Trampa

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La noche está completamente tranquila.

Es tan silencioso que es casi inquietante. Te sientas sobre los aparejos del mástil de mesana (el favorito de Wooyoung recuerdas con tristeza), meciéndote de un lado a otro con los pies colgando en el aire, perdida en tus pensamientos. A lo lejos bajo de ti el brillo de las antorchas ondea débilmente sobre la superficie del mar, la luz de la luna se oculta y se desvanece detrás de las nubes como un fantasma en la noche.

Sigues el rastro que dejan los rayos de la luna, levantando la mirada hacia el cielo. Está oscuro, una tenue luz plateada se asoma entre las oscuras nubes de tormenta. Es como si estuvieran anunciando la llegada de algo siniestro, algo sombrío... y no estás segura de si deberías sentirte preocupada.

De pronto sientes algo que te regresa a tu estado de alerta.

Frunces el ceño, tus ojos escanean casualmente la cubierta debajo de ti, pero tu respiración se queda atrapada en tus pulmones, tus dedos se acercan inconscientemente a la navaja en tu cinturón. No es sorpresa que estés intranquila, casi ansiosa, con lo vulnerable que está el Treasure y la cautela natural que surge con la noche, pero antes de que tus ojos puedan alejarse demasiado del barco, algo cerca del castillo de proa llama tu atención.

Es Yunho.

Está recargado contra la amurada de la proa, viendo con nostalgia la oscura forma de la isla frente a él, una figura solitaria en una noche solitaria. Desearías poder ir con él, consolarlo de alguna manera, decirle que todo va a estar bien, pero justo ahora debe estar sobrellevando el dolor y la traición. Puede que no sea el mejor momento.

Después de todo, tú fuiste quien lo noqueó con un tarro de madera.

Puedes ver el cansancio en sus hombros caídos, la forma que sus dedos aprietan y sueltan los barandales de la borda. Si estuvieras más cerca, podrías jurar que sus nudillos se han vuelto completamente bancos, sin gota de sangre, pero está demasiado alto en la cima del mástil y casi completamente a oscuras.

No sientes más que preocupación por Yunho. El mayor de los dos maestros de batalla todavía está sufriendo por los efectos del veneno, quedando impotente mientras ve a la tripulación literalmente en camino a matar al hermano que tanto ama. Gunho pudo haberlo traicionado, pero conoces a Yunho. No completamente, pero sí lo suficiente, al menos.

Él es demasiado bueno para su propio bien.

Suspiras, sosteniendo el mango de tu sable con fuerza, trazando el cuero gastado de la empuñadura con el pulgar. En este caso, tienes que ser egoísta, recuerdas. Rezas para que encuentren el antídoto, y si es necesario, que puedan matar a Gunho o al capitán Kang para obtenerlo. Por mucho que odiarías ver sufrir a Yunho por la segunda pérdida de su hermano, la vida de Yunho es mucho más importante para ti.

—¡Chin Hae!

Casi saltas por el susto, volteas rápidamente a tu alrededor en busca del origen de la voz, mientras oleadas de pánico te recorren. Para alivio tuyo, sólo es tu capitán, de pie en la cubierta saludándote alegremente, luciendo como una pequeña hormiga desde arriba. —¿Puedo subir?

Frunces el ceño, ligeramente preocupada, recordando lo terrible que eras para escalar el mástil la primera vez, aún con Yunho debajo de ti cuidándote en caso de que te cayeras. Nunca has visto a tu capitán escalar por los aparejos, así que te inclinas y lo miras con preocupación. —Sí, pero, ¿necesitas que te ayu-...

Tus palabras se desvanecen en la nada mientras observas a tu capitán saltar por las cuerdas, escalando los aparejos con gracia como si hubiera sido su hábitat natural todo este tiempo y luchas contra el impulso de golpearte en la cara. Por supuesto que tu capitán es capaz de escalar el mástil por sí mismo, aparte de empuñar dos sables al mismo tiempo en una batalla, liderar una tripulación y dirigir un barco. ¿por qué pensarías que habría algo que tu capitán no pudiera hacer?

Pirate King (pirate!au) ➵ ATEEZ (Traducción al Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora