El pitido en sus oídos era ensordecedor, la vista del cielo naranja y las luces del campo ser encendidas la cegaban, llevó ambas manos a su rostro, buscando obtener algo de claridad, para posterior sentarse en el pasto, y mirar el rostro de aquellos idiotas que se alejaban sonriendo.
— ¡Merlina, ¿Estás bien?! — Goody se lanzó al suelo a su lado, tomando en sus manos el rostro de su hermana, y asegurándose de que no tuviera ningún moretón, se giró para mirar al mismo dúo de descerebrados que su melliza — ¡Esos hijos de puta!
Estuvo por ir tras ellos, pero Merlina la detuvo, no valía la pena, volvió a ponerse de pie y el mundo a su alrededor dejó de estar en silencio.
— ¡No puede ser! ¡Eso es una auténtica falta hacia la Alfa pelinegra! — El comentarista no parecía muy animado con la situación, y los abucheos hacia el equipo del instituto C dejaba en claro que el público tampoco — ¡Pero como si no hubiera sucedido nada, Merlina Addams vuelve a ponerse de pie!
Dos de los integrantes del otro equipo cargaron en contra de Merlina cuando está ni siquiera controlaba el balón, como una obvia amenaza, el árbitro le dió tarjeta roja al sujeto que atacó primero, y Merlina limpió con una sonrisa la gota de sangre que caía por su nariz.
— Es mi momento de salir — Susurro bajo, para que solo Goody la escuche, la peliblanca asintió con un rostro divertido y su sonrisa de oreja a oreja.
Merlina camino hasta el entrenador, y aunque el partido estaba a favor de Nevermore, su plan era más importante que ganar un absurdo juego.
— Merlina, voy a cambiarte, no quiero que vuelvan a golpearte y te dejen alguna contusión cerebral — Con una palmada en el hombro, Merlina volvió a los bancos, y otra Alfa entro por ella.
Tomó si termo de agua y dió un largo sorbo, mientras bebía miró salir al imbécil que la golpeó del área de descanso del equipo contrario, y entrar en los vestidores.
Sonrió, pues era una oportunidad demasiado buena.
— Dedos, hora de la fase 2 — Dedos salió de su mochila y la siguió, de igual manera ella entró en los vestidores.
Mientras caminaba por el pasillo rumbo a su casillero en los vestidores del equipo, aquel alfa de cabello rubio y rasgos distintivos pateó un bote de basura derribando este y esparciendo su contenido por el suelo.
— Esa hija de perra, solo por qué sus padres son multimillonarios cree que puede venir a mi instituto a cautivar a mis Omegas — Gruñó, golpeando la pared, y entrando al vestidor, mientras caminaba se quitó la camisa, dejando ver un cuerpo bien entrenado, digno de un Alfa, abrió su casillero y escucho el ruido de la puerta al abrirse, volviéndose para encontrarse con tres chicos un poco más bajos que él — ¿Estaban viendo el juego?
— Vinimos a ver cómo estabas, Max — Mencionó uno, aquella voz racional que detuvo su avance en los terrenos de Nevermore pertenecía a él — La golpeaste muy fuerte, incluso tuvieron que retirarla.
Al escuchar esto, los dientes del Alfa se mostraron en una enorme sonrisa, lleno de satisfacción.
— Veamos cuánto tiempo el equipo Nevermore se mantiene sin ell- — Su cuerpo fue empujado hasta los casilleros, estrellándose contra ellos, y siendo sometido — ¡¡Que puta mierda!!
Sus ojos se abrieron al no entender que sucedía, los jadeos por parte de los tres chicos que estaban con él, más sus rostros sonrojados, sintió un bulto haciendo fricción entre sus nalgas.
— ¡¡HIJOS DE PUTA, ¿QUE MIERDA LES PASA?!!
— Solo quieren darte amor Max, no los rechaces — Por encima de su hombro, más allá de los sujetos que ahora lo rodeaban, Merlina se apoyaba en la puerta, con sus brazos cruzados, y sonriendo ligeramente, sin mostrar demaciado su entusiasmo — Ahora mismo están en un estado similar al celo de un Alfa Dominante, pero este afrodisíaco solo funciona en Betas, así que no te preocupes, no entraras en celo tu también.
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Al Filo De Dos Cuchillos 🖤 Wenclair
FanfictionLas mellizas Addams, Merlina y Goody, son Alfas que tienen una reputación bien formada en el instituto Nevermore, decir que las personas las desean es quedarse corto, pero estas dominantes no están interesadas en la bola de hormonales que los codici...