Pequeña Lunática [Charlie Weasley]

BAJO LA LLUVIA

Habían pasado unos diez días desde la publicación de ese estúpido artículo. Las cosas se iban calmando, pero no por mucho tiempo.

Harry y Ron seguían enfadados. Por lo que Harry solía acompañar a Hermione a la biblioteca. Les pregunté si tenían algo que ver con lo de la poción multijugos, pero lo negaron rápidamente.

Para mi sorpresa, Krum también pasaba bastante tiempo en la biblioteca.

Solíamos sentarnos siempre en la misma mesa, con una silla de separación, pero no hablábamos más allá de algunos comentarios sueltos.

-¿Últimamente vienes mucho no? Le pregunté en un tono bajo.

-Puede serr, es muy...

-¿Interesante? Es curioso, pensé que al estar libre de los exámenes finales, los campeones pasarían horas entrenando. Comenté, cerrando el libro que había utilizado para mi ensayo de encantamientos.

-Prrefierro estudiarr las posibles estrrategias prrimerro. Contestó algo nervioso.

-Ya, comprendo...

-Hermione Granger. Mencioné tras unos segundos en silencio.

-¿Perrdón?

-La chica a la que te pasas horas mirando cada vez que cambias de página. Aclaré mirando a la castaña situada enfrente nuestra. -Su nombre es Hermione Granger. La conozco desde que entró a Hogwarts. Está en cuarto curso y es una de las chicas más inteligentes que vas a conocer jamás.

-Yo no... Le miré con las cejas levantadas antes de que pudiera decir nada más.

Suspiró derrotado y elevó la comisura del labio levemente. -Gracias... Lupin.

-Puedes llamarme Cassie. Debo irme. Suerte en la primera prueba, Krum.

-Viktorr. Me corrigió de forma amable.

-Suerte en la primera prueba, Viktor... Le dije para luego salir de la biblioteca en dirección a la zona de los dragones.

Cada vez tenía más confianza con Geralt y Liam, eran bastante graciosos e inteligentes, me recordaban en parte a los gemelos. También solía pasear con Fleur o ir a correr con Angelina.

Estaba saliendo del gran comedor tras el almuerzo, me encontré a dos Weasleys, prácticamente idénticos, frente a mi, impidiéndome el paso.

-Weasleys... Os agradecería que me dejarais pasar. Comenté de forma seria, cruzando mis brazos..

-Supongo que una Black solo es digna de un campeón, ¿no? Observó Fred realmente molesto.

-¿Qué mierda queréis decir con eso? Pregunté sin entender nada, harta de su comportamiento infantil.

-Míralo por ti misma. Murmuró George, entregándome un número del profeta. Seguido, ambos se marcharon, chocando sus hombros con los míos al pasar por mi lado.

Rita Skeeter lo había vuelto hacer:

Una Black y un campeón, una pareja llena de poder y prestigio. Sin duda estos dos alumnos son la pareja favorita de mis lectores por el momento. Muchas fuentes afirman que cada vez se les ve pasando más tiempo juntos. Quien sabe lo que pasará entre ellos en las guardias nocturnas que comparten como prefectos...

Fue la misma joven Black la que declaró, hace no mucho, su preocupación hacia la seguridad del campeón. Debido, claramente, a sus sentimientos por el joven. El amor está resurgiendo, una historia que ninguno de vosotros deseareis perderos.

No pensé dos veces antes de dar media vuelta e ir corriendo en mi forma animaga hacia el refugio. Estaba nublado, pronto habría una tormenta, pero no me importó lo más mínimo.