Capitulo 44

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Las parejas de Enigmas son Omegas superiores al resto, un Omega débil y sumiso nunca se verá en la capacidad de concebir al cachorro de una criatura tan peculiar y fuerte como los Enigmas.

Repasando la historia, los Enigmas son Alfas entre los Alfas, líderes natos pero perezosos que pueden despedazar a sus rivales sin esfuerzo alguno, son codiciados por los recesivos, quienes añoran ser partícipes en la concepción de una cría con un Enigma, pero esto también es peligroso, dado a qué esta raza diferente de Alfa es tan escasa, se desconoce completamente su comportamiento en sus temporadas de apareamiento.

Por lo que se tenía entendido, los Enigmas pueden durar solo unas pocas horas en celo, un tiempo muy corto para una especie tan fuerte, pero durante este lapso de tiempo, su producción de esperma aumenta 5 veces, garantizando el poner anudar a su pareja en múltiples oportunidades con una taza de fecundación elevada, pero solo se tienen archivados dos celos de Enigmas en toda la historia, porque tampoco son criaturas con celos mensuales como las demás castas, se dice que estos solo entran en celo al encontrar una pareja adecuada para cargar a sus cachorros.

Volviéndose agresivos si sus parejas no les corresponden y aumentando la fuerza y dolor del celo de un Omega solo para que este termine suplicando por él.

Son criaturas calmadas, pero vienen como arma de doble filo.

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- ¿Por qué? - Preguntó la azabache, semi sentada llevando su flequillo hacia atrás mientras miraba a la rubia acurrucada encima de su vientre, en calma, completamente dormida.

Luego de...lo que ocurrió el día anterior, Merlina aseó a Enid y la llevó a la cama, la Omega durmió tranquilamente en sus brazos, su aroma disminuía y su lobo le decía que podía estar en calma, porque ya todo había pasado.

Esperó despertar y encontrarse en la incómoda situación de tenerle que explicar a Enid que lo más probable es que la había dejado en cinta nuevamente sin su consentimiento, pero no fué lo que pasó.

En su lugar, la rubia parecía seguir actuando de manera infantil y necesitada, cosa que comenzaba a preocupar a Merlina.

"¿Hice algo mal?"

"¿No fué suficiente?"

Hasta donde ella sabía su principal objetivo era anudar a Enid, y lo había hecho, entonces, ¿Porque seguía igual?.

- ¿Enid? - Acarició la cabeza de la rubia de manera delicada, esta se removió de su lugar, subiendo más por su cuerpo hasta estar en su pecho, y obligándola a acostarse nuevamente.

Algo pasaba, estuvo con ella por 3 días en su cabaña, tenía entendido que los Omegas pueden durar en celo incluso una semana pero el tiempo de esto puede reducirse o detenerse si el Omega es anudado por un Alfa y aseguran un cachorro.

Merlina no era estéril.

No fué tan complicado la primera vez, en realidad ni lo intentaron solo surgió, por lo que esto de asegurar un cachorro no debería ser una tarea difícil.

¿Entonces porqué?

Lentamente Enid comenzó a abrir los ojos, parpadeó algunas veces y la abrazó con fuerza despejando de ella los últimos vestigios de sueño, sus ojos azules vagaron por la habitación un poco, mirando las paredes, el armario, y luego fueron hacia arriba, chocando con la mirada preocupada de una pelinegra que no tenía ni idea de lo que ocurría.

- Enid, ¿Estás bien? - Preguntó la azabache, con un tono dulce, liberando suavemente su aroma para que Enid se sienta cómoda a su lado, y jugando con uno de los mechones de su rubio cabello.

Al Filo De Dos Cuchillos 🖤 Wenclair Donde viven las historias. Descúbrelo ahora