A principios de diciembre, los Herrera recibieron una invitación para asistir a una gala benéfica. Como siempre que acudía a ese tipo de actos, Anahí se quedaba sin palabras. Ante ella tenía a las mayores estrellas del mundo, personas a las que admiraba por su música o sus películas y de primera mano podía comprobar que todos ellos eran personas tan normales como ella.
—Cariño —dijo Poncho—, mira, quiero presentarte a un amigo.
Anahí, que estaba hablando con Yanira, se quedó sin palabras al encontrarse de frente con el rubiazo, guapo e increíble Thor, o, mejor dicho, Chris Hemsworth.
—Chris, te presento a mi futura esposa. Por cierto, gran admiradora tuya.
El actor, que iba acompañado por su guapa mujer, Elsa Pataky, española como Anahí, sonrió y enseguida los cuatro entablaron conversación. Hablaron de infinidad de cosas, incluidos los niños. Las dos parejas tenían y rieron al contar sus ocurrencias.
Cuando minutos después otras personas se unieron a la charla, Anahí, todavía incrédula, miró a Poncho y cuchicheó:
—Por el amor de Dios, ¡es todavía más guapo en vivo y en directo!
—¿He de ponerme celoso? —preguntó él, sonriendo.
—¡Celosísimo! —respondió Anahí.
La miró encantado y, cuando la iba a besar, se les acercaron unos compañeros de la discográfica y no pudo hacerlo. Al ver que se ponían a hablar de trabajo, Anahí cogió una copa de champán a la camarera que pasaba con una bandeja y se acercó a Yanira. Le estaba comentando que había conocido a Chris, cuando vieron entrar a Tifany del brazo del ruso. Ella sonrió al verlas y se acercó con Alexei.
Minutos después, se les unió Dylan y, al cabo de un rato, también lo hizo Poncho. Las tres parejas se sentaron juntas a charlar, mientras diferentes actuaciones pasaban por el escenario, hasta que de pronto vieron llegar solo a Omar.
Eso sorprendió a todos. ¿Omar solo?
Tras hablar con varias personas que se encontró a su paso, este, hecho un pincel, se acercó a ellos y, sin perder su sonrisa ni un solo instante, los saludó a todos, incluido Alexei.
Después de darle dos besos en las mejillas e inundársele las fosas nasales de su colonia, Tifany se movió nerviosa en la silla y Yanira, mirándola, susurró:
—¿Ocurre algo?
—Ha cambiado de colonia —respondió ella molesta.
—¿Qué? —preguntó Anahí, divertida.
Yanira y ella se miraron y Tifany cuchicheó:
—Omar utilizaba Fahrenheit de Dior y ahora huele a The One Men, de Dolce & Gabanna.
—¿Y cuál es el problema? —preguntó Yanira.
Bebiendo de su copa, Tifany se acercó a ellas y susurró:
—Durante los años que estuvimos casados, le compré cientos de colonias a la espera de que cambiara alguna vez y siempre se negó. ¿Por qué tiene que hacerlo ahora?
Yanira la miró boquiabierta y, negando con la cabeza, respondió:
—Muy fácil, cielo, ¡porque le ha dado la gana!
Tifany cabeceó y al ver a Alexei hablar y reír con los tres hermanos Herrera, dijo con una sonrisa espectacular:
—Me encanta que mi futuro marido se lleve bien con ellos.
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Todo de mi (AyA Adaptación)
Fiksi PenggemarPoncho Herrera es un guapo, adinerado y exitoso compositor de música puertorriqueño. No hay mujer que se le resista y que olvide con facilidad su mirada verde y leonina. Anahí es una joven que con apenas veinte años tuvo que hacerse cargo de su herm...