Pov Luli
Habian pasado semanas largas. Estaba trabajando demasiado últimamente porque había aceptado la propuesta del New Yorker para ser su fotografa oficial y aún seguía en el estudio de Selena. Era lo que a mi más me gustaba hacer, no me quejaba pero en este momento que estaba pasando Martina, yo sentía que no tenia el tiempo suficiente para estar apoyandola.
—¿En que pensabas? —mi amiga de pelo azul me interrumpio.
—En lo de Marti. —le respondí.
—¿Sigue sin salir de su casa? —yo asentí.
—Sale lo justo y necesario, y en la puerta de su departamento siempre hay como 5 o 6 reporteros molestos esperando a que baje y les de el titular del año. —conteste indignada.
—Es un bajon, la verdad que yo no se que haria en su lugar. —respondio. —Creo que me iria de viaje a alguna parte en la que sepa que me dejarian en paz, un tiempo hasta que se calme todo. —eso hizo que se me ocurriera una idea.
—¡Angie te amo! —le dije besandole toda la cara.
—Para un poco que Brisa se va a enojar con las dos. —se despego de mi y yo reí.
—Le pido perdon pero ahora entiendo porque siempre te besa. —bromee.
—¿Ah si? ¿Y cual seria la razón esta vez? —pregunto.
—Tenes muy buenas ideas. —le conteste y ella me miro sin entender. —Puedo llevar a Martina a la casa de mi familia, en Filadelfia, ahi nadie la va a molestar y puede normalizar un poco su vida hasta que toda esta persecución mediatica disminuya un poco.
—Pero...¿y el trabajo? —era un punto que no había tenido en cuenta.
—Voy a tener que solucionarlo, hablar con Sele y dejar lo del New Yorker. —le conteste.
—Es un trabajo muy importante el que tenes ahí Lourdes, no se que tan prudente sea dejarlo por los problemas de Martina. —intento hacerme entrar en razón.
—Si lo se, pero ella me necesita y es mas importante eso para mi hoy en día. —le afirme.
—Yo te apoyo, pero quiero que sepas mi postura. —me dijo. —Ser fotografa es tu sueño de siempre y trabajaste duro para conseguirlo, yo le tengo mucho cariño a Marti y deseo que todo este hostigamiento de los medios hacia ella se detenga, pero ella siempre estuvo en el ojo público, ocasiona problemas y arrastra a quienes estan con ella a ese desastre, no quiero que lo mismo te pase a vos. —apreciaba su preocupación.
—Se que lo decis porque yo te importo, y lo agradezco mucho. —le di un corto abrazo. —Te prometo que voy a cuidar mi profesion de todas formas, pero ahora necesito cuidarla a ella.
—Lo se. —me respondió.
Después de esa charla con Angie volvi a mi departamento pensando. Sabia que era imprudente dejar todo por Martina, pero yo queria hacerlo, y tambien era una excusa para volver a ver a mi familia. Tome mi bolso y fui hasta lo de la rubia, todavia los reporteros no sospechaban que a quien iba a visitar era a ella, pero no sabia cuanto más podian tardar en atar cabos sueltos pero por ahora, cada vez que me preguntaban yo decia que era la sobrina que le cuidaba el departamento a su tio. Eso bastaba para que no pregunten más.
—Hola mi amor. —le dije una vez que me abrio la puerta.
—Hola Lulita. —me contesto con un beso.
—¿Como estas hoy? —le pregunte mientras acomodaba mis cosas.
—Pase horas leyendo twitter y buscando mi nombre. —me contesto.
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Delicate || Martuli
FanfictionMartina Benza es la hija del empresario y dueño de la cadena de hoteles más importante de todo Nueva York. Después del fallecimiento de su madre, las peleas por la rebeldía de la chica rubia formaban parte de la rutina de Dan Benza. Hasta que por fi...