𝕰𝚕 𝚑𝚘𝚖𝚋𝚛𝚎 𝕰𝚚𝚞𝚒𝚟𝚘𝚌𝚊𝚍𝚘 [También en Inkitt]

37. 𝚄𝚗𝚊 𝚜𝚘𝚛𝚙𝚛𝚎𝚜𝚊 𝚖𝚞𝚢 𝚍𝚒𝚜𝚏𝚛𝚞𝚝𝚊𝚋𝚕𝚎

【Ｃｈａｓｅ】

La primera sorpresa que me ha dado Savage es el colgante, junto a una cena romántica, en la que nos los hemos terminando pasando bastante bien. Quitando un pequeño llanto suyo que ha suprimido porque "le entró un mosquito en el ojo", o durante eso minutos que parecían eternos que me estaba haciendo especial. ¿Realmente un "perro" podía hacer esas cosas por su "Amo"? 

Si lo pensaba detenidamente, más que un tipo de arraigo, yo diría más bien que es una conquista dado mi tipo de personalidad.

Sea como sea, la segunda sorpresa llega unas pocas horas después que terminamos de fregar y descansar en el sofá hasta que fuera la media noche. ¿Por qué a la media noche? No lo sé. Savage dijo que lo consideraba una buena hora, y dado que habría luna llena que podría verse desde la ventana, todo podría quedar un poco más cursi y cliché.

Ahora mismo lo tengo frente a mí, mostrando el cuerpo macizo plagado de tatuajes y vello bicolor que lo hace mucho más artístico que una propia obra de arte. Literalmente tiene el jockstrap que es "mi favorito", el mismo que le pillé usando mientras se tocaba en la cárcel mientras me clavaba la mirada y me hizo dudar de mi atención hacia alguien como él.

Aunque lo he visto de muchas maneras, él consigue que algo tan sensual o divertido provoque que mis mejillas se pongan rojas de la vergüenza. Eso irónico, pues debería de estar curado de espanto.

―La segunda sorpresa, una más disfrutable, la empezamos a partir de ahora ―sonríe abiertamente tras decir aquello, mientras abre los brazos de par en par para decirme de forma vela "todo esto es tuyo".

No sé qué decirle exactamente, sólo me acerco hasta él y tomo su mano. Caliente y calmada a la altura de su cadera, hasta que él cierra un poquito sus dedos contra mi mano.

―Eso significa que... ¿me dejarás ser el activo esta noche?

―Oh, sí... ―ronronea cerca de mi boca, tirando de mi labio con una mordida juguetona―. Puede que aún no seas tan hábil como yo, pero si veo que te pierdes voy a guitarte para que así aprendas algo nuevo.

Lo primero que hace Sav tras decir aquello es llevarme hasta la cama y darme un ligero empujón para que caiga encima de ella. La pared de cojines la hallo cuando retrocedo un poco, y prácticamente las telas huelen tanto a nosotros que siento mi pecho vibrar en un gruñido de aceptación de los acontecimientos. Sin siquiera dudar ni perder el tiempo, él gatea por la cama hasta colocarse encima de mí.

Su cabeza baja y el beso que iniciamos es largo y ardiente, las lenguas se buscan en lo que su cabeza gira un poco y su cintura se aprieta hacia abajo para calentar motores. 

La "sorpresa" va más allá de dejarme ser activo. En los extremos de la cama, hay cuerdas con amarres lo bastante resistentes para que él no pueda moverse, y por la confianza que me ha ido dando con el paso del tiempo sé que quiere darme todo el control de su cuerpo. Yo ordenaría el ritmo, la intensidad, el movimiento, las acciones... sería un "Amo" desde la percepción de Savage. No me quejo de ello, sólo que... no quiero decepcionarlo y hacer algo mediocre.

Los besos arden dentro de nuestras bocas, y por el movimiento de sus manos tocándome con intenciones de quitarme la ropa sé que no puede resistirse demasiado a la hora de empezar. Es por ello que muevo su cabeza y la guío hasta mi cuello para que sus labios marquen todas las partes que quiera, y que con la lengua las humedezca para así potenciar su olor. Mientras tanto, yo toco en todas las direcciones sin una guía en concreto. Esto más o menos familiarizado con su cuerpo, pero no en ser totalmente activo.

Eriel, Kent y Khan nunca me lo permitieron, y ser un power bottom siempre fue algo muy corto. ¿Cómo actúo? ¿Más mandón? ¿Más cabrón? ¿Más serio? ¿Más desagradable?