MINISTERIO BUSCA REFORMA EDUCACIONAL: DOLORES UMBRIDGE NOMBRADA PRIMERA GRAN INQUISIDORA
El titular de El Profeta parecía haber sacado de sus casillas a todos, porque los murmullos no tardaron en extenderse por el gran comedor esa mañana, porque, luego de la actitud de Umbridge desde que comenzó el año, nadie veía venir que el Ministerio de Magia se inmiscuyera más en Hogwarts de lo que ya estaba. Aunque también, causó revuelo el hecho de que fuera catalogada como un "rotundo éxito", cuando ningún profesor parecía soportar estar cerca de ella, y Xavier pensaba que nadie en su sano juicio podría agradarle de forma real alguien como Dolores Umbridge.
No se hicieron esperar las visitas sorpresa de Umbridge para evaluar a los profesores, y fue bastante gracioso desde el punto de vista de Xavier ver como el profesor Snape trataba de lidiar con la mujer durante una hora y media, mientras que, cuando fue turno de evaluar a McGonagall, la anciana no había dudado en detener su palabrerío cuando intentó interrumpir su clase.
Hogsmeade ya se encontraba cubierto de nieve cuanto tuvieron su primera salida a aquel pueblo mágico.
Xavier envolvió su cuello en una bufanda gruesa de lana con los colores de Slytherin, escondiendo sus manos en sus bolsillos y apresurando su paso para entrar a Las Tres Escobas, percatándose de que Lea estaba sentada junto a Draco y sus amigos: Theodore Nott, Blaise Zabini y Pansy Parkinson. El chico Black se extrañó al no verlos con Crabbe y Goyle, quienes parecían guardaespaldas muggles.
—Creí que nos encontraríamos con Ben y Cho—Fue lo primero que soltó Xavier en dirección a la chica Rosier cuando se detuvo junto a la mesa, aclarando suavemente su garganta—. Espero que no les moleste recibirnos por hoy en su selecto grupo.
Draco se mostró algo escéptico por unos segundos, pero terminó sonriendo de manera burlesca.
—Siéntate, Xavier—Habló el rubio—, ¿Por qué rechazaría la compañía de mi primo favorito?
—Soy el único primo respetable que tienes—El chico Black soltó una risa, sentándose junto a Pansy, quien parecía no despegar su mirada de él.
El grupo de Slytherins no tardó en pedir una nueva ronda de cervezas de mantequilla, las cuales llegaron luego de unos momentos a manos de Madame Rosmerta, la dueña del lugar.
—Esperé a Ben y a Cho por casi veinte minutos—Habló Lea luego de un rato, bebiendo de su cerveza de mantequilla—, creí verlos a la salida del castillo, pero no les he encontrado en el pueblo.
—Supongo que han vuelto al castillo—Respondió Xavier, encogiéndose de hombros—. Tampoco los he visto en el camino hacia aquí.
Luego de terminar la ronda de cervezas de mantequilla, el grupo de Slytherins siguió charlando junto a la chimenea del lugar, para luego salir y seguir recorriendo el pueblo. Xavier se percató de la alta afluencia de personas en un pequeño bar al fondo de la calle principal del pueblo, y su ceño se frunció un poco al percatarse de la presencia de sus dos amigos Ravenclaw entre el tumulto que salía de ese lugar, aunque apartó aquella mueca de su rostro al caer en cuenta que venían junto a más personas de Ravenclaw.
Quiso creer que habían asistido a una pseudo-reunión de su propia casa, pero aquello le había provocado cierta vibra extraña que le dejó pensando durante el trayecto al castillo cuando fue hora de volver.
[...]
Que Umbridge se hubiese convertido en Gran Inquisidora se traducía en demasiados cambios en todos los aspectos dentro del castillo, porque, en ese momento, Xavier Black se encontraba en una fila fuera del despacho de la mujer con un pergamino entre sus manos, a la espera de poder inscribir al equipo de Quidditch de Slytherin como "una organización estudiantil que se acogía al decreto educacional número 24", porque, a pesar que el resto de sus compañeros estuvieran dichosos de ser de preferencia de la profesora, ninguno parecía tener la mínima energía para formalizar al equipo luego de esos cambios.
La fila avanzó de manera lenta, casi como su fuera una tortura; soltando un gran suspiro cuando fue su turno de ingresar al despacho de la profesora Umbridge.
—¡Oh! Hola, querido—Exclamó la mujer, con una sonrisa algo complacida cuando miró de reojo el escudo en su túnica—. ¿Cuál es tu nombre? ¿Y qué te trae por aquí?
—Xavier Black—Respondió con calma, teniendo que sentarse en la silla frente al escritorio de la mujer cuando le hizo un gesto, dejando el pergamino que traía en sus manos sobre la superficie—. Hm... Vengo en representación del equipo de quidditch de Slytherin para obtener el permiso necesario de acuerdo con el decreto educacional.
—¿Black? —La mujer reparó en su apellido, y el chico supo que no escuchó nada más allá de su nombre—. ¿Eres familiar de Sirius Black?
Supuso que en algún momento le preguntaría sobre su relación con Sirius, y era algo impresionante la capacidad de Umbridge de fingir ignorancia frente al tema, cuando Xavier podría apostar lo claro que tenía en mente su circulo familiar.
—Biológicamente, es mi hermano—Comenzó el chico—, pero no fue nada más que una aberración para mi familia cuando estaba viva, y así mismo, no es nada más que una aberración para mí.
Xavier sabía que debía fingir que no poseía ninguna relación con Sirius en ese momento, porque debía mantener oculto a su hermano mayor, y no poner en riesgo su libertad en tontos intentos de dejar al descubierto la verdad de los hechos que habían arrastrado a la mujer a Hogwarts.
—Lucius Malfoy me habló de ti cuando trabajé en el ministerio—Añadió la mujer, con una sonrisa aún en su rostro—. Me habló bastante sobre ti en ese momento...
—Narcissa Malfoy es mi prima, se convirtió en mi tutora junto a Lucius cuando mi madre falleció—Dijo Xavier, fingiendo una pequeña sonrisa—, gracias a ellos, no terminé junto a alguna familia que corrompiera las tradiciones que mi madre me inculcó. Así que, espero que Lucius solo haya dicho cosas buenas sobre mí.
La mujer soltó una risa complacida por la respuesta de Xavier, tomando un pergamino de su escritorio y la lista que Xavier le había entregado, tardando un minuto en firmar el permiso para que el equipo de quidditch siguiera funcionando.
—Espero que volvamos a tener una conversación así de agradable, señor Black—Añadió Umbridge, entregándole el pergamino—. Tenga un buen día.
—Usted igual, profesora Umbridge.
El chico le regaló una última sonrisa falsa, antes de abandonar aquel despacho lo más rápido que pudo.
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UNDER CONTROL ━━ hermione granger
Hayran KurguEn donde el último hijo de Orión y Walburga Black, Xavier Black, tiene que soportar ser apuntado por los delitos de su hermano mayor, a quien apenas conoció. O en donde Xavier tiene que acostumbrarse a lidiar con personas curiosas acerca de su extr...