×Enid×Cuando la alarma al lado de mi cama sonó, salte fuera de las sábanas y fuí directo al baño de mi habitación, me dí una ducha, me vestí con un suave vestido de tela fina color azul, en el habían algunas manchitas de pintura con la que suele jugar Ferlan, pero no iré a ningún lugar importante hoy.
Recogí mi cabello en una coleta alta, al igual que mi travieso flequillo corto detrás de mis orejas, y salí de mi habitación descalza.
Llegué a la cocina, prendí la estufa y comencé a preparar el desayuno para mí y Ferlan.
Hasta que el sonido de pasos bajando la escalera me detuvo, yendo rápidamente hasta el lugar, solo para encontrarme con ella.
— Buenos días — Me saludó brevemente, parecía incómoda y cargaba en sus brazos dos cajas un poco grandes.
— Buenos días — Respondí, dándome la vuelta para seguir con lo mío.
No quería verla, así que solo volví a ignorar su presencia.
Ayer Merlina regresó, luego de 4 años de ausencia, ella estaba de nuevo cerca, y yo no pude evitar enojarme al instante al notar la respuesta de mi lobo a su simple aroma.
Pero no importa que tanto la desee, yo no la quiero.
Cuando serví la comida de mi pequeño subí las escaleras y fuí hasta su habitación, llamando a la puerta para que bajara a desayunar.
Ferlan duerme solo, desde muy pequeño noté que sería la clase de niño al que le gustaba tener su espacio, y como nunca temió a dormir solo con la luz apagada, le permití dormir en una habitación a parte.
Claro que estaba al lado de la mía.
Al no recibir respuesta volví a llamar, pero nuevamente fué solo el silencio.
Abrí la puerta y la habitación de Ferlan estaba ordenada, todos sus juguetes en su lugar, al igual que su pequeño escritorio y su cama estaba arreglada, pero no habían señales de él.
Escuché su voz proveniente de afuera y me asomé por la ventana para saber que pasaba.
— ¿Vas a vivir aquí? — Preguntó Fer a Merlina mientras cargaba cosas hasta la cabaña que hay detrás de la mansión.
— Así es — respondió ella, dejando las cajas frente a la cabaña y mirando a Ferlan — ¿Ya desayunaste? — Le preguntó a mi pequeño.
— Así es — Respondió este, pequeño mentiroso, ¿como vas a decirle que si has comido? ¿Que intentas lograr? — Tu no has desayunado ¿Verdad? ¿Cuando vas a ir?.
Sentí una sensación desagradable en mi pecho con esa pregunta, yo...no preparé un plato para Merlina.
Ella pareció sorprendida por su pregunta, y luego hizo una expresión que nunca había visto en su rostro.
— Está bien, no hace falta, tengo cosas que hacer — Otra mentirosa, supongo que de tal palo tal astilla.
Cuando Merlina llegó ayer, mi reacción puede que no fuera la más hermosa o amable hacia ella.
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Al Filo De Dos Cuchillos 🖤 Wenclair
FanfictionLas mellizas Addams, Merlina y Goody, son Alfas que tienen una reputación bien formada en el instituto Nevermore, decir que las personas las desean es quedarse corto, pero estas dominantes no están interesadas en la bola de hormonales que los codici...