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Xavier pensó que Hermione no quebrantaría las reglas para encontrarse con él luego del toque de queda, pero se sorprendió al verle dentro de la oscura y vacía biblioteca, esperando por él.

—Por un momento, creí que no vendrías—Habló el chico, soltando una risita cuando Hermione se sobresaltó en su lugar, mirándole con leve molestia.

—Y realmente lo pensé—Exclamó la chica, soltando un suspiro—. No me gusta esto de romper las reglas. Debería estar en mi sala común, y no en la biblioteca a las 11 de la noche.

—Supongo que no hay nada de malo si eso significa que pasemos un tiempo juntos, ¿Cierto?

El chico se aproximó a la Gryffindor, posando sus manos en la cintura de ella para atraerla en un abrazo, que primero fue bastante incómodo porque Hermione seguía con los brazos cruzados, pero le oyó reír antes de corresponder. Se separaron unos centímetros, y en el silencio de la biblioteca, compartieron un par de besos que volvían a demostrar el cariño que tenían entre ellos.

[...]

El resto de los días de Septiembre pasaron bastante rápido desde la perspectiva de Xavier, y es debido a que, la mayoría del tiempo, se la pasaba en clases, sesiones de estudio con sus amigos, en espontáneas citas con Hermione en la biblioteca —Donde cada uno hacía sus deberes, tardándose bastante tiempo en ello al distraerse con el contrario—, o bien, durmiendo.

En parte, agradecía que ese año no se realizara el torneo de Quidditch, porque sería una preocupación extra para toda la carga académica que ya tenía.

Esa tarde de Octubre, su sesión de estudio con sus amigos había sido interrumpida por Hermione, quien parecía bastante alegre por los avances en su organización sin fines de lucro para luchar por los derechos de los elfos domésticos.

Y esa era la razón por la que estaba sentado en la biblioteca junto a la chica, dándole los últimos retoques a las insignias de "P.E.D.D.O".

—¿Aún crees que "P.E.D.D.O" es un buen nombre?—Cuestionó Xavier, por décima vez en 20 minutos—. Suena como... pues, como "pedo".

—¡Ya lo sé, pero no lo repitas!—Hermione soltó una risita luego de empujar a Xavier—. Ayúdame, hay que hacer más insignias.

El chico obedeció las palabras de su novia, y, apuntando a la insignia de color rojo, murmuró un "Geminio", y la pieza se multiplicó hasta un total de 10 insignias. Vio que Hermione imitaba sus acciones con una insignia, pero de color azul. Y así lo hicieron, hasta obtener alrededor de 50 insignias de distintos colores, las cuales Hermione guardó en una caja.

Antes de cerrar la caja, sacó dos de las insignias, colocando una de ellas en su túnica, y otra en la túnica del chico. Xavier sonrió con cierta gracia cuando la chica tardó más de lo esperado en colocar la insignia en su túnica, dejando un beso en sus labios cuando sus miradas se conectaron cuando terminó.

—Bueno, ahora eres el primer miembro de la "Plataforma Élfica de Defensa de los Derechos Obreros", reconocido por su fundadora, Hermione Granger—Habló la chica, en un volumen de voz que solo él podía escuchar en ese momento—. Por eso, estás exento de pagar la cuota de afiliación.

—Es un honor esta distinción—Murmuró Xavier, riendo un poco, aunque su mirada terminó bajado a los labios ajenos, a la espera de un beso que nunca llegó, porque Hermione se había separado de él.

le vio recoger todos sus pergaminos que estaban regados en la mesa, sacando tres insignias más para dejarlas frente a él.

—Estas son para tus amigos—Habló Hermione, sin mirarle—. Luego me entregas la cuota de afiliación de ellos, son dos sickles por persona. Debo ir por Ron y Harry. ¡Nos vemos más tarde, Xavier!

La chica dejó un beso en su mejilla y desapareció de su vista con la misma rapidez con la que había aparecido.

El chico recogió sus cosas y salió de la biblioteca, caminando por los largos pasillos de castillo con la mente divagando en cualquier lado, solo hasta que llegó al lugar donde había dejado a sus amigos hace una hora atrás, sintiéndose aliviado al percatarse que seguían allí.

—¿Ya terminaste tu sesión de estudio de anatomía con Granger, Black?—Exclamó Cho, en tono burlón.

—Solo me ha pedido ayuda con algo, Chang—Respondió el chico, sentándose junto a Lea—. Tienes una mente bastante perversa, y eres tú quien tiene clases de anatomía con Diggory.

Xavier rebuscó en sus bolsillos las insignias de "P.E.D.D.O", entregándole una a cada uno, aunque, al tener a Lea cerca, le colocó rápidamente la insignia.

—Pónganselas y háganme quedar como un buen novio que apoya las nobles causas de su novia.

—¿Por qué debería traer puesto algo que dice "pedo"?—Ben fue el primero en argumentar el nombre de la organización, pero de todas formas, se colocó la insignia.

—No seas bobo, Benjamin—Habló Cho

—Es "P.E.D.D.O"—Continuó Lea—, y dice algo de los elfos domésticos y sus derechos. Supongo que Hermione es bastante testaruda al pensar que los elfos olvidarán sus ideales para reemplazarlas por las muggles.

—Encuentro bastante innovador que quiera luchar por las criaturas mágicas vulneradas y olvidadas por el antropocentrismo de la comunidad mágica—Xavier respondió rápidamente.

—Wow...—Cho rompió el silencio que se había formado—. Estás jodidamente enamorado.

UNDER CONTROL  ━━ hermione grangerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora