Quiero hacer una historia con él, mientras tanto esta será la versión masculina en este one shot.
-Gay encubierto, perdon por cualquier falta ortografica.
Lo observabas bailar con esa rubia de caderas grandes mientras te encontrabas sentado tomando con dos chicas pelinegras, ambos se miraban y se sonreían.
- ¿Es natural? - Hablo una de las chicas tocando tu cabello, miraste su escote.
-No- Ella ubico su mano en tu pecho mientras la otra tocaba tu pierna- ¿Quieren más trago?
El lugar era lo suficientemente oscuro para poder tener roces, adicional a que la gente estaba demasiada ebria como para fijarse quien tenía sexo ahí mismo.
Una de ellas se sentó en tus piernas mientras la otra se besaba con la chica, diste la última mirada a Shinichiro quien solo dejo de bailar y se ubicó a tu lado llamando la atención de la otra pelinegra.
Ambas mujeres seguían besándose mientras una de ellas se movía en tu entrepierna.
Tu celular sonó, la apartaste y te dirigiste hacia una zona alejada para poder escuchar, pero no era nadie, colgaste, ibas a salir de ahí pero un cuerpo bastante reconocido te mantuvo nuevamente adentro.
Tus manos fueron a su delgada cintura -¿Te diviertes?- Susurro shinichiro.
-Creo que si- Lo miraste, habia una pequeña iluminacion la cual iba directamente a sus ojos, el estaba ebrio- ¿Quieres que te lleve a tu casa?
-Quiero que me folles- Se acerco más a ti, llevan haciendo esto casi 8 años, desde los 15 comenzaron a tener sexo, simplemente cuando estaban ebrios y ese día realmente lo estaban, fue su primera borrachera y la primera vez que tuvieron sexo.
Ambos quedaron que fue un error, por parte de ambos, sabían que no eran gay ya que ambos tenían sus parejas, pero recordar la piel del otro, sudados, Shinichiro gimiendo debajo de ti, pasaron 2 semanas antes de que volvieran a tomar en la casa de uno de tus amigos.
Pasados de copas, tú te mantuviste lo más sobrio que pudiste, pero Shinichiro realmente estaba borracho y caíste de nuevo, después de eso, comenzó a hacerse rutina, los besos en el salón, las manoseadas en lugares ocultados del colegio, incluso después de salir del colegio, la universidad se volvió un lugar perfecto para besarse, incluso seguían teniendo parejas y realmente nadie sospecha que les encantaba follar.
-Estas borracho- le hablaste, Shinichiro se agacho, desabrocho tu pantalon con mucho cuidado para luego bajarlo dejandolo salir por completo, tus ojos se hicieron mas oscuros haciendo estremecer al pelinegro bonito, sentiste su lengua pasar por la punta haciendote jadear ante lo caliente que estaba, miraste al frente notando a personas pasar.