𝕰𝚕 𝚑𝚘𝚖𝚋𝚛𝚎 𝕰𝚚𝚞𝚒𝚟𝚘𝚌𝚊𝚍𝚘 [También en Inkitt]

22. É𝚕 𝚗𝚘 𝚎𝚜𝚝á 𝚎𝚗 𝚗𝚒𝚗𝚐ú𝚗 𝚕𝚞𝚐𝚊𝚛

【Ｋｈａｎ】

Llevo meses buscando a Chases por todas partes, y no he obtenido ni una sola respuesta. Es como si él no estuviera o existiera en ningún lugar exacto, o que en el menor de los casos hubiera podido escapar por el mar. Aun así, pese a no obtener noticias positivas, jamás me riendo porque sé que él no me ha abandonado del mismo modo que lo hizo Kent con él. 

A él le gusto, aún me quiere. Esté donde esté, sé que está esperando por mí y cuando lo encuentre no pienso soltarlo ni aunque me llenen el cuerpo de plomo y destrocen mis brazos con un hacha.

Todo empezó esa noche en la que volví de pasear con Kane, montando en mi moto aunque sólo diéramos vueltas en el jardín. Definitivamente tendrá un moto si le siguen gustando. No estaba nada contento ni mentalmente estable desde que descubrí con Eriel sobre esa escapada de la cárcel de Persival, pero sólo estaba esperando a equivocarme y esa persona a la que dispararon no fuera Chase.

Y desgraciadamente mis miedos se hicieron realidad cuando escuché su voz en un número desconocido. Al principio me sentí feliz, necesitaba saber dónde estaba, pero su tono no mostraba ninguna señal de que estuviera en una buena situación o le alegrara muchísimo poder hacerme saber que los disparos no habían causado ningún problema mayor. 

Él no estaba bien. Nos echaba de menos a todos, e incluso a mí me dejó para el final señalizando que yo era más especial que Eriel... y aunque eso me hubiera hinchado el ego, el audio me estaba mostrando a un Chase triste, preocupado y con mucho dolor en la voz que intentaba quebrársele de vez en cuando. 

Cuando él mismo me dijo, entre lágrimas y la voz ahogada, que íbamos a tener dos bebés más pero que terminaron muriendo me sentí... no lo sé. No sé qué palabra se utiliza cuando te alegras que el hombre al que quieres está vivo, pero que parte de ti ha muerto junto a esos niños que no van a hacer compañía a Kane como hermanos de sangre. Al principio me sentí terriblemente triste, casi al borde de un ademán depresivo porque Chase sabe que yo quería tener una familia numerosa, pero en los pocos minutos de silencio en los que tuve que pausar el vídeo, lancé el primer objeto pesado por la ventana  para destrozarla y lanzar un gran alarido que sonó lo suficientemente lejos para que algunas casas lejanas encendieran las luces de sus ventanas.

Keriel podría irse a tomar por el culo con esa mierda de "No te metas en mi trabajo, Khan. Sé lo que hago". ¡Un mierda sabe lo que hace! ¿Por qué coño Keriel no se anticipó a ello? ¿Por qué no demostró que era el mejor abogado de esta parte del país?

Boston llegó de inmediato al escuchar el estruendo, pero mi respuesta fue gritarle que se fuera de mi vista, y lancé una de las lamparitas en dirección a la puerta para que me dejara solo. 

No sé cuánto tiempo necesité para calmarme, aunque en el fondo me dieran ganas de pagar a alguien y volara por los aires esa puta cárcel del mierda y la estación de policía ligada a Persival para que supieran lo que era perder a alguien querido. Fuera cuanto fuera, seguí escuchando el resto del audio.

"¿Me esperarás?" Sin importar el tiempo que pase, te esperaré, pero también te buscaré para que la eternidad no se aprecie tan larga.

"¿Cuidarás a mis niños?" Es una promesa que puedo cumplir, y Eriel también lo hará porque es nuestra obligación moral proteger a nuestra familia.

"¿Me perdonarás por todas las cosas que he hecho y haré en el futuro?" Mientras sigas viviendo y me ames, no me importa lo que hayas hecho para sobrevivir. Sólo quiero que vuelvas conmigo.

Cuando terminó el mensaje de voz tenía demasiadas emociones metidas dentro de mi pecho, en la cabeza y el estómago. Era muy desagradable. Aun así, intenté llamar al teléfono para ver si tenía lo oportunidad de hablar con él, pero por desgracia al parecer había bloqueado mi número para que no molestara a la persona que le prestó el teléfono.