hasta que por fi...