The Night Of Passion | Jungwon Yang

capítulo 7

— ¿Por qué no me dijeron que estaban juntos?—Jiwon me preguntó mientras comía de su helado. Después del intento fallido de Jake para hacerme pelear con mi mejor amiga, ambas decidimos hablar a solas y escogimos la heladería a la que íbamos seguido.

— Ambos creímos que te enojarías...

— ¿Por qué?—preguntó con el ceño fruncido.

— Bueno, eres muy sobreprotectora con Jungwon, además no estabas muy contenta con el estilo de vida que yo tenía.—respondí moviendo mi helado con la cuchara.

— Oh.—fue lo que salió de sus labios.— Bueno, en eso tienes razón, cuido mucho a mi hermano, tal vez de más pero es porque lo quiero... Y también te quiero a ti, por eso quería que dejaras ese estilo de vida, ¿acaso no recuerdas cómo estabas? De fiesta en fiesta, metiéndote con los amigos de tus novios. Estaba aliviada cuando iniciaste una relación más formal con Jake, aunque ese imbécil resultó ser peor que pisar caca de perro en la calle.—solté una gran carcajada por lo último que dijo.

— Cuando hablas así me das mil años de vida,  ¿podrías decir caca otra vez?—me fulminó con la mirada y volví a reír. Me acomodé en mi asiento limpiándome las lágrimas que se me habían escapado por la risa y suspiré.— Siento que Jake fue mi karma por haber sido infiel en mis relaciones pasadas.

— Pues ese karma se te regresó el doble, ¿con cuántas te engañó?

— No lo sé, no le pregunté pero supongo que con todas sus amiguitas, ya ves que siempre peleábamos por eso.—seguí comiendo mi helado, recordando mi historia con Jake. 

Jake había llegado de Australia unas semanas antes de que lo conociera, Jay y él ya se conocían por lo que en una de las tantas fiestas que el novio de mi mejor amiga hacía, lo conocí. Mentiría si dijera que fue amor a primera vista, porque no lo fue, fue más bien... Una conexión especial, no sabría muy bien cómo describirla. En esa fiesta pasamos toda la noche platicando y riendo, fue una buena noche.

No tardamos mucho en comenzar a salir, todo era de color de rosa hasta que de la nada, unos meses después de haber iniciado la relación comenzó con un comportamiento posesivo y controlador, me celaba cada que un chico me hablaba y, de alguna manera desconocida para mí, se había enterado de mi pasado con los otros chicos que en ese momento eran sus amigos. Básicamente me prohibió hablarles y él también cortó toda relación con ellos. Seguía sin saber que había pasado, quien le había contado ya que casi nadie sabía sobre eso, quizás sólo tres personas más aparte de los que estuvimos implicados.

Y a pesar de todo lo que hacía, porque los celos no eran lo único, yo seguía creyendo que Jake era el indicado para mí, con el que me casaría y formaría una familia. Qué idiota era. Y estaba segura de que si no lo hubiera encontrado en el acto con la tipa esa, tal vez seguiría con él. Me daban escalofríos de sólo pensarlo.

— Analizando la situación con la cabeza fría y meses después, creo que lo que sucedió con Jake me ayudó a madurar.—murmuré mirando a la nada.— Poco a poco fui dejando las fiestas, el alcohol, todavía me falta mejorar algunas cosas como prestar atención en las clases y hacer mis tareas pero para allá voy... Tal vez.

— La verdad sí he notado un cambio en ti y uno bueno.—miré a Jiwon y ésta me sonrió.— Por eso estoy más tranquila con que seas novia de Jungwon... Pero aún así te advertiré, si le rompes el corazón a mi hermano te las verás conmigo.—dijo con expresión seria y la verdad me intimidó un poco, se volvía muy brava cuando de su familia se trataba.

— No le romperé el corazón, te lo prometo...—apoyé el mentón en mi mano, una pequeña sonrisa apareciendo en mis labios.— Con tu hermano siento algo diferente, algo que no he sentido antes, aunque suene cliché... No te burles pero cuando estoy con él me siento parecido a como mi prima de doce describe como se siente al estar cerca del niño que le gusta, es extraño.

— ¿No te sentiste así con tu primer novio?—preguntó alzando las cejas.

— No... No recuerdo si te conté pero mi primer novio era cinco años mayor que yo.—me miró con los ojos bien abiertos de la impresión y negó con la cabeza. Lo más seguro es que no le haya contado porque era algo que me avergonzaba mucho.— Yo tenía quince y él veinte, en su momento no lo vi mal, al contrario, me parecía que era algo genial pero ahora que soy mayor me arrepiento totalmente... Te imaginarás como fueron las cosas, no viví un romance adolescente convencional... Y para rematar estuve dos años con ese tipo, para los diecisiete cuando terminé con él ya tenía otra idea de los noviazgos.

— ¿Y tus padres no dijeron nada?—me encogí de hombros.

— Lo más seguro es que ni enterados estuvieran.

Luego de esas últimas palabras nos quedamos en silencio, el tema de mis padres era un tema delicado del que nunca hablábamos.

— Se me ocurrió algo, ¿por qué no vienes a cenar esta noche a mi casa?—preguntó cambiando por completo de tema.— Me da curiosidad verte con mi hermano.

— ¿Estás segura de eso? ¿Y si no le caigo bien a tus padres?

— Estoy segurísima, les caerás muy bien.—sonrió ampliamente.

Apreté los labios, en ninguna de mis anteriores relaciones había conocido a los padres de mis novios. Esa sería la primera vez, lo cual me ponía muy nerviosa, en verdad quería caerle bien a los padres de Jungwon y Jiwon.