Nadie lo sabía.
El hecho de que Rindo y yo follaramos a pesar de que él tenía mujer y yo era hombre.
Pero ahí estaba él.
Follandome tan fuerte, haciéndome llorar por lo bien que se sentía, marcando mi cuerpo y diciéndome que yo era de él y que él era mío.
-Te gusta, ¿no?, follar con el esposo de tu mejor amiga- era verdad, aunque ella era mi mejor amiga de toda la vida yo estaba ahí, disfrutando de como el grueso y gran pene de su esposo me rompía el agujero.
Pero no me importaba.
Sabia mis motivos, ella se acostaba hasta con mujeres para luego reclamarle a Rindo por qué llego tarde sabiendo que estaba en una junta.
Conocí a Rindo cuando empecé a trabajar de secretario, Rindo era millonario, guapo y con buen cuerpo, me fascino, se lo Conte a ella.
"Me gusta mi jefe", era Gay, ella lo sabía, dijo que me ayudaría, pero termino casándose con el después de coquetearlo
"No te meterás con mi esposo, ¿verdad?, a pesar de que te gusta, somos mejores amigos desde pequeños".
No cumplí mi promesa, en especial cuando Rindo empezó a tocarme más de lo que debía, no como su amigo/secretario, era algo más íntimo.
-Si- gemí cuando sus dientes mordieron mi cuello- Me gusta mucho.
Rindo me dio una sonrisa y luego me levanto para apoyarme en su escritorio boca abajo, me queje cuando volvió a meterlo en mi agujero y el solo gimió cuando lo aprete.
Se sentía bien, se sentía realmente bien.
Mis manos fueron a sus brazos cuando los ubico a los lados- Amo como recibes mi pene- susurro en mi oído mientras se hacía un poco para atrás, entraba y salía de una manera lenta- Me gusta ver como lo tragas todo.
-Dios...más rápido- hable, clave mis cortas uñas en su piel cuando golpeo con fuerza mi trasero con su cuerpo.
El sonido resonó en toda la oficina y volvió a repetirlo, sacando todo su miembro hasta su punta y luego enterrarlo con fuerza provocando que me faltara un poco el aire y mis ojos se cerraran.
Rindo me volteo y comenzó a besarme, enrede mis brazos en su cuello mientras el levantaba mis piernas y comenzaba de nuevo, a follarme solo como él sabía hacerlo.
Su boca fue a mi cuello, dejando marcas un poco más abajo de este sin embargo siempre dejaba unas dos para saber que no estaba disponible, sin embargo, yo no podía hacer eso.
O ese pensé hasta que el me lo pidió- Márcame- hablo agitado.
-¿Que?.
-Marcame- golpeo mi punto exacto haciéndome apretar más su cuello.
Mis dientes mordieron su hombro y mis uñas se clavaron en su fornida espalda.
El sonrió para luego correrse en el preservativo, mientras yo me volvía a correr sobre mi abdomen.
Nuestras frentes se unieron, mientras estabilizaba mi respiración el besaba mi cuello y pezones.
- Debemos irnos- susurre- son las 3 de la mañana, deberías haber llegado a tu casa a las 12.
-Está bien- hablo, se levantó y me ayudo a limpiarme para luego ayudarme a vestirme y caminar hacia su auto.
Cuando salíamos tarde yo dormía en su casa y más lo hacía por el hecho de que de nuevo teníamos que levantarnos temprano u por alguna reunión y viaje de negocios.
Al entrar cubrí mi cuello con una bufanda para tapar las marcas, ella estaba ahi, sentada esperandolo.
Se acerco para verlo, ambos teníamos el cabello húmedo y otra ropa, pero eso era normal, siempre decíamos que nos cambiamos en la oficina.
- ¿Porque llegan tan tarde? - mire a mi amiga- ¿Dónde estaban?
-Reunión- hable para luego subir las escaleras hasta la habitación, pero me quede escuchando.
- ¿Porque tuviste una reunión tan tarde? - Rindo la miro.
-Son negocios.
- ¿Negocios? - Ella sonrió- ¿Negocios es follar con alguna chica? - toco el cuello de el- tienes una mordida, ¡DIME!
-No es tu problema.
- ¡SOY TU ESPOSA!
Rindo me miro y yo lo seguía mirando a el- Quiero el divorcio- ambos nos sorprendimos- Estoy cogiéndome a una persona desde hace 3 años- el suspiro- lo siento.
-Idiota- ella comenzó a golpearlo, baje para apartarla, pero ella también me golpeo. - ¿Crees que no sabía de su relación? - Ella me miro y quito mi bufanda- los escuchaba, cada noche, cuando iba a tu oficina __ salía con otra camisa y marcas en su cuerpo, sin contar que tu cabello se despeinaba.
La mire sorprendida- ¿Y? - Rindo hablo- Sabias bien que me case para hacer que te alejaras de él, quisiste mandarlo a citas y sé que él te hubiera hecho caso- mire a Rindo- incluso fingiste ayudarme con el, pero terminaste envolviéndome en tu juego, fue error mío firmar algo que no había leído. Me obligaste a casarme contigo sabiendo que nunca te ame a ti, solo a él.
- ¿Que?
Ambos me miraron, no era nuevo que ella se metiera con los chicos que me gustaban, siempre tenía ventaja, yo era hombre y no todos eran gay.
-No te dare el divorcio.
-Entonces lárgate de mi casa- hablo Rindo quitando su camisa, dejando ver las demás marcas que yo había dejado- Ve a la cama de los otros empresarios con los que siempre te acuestas.
-No es así.
El tiro una tarjeta de memoria- aquí están los videos- hablo- es una lástima, puedo denunciarte por adulterio, tu no tienes pruebas- Ella se fue dejándonos solos.
¿Todo este tiempo Rindo estuvo interesado en mi?.
-No pienses mucho- hablo Rindo agarrando mi cuerpo y sentándome encima del mientras él se sentaba en el sofa.- Todo lo hice por ti, si cancelaba el divorcio ella te alejaría de mi.
- ¿Porque dejaria que ella me controle?
-Porque tu estabas dolido, ibas a buscar a otros hombres- Rindo beso mis labios- nunca me acosté con ella, nunca se me paro- me rei- siempre me intereso follar solo tu agujero.
-Estas siendo muy romántico.
- Dejemos que esto siga igual- susurro- solo nosotros.
Les traigo este capítulo consuelo y dentro de unos segundos un aviso.