Llave

249 28 10
                                    


Subes por la escalera de cuerda, pero antes de que puedas trepar las amuradas un par de brazos fuertes y firmes te levantan por la borda y te colocan suavemente sobre la cubierta. Cuando miras hacia arriba, ves los suaves ojos marrones de Yunho, con una sonrisa torcida en el costado de su boca. —Bienvenidos a casa.

—¡Chin Hae, estás viva! —Ni siquiera ves llegar a San cuando prácticamente te tumba al abrazarte, aferrándose a ti con tanta fuerza que tienes miedo de caer nuevamente por la borda. Está temblando y rápidamente sientes la tela en tu hombro volverse húmeda, al darte cuenta, con una cariñosa sonrisa lo abrazas con todas tus fuerzas para tranquilizarlo.

—Sí, —respondes, y las palabras nunca se habían sentido tan bien en tu boca—. Estoy viva.

Después, tan rápido como San corrió para abrazarte, todo se vuelve una sesión de regaño.

—¡No puedo creer lo tonta que eres! ¿Crees que eres invencible o algo, saltando a territorio enemigo sin pensarlo dos veces? —Te encoges dolorosamente por el volumen de su voz y por encima del hombro de tu maestro encuentras la mirada de Hongjoong mientras trepa por el costado del barco, aterrizando suavemente en la cubierta. Su rostro está lleno de diversión y lo miras fijamente, pidiendo ayuda en silencio.

Para alivio tuyo, accede en ir a tu auxilio, acercándose a San poniendo una mano en su hombro para redirigir su atención. —Ya, ya, San, no seas tan duro con ella. Sólo quería ayudar a Wooyoung, como todos lo hicimos...

—No me hagas empezar con lo estúpido que fuiste. —San se da la vuelta para comenzar a reprender a su capitán, para tu sorpresa -y diversión-. —¡Eres el capitán, pero abandonaste tu barco y escapaste! Debimos haber dejado que te hundieras en tu balsa de mierda, y, y...

Tu maestro vuelve a romper en llanto y tu capitán sonríe, poniendo una mano sobre la cabeza del médico. —Lamento haber hecho que te preocuparas por nosotros, San.

—¡Y deberías! —San limpia furiosamente las lágrimas en sus ojos con la manga de su camisa, antes de aferrarse a ti con un abrazo más fuerte—. ¡Tú! ¡Será mejor que me compres todas las hierbas que quiera y no podrás quejarte!

Tu capitán asiente con cariño. —Está bien.

San esconde su rostro en tu hombro. —Van... van a ser muy costosas.

La sonrisa de Hongjoong se hace más grande. —Está bien.

—¡Voy a ir a buscar mi maletín médico ahora! —San anuncia en voz alta, alejándose de ambos para dirigirse a la enfermería—. ¡Ustedes dos, no se atrevan a hacer nada estúpido antes de que regrese!

Con eso, desaparece detrás de la puerta.

Hay un momento de silencio, y de pronto se escucha un resoplido de risa apenas contenido a tu lado. Tu capitán sonríe cuando volteas, pasando sus dedos lentamente por la madera del mástil de mesana. —Se siente bien estar en casa, ¿no es así?

—Ustedes dos hicieron que todos nos preocupáramos. —Seonghwa suspira, acercándose por atrás de ustedes siendo seguido por Yeosang—. Y ahora el pobre de Mingi probablemente tendrá que dormir por los próximos días porque por su culpa tuvo que dirigir el barco durante toda la noche mientras se volvía loco de angustia por ustedes. —El cocinero señala con un dedo acusador hacia su capitán, pero con una sonrisa de alivio en su rostro—. Será mejor que le agradezcan cuando despierte.

Hongjoong ríe cuando Yeosang se acerca para colocarle un parche improvisado sobre su ojo ciego. —Me aseguraré de disculparme con la tripulación por todos los problemas que causamos. —Dice, pero hace una pausa por un momento—. Pero, ¿Cómo nos encontraron en medio del océano?

Pirate King (pirate!au) ➵ ATEEZ (Traducción al Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora