Capitulo 24

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— Lily — Suave, como la caricia de una pluma.

— ¿Mmh? — Traviesa, como una hoja recién caída, improvisando su aterrizaje.

— Te dije que debías dejar de hacer eso — Sintió una caricia sobre su frente, alejando los mechones que se posaban sobre su rostro — ¿Y si empieza a llover?.

Aquella tierna niña de 10 años estaba dormida debajo de un longevo árbol, que a pesar de tener una coraza ya reseca y destiñada, poseía una hermosa corona rosa, en cada una de sus ramas.

— Si llueve me enfermaré — Resumió, abriendo sus ojos para que aquellos brillantes orbes ámbar mirarán a la contraria, perdiendose en sus ojos café oscuros — Y entonces tendrás que cuidarme.

Una risa coqueta escapó de ella, reincorporándose para mirar correctamente a la otra.

— No es gracioso, realmente podrías enfermar — Escuchó, aún así, no dejaba de sonreír, admirando embelesada a la niña frente a ella.

— Entonces te harás responsable, ¿Verdad?, No irás a dejarme morir, Merlina Addams — Acercó su rostro al contrario, sin encontrar resistencia, acariciando ambas naricitas juntas, para volver a reír tiernamente.

— No, no te dejaría morir, Lily — Aquella niña de tez pálida y cabello azabache se colocó de pie, extendiendo su mano a Lily, quien no dudó un segundo en tomarla — Por eso no dejaré que te enfermes.

— Por ahora me basta — Fue la corta respuesta de la peliblanca, quien se aferró más a aquella mano, para no soltarla en su camino de regreso.

...

Aquel día era importante.

La mansión Addams estaba muy agitada desde tempranas horas de la mañana, las sirvientas y mayordomos corrían de un lado a otro, preparando todo, y en aquella habitación, en un ala de la mansión, alejada del ruido y el desorden, estaban dos niñas, idénticas...

...diferentes.

— Madre quiere que este encuentro sea perfecto, es una tradición — La pelinegra terminaba de acomodar su vestido negro con volantes, sus lustrosos zapatos negros acompañados de medias altas, de un puro color blanco, con su cabellera en una coleta de caballo larga, sujeta por un lazo oscuro — Debemos dar una buena impresión.

Su semblante inexpresivo y estoico miró hacia el otro lado de la habitación, encontrándose con ella misma, solo que, de blanco.

— Lo sé, Merlina, me has estado diciendo que me comporte desde hace tres semanas cuando se acordó este encuentro, no debes seguirlo haciendo incluso el día del evento — Goody luchó un poco con el lazo en su cabello, sin poder colocarlo correctamente, cuando estaba por perder la paciencia, sintió unas frías manos tocar las suyas, y las retiró, permitiendo que su hermana la ayude a colocarlo — Además, no debe de ser gran cosa, solo es una fiesta de juegos para niños.

— Puedes verlo así, pero a nuestros padres parece importarles la relación con los Birdsnow, no podemos estropearlo.

Una vez estuvieron listas, salieron de la habitación, justo en el momento en que el timbre de la mansión sonó, indicando que sus invitados habían llegado, bajaron las escaleras, y sus padres estaban charlando con las visitas en la entrada, saludando a todos, se acercaron al lugar, y en cuanto su padre percibió el aroma de ambas, se dió la vuelta para indicarles que fuesen con él.

Al Filo De Dos Cuchillos 🖤 Wenclair Donde viven las historias. Descúbrelo ahora