Desde el mástil observas cómo Nassau aparece en tu campo de visión.
Los últimos días los han dedicado a prepararse para el plan. Para disfrazar el barco, la tripulación y tú han trabajado sin descanso en todo el viaje hacia la ciudad natal de Seongwha, bajando las distintivas velas azules, cambiándolas por unas velas grises y desgastadas por el tiempo.
Con el paso de los días, Wooyoung y tú se han vuelto más cercanos por trabajar juntos en las velas todo el tiempo. El artillero sólo con ver tu rostro después de tu incidente con Yeosang, se ofreció a sentarse contigo en la cofa hasta que te sintieras mejor. Aunque estabas llena de enojo, a punto de rechazarlo, él simplemente dijo que no haría ninguna pregunta.
No estaba sonriendo cuando lo dijo, así que aceptaste.
Yeosang nunca vino a disculparse, el muy cobarde.
Ambos permanecieron en silencio en la cofa, viendo la puesta de sol y las estrellas saliendo en la noche. La mayor parte del tiempo estuviste esperando que Wooyoung abriera la boca para hacer alguna pregunta tonta, pero siempre permaneció en silencio, sin siquiera voltear a verte. Los dos simplemente observaban el océano y el cielo volverse uno, mezclándose en un lienzo negro con las estrellas reflejándose en mar debajo tuyo. Y has estado pensando mucho sobre lo que le dijiste a Yeosang.
Te odio.
Dijiste la peor palabra que pudiste haber usado. Sólo estabas enojada con él, no es como si te desagradara inmensamente. Habías perdido completamente la maldita cabeza.
Yeosang, una de las personas más puras y tranquilas que alguna vez haya pisado la tierra y navegado el océano. El silencioso, amable y sabelotodo navegante a quien viste hablando con las aves en el puerto de Tortuga porque estaba tan fascinado con ellas. El hombre que no te había mostrado más que amabilidad y consuelo. Aquél que nunca dudó en ayudarte sin importar lo que pidieras y respondía a tus preguntas sobre cualquier cosa. Le dijiste que lo odiabas.
—Creo que arruiné algo. —Le dices a Wooyoung, con la cabeza recargada en su hombro. Una cosa que has aprendido sobre Wooyoung es que amaba el contacto físico, hasta lo anhelaba, siempre y cuando no lo tomaras por sorpresa. Rodea tus hombros con su brazo, acercándote para mantenerte cálida en esta fría noche.
—¿Te acabas de dar cuenta? —El tono de su comentario fue todo menos sarcástico y después no dice nada más. Te quedaste dormida en su hombro, como esperando que su calidez pudiera protegerte de la culpa y la ira congelada dentro de ti.
Cuando despertaste la mañana siguiente, él todavía estaba en la misma posición, con un brazo alrededor tuyo, viendo el amanecer.
En todo el camino hacia Nassau, no has hablado con Yeosang ni una sola vez. A pesar de que ambos se han cruzado en el camino del otro con bastante frecuencia, Yeosang termina bajando la cabeza y pasa rozándote como si no estuvieras ahí, y tú haces lo mismo.
Aún estabas muy enojada para hablar racionalmente con él.
Te odio.
Aún estabas muy confundida para preguntarle por qué te haría algo así.
Te odio.
Aún estabas muy avergonzada para mirarlo a la cara por lo que dijiste.
En un intento por escapar de él, te la has pasado dando vueltas entre quedarte en los aparejos o quedarte trabajando en la cocina. San ha preguntado en repetidas ocasiones sobre por qué has estado tan decaída durante tus lecciones, pero honestamente no supiste qué responder.
Así que simplemente no lo hiciste.
—¿Chin Hae?
Volteas distraídamente para ver a Wooyoung de frente, mientras él se dirige hacia ti, balanceándose entre las cuerdas hasta llegar contigo. Ambos han terminado su tarea de quitar la bandera negra y naranja de ATEEZ para después rasgar cuidadosamente agujeros en las velas, así que no tienen nada más que hacer por ahora.
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Pirate King (pirate!au) ➵ ATEEZ (Traducción al Español)
Hayran KurguDespertar nunca fue tan interesante. Escapaste de la horca, corriste a través de un campo de batalla y te ocultaste en un barco pirata llamado Treasure, todo en un solo día. Incluso mejor, perdiste tus recuerdos y no tienes idea de quien eres. Conoc...