La tía de Lia, Laura, entró a su habitación luego de que su sobrina le indicara.
Luego de una semana en cama, la mujer sentía que tenía que tener una discusión importante con ella. Preocupada por su estado emocional últimamente, la vió acostada. Lia puso pausa al capítulo de Gilmore Girls que estaba viendo.
—Hola tía —dijo. Mientras esta, se sentaba a su lado, una vez que la más joven le hizo un espacio a un lado de ella.
—Hola Lia... ¿Cómo te has sentido el día de hoy?
—Meh —ella miró sus uñas—. Aunque Anna me platicó que fue la única de su clase que obtuvo una A en Matemáticas. Así que me alegro por ella.
—Oh... Mira, Lia —tomó su mano—. Quería hablar contigo acerca de... lo que va a pasar dentro de poco... y ¡Oh mira! —notó el apilado de hojas que estaba en la mesa de noche de la chica—. Entonces, por lo visto si tienes aún interés por aparecer en el show —las tomó, y notó que Lia había subrayado con iluminador rosado sus líneas.
—Bueno, lo estuve pensando pero... No es seguro.
—Pues nena, tienes que decidirlo en... 3 horas. 3 horas de hoy para que decidas porque mi esposo tendrá un muy buen empleo pero resultará muy difícil conseguir un apartamento que esté a nuestro presupuesto para dos adolescentes en Los Ángeles en menos de una semana. Y entre más pasen los días... Más contratiempos tendremos.
—Lo lamento mucho tía... Tal vez lo mejor es que no vaya. Para así no generarte más preocupaciones y se que esto podrá tener repercusiones económicas. No quiero ser una carga para tí.
—No acepto esa respuesta... Dime lo que quieres. No lo que crees que es más conveniente... Tu de verdad quieres ese rol, ¿no es así?
—Sí tía.
A Laura le causaba tristeza ver a su sobrina tan triste. Se acercó a ella y le dió un beso en su frente. Y procedió a abrazarla.
—Has sido muy fuerte Lia. Siempre fuiste una chica determinada. Y todos los que te rodeamos sabemos bien que tú estas hecha para esto... ¿Aún no les rechazaste, verdad?
—No.
—Bien... ¿y por qué nunca los rechazaste?
Lia la miró.
—Iré a comprar algo de cenar —cambió de tema—. ¿Algo que se te antoje en específico?
—La verdad no tengo hambre.
—Has comido muy poco últimamente...
—Lo sé, pero no tengo ganas.
—Bueno, si cambias de opinión me mandas un mensaje... Buenas noches.
La mujer se levantó, y salió de la habitación, dejando a Lia sola. Ella volvió a ver el programa que tenía en la televisión.
•
Al día siguiente, un Sábado, Lia abre la puerta luego de escuchar el timbre de la casa sonar. Se encontró a Yeonjun, quien venía a visitarla por sorpresa.
—¡Lia! ¿Cómo estás, linda?
—Muy bien, en realidad —ella sonrió. A él le brillaban sus ojos al verla. Sentía que estaba viendo a la vieja Lia. Traía un vestido bastante casual y suelto de color amarillo. No traía nada de maquillaje, y su cabello estaba suelto. Se miraba bastante fresca— ¿y tú?
—También, quería pasar a visitarte y ver como sigues.
—Todo está marchando excelente. Pasa.
Ella le indicó que entrara, y eso hizo el muchacho. El también venía muy casual. Con unos jeans, y una camisa de algodón de color blanca. Y sus tenis deportivos.
Ambos se sentaron en el sofá de la sala. El pasó su brazo alrededor de ella. Aunque notó que a diferencia de él, no se encontraba tan cómoda.
Vio el conjunto de hojas que tenía en la mesa. ¿Acaso era un guión? Se preguntó. Vió que ella tenía sus manos sobre sus piernas.
—No esperaba que vinieras...
—Lo siento. Si vine en un mal momento, de seguro estabas ocupada.
—Algo... Pero capaz fue buen momento porque, tengo que hablar contigo.
Ella se volteó a verlo, y él, le puso atención.
—Sí me iré a Los Ángeles... En una semana.
—Oh... Lia. Eso es algo bueno. ¡Que felicidad! —la abrazó—. Está increíble que decidieras continuar.
—Sí. Sólo que me entristece saber que ya no voy a verlos más
—Bueno, yo también te extrañaré mucho. Y Anna igual. Pero tarde que temprano sabíamos que te ibas a ir. Y estamos felices por tí. Así que no te preocupes. Si tengo que esperar por tí, creeme que lo haré. Porque confío en tí y-
—Yeonjun, no —lo interrumpió—. No necesitas esperar por mí —ella lo miró seriamente. El chico frunció el ceño con tristeza—. Te quiero mucho, y no puedo negar que lo que tuvimos fue bastante especial pero, creo que el tiempo que nos pertenecía a nosotros quedó en el pasado. Y tratar de reconstruir lo que había entre nosotros, sólo nos va a lastimar.
—¿Por qué crees eso? Los dos sentimos algo, ¡los dos nos queremos! Nos deseamos y-
—Lo lamento, pero yo- —ella se soltó de su agarre, mientras que su voz se entrecortó, y las lágrimas terminaron ganándole— yo ya no siento lo mismo. Te quiero, pero no de esa manera... Yo no te puedo ver como pareja. Y tampoco quiero utilizarte cuando necesito un poco de compañía cuando tu quieres algo más. ¡No está bien!, y si te soy sincera creo que es mejor que nos distanciemos.
Él se quedó boquiabierto. Completamente extrañado por lo que respondió la castaña. Se alejó unos cuantos centímetros de ella en el sofá.
—¿A qué te refieres con distanciarnos?
—A que no me llames, no me busques, no te despidas de mí, no me esperes... No vale la pena. Te aseguro que habrá una mejor chica que sepa amarte de verdad porque yo no estaré dispuesta. Y lamento mucho tener que ser así de directa. Pero tenía que serlo o-
—Okay, okay. Ya capté.
El se puso de pie, y Lia copió su acción. Quedaron frente a frente.
—Es mejor que me vaya entonces.
Yeonjun la miraba tan devastada. Sabía perfectamente que ella lo hacía con la mejor intención. Y eso aún así le dolía a la menor.
La abrazó, y ella de inmediato lo envolvió de vuelta en sus brazos.
—Todo estará bien Lia. Confío en tí.
—En serio perdón —respondió apenas.
—No tienes que pedir perdón... Fuiste sincera y eso lo aprecio mucho. No te voy a negar que me duele, pero quiero lo mejor para tí.
—Yo también quiero lo mejor para tí. Quiero que tú seas feliz.
Los dos se soltaron.
—Ahora sí, me voy.
Él caminó a la salida. Lia se quedó donde estaba. Ambos se despidieron una última vez, agitando sus manos al aire. Y finalmente, salió por la puerta.
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sour • soobin
FanficEN PROCESO SOUR 1 (terminada, 40 capítulos) SOUR 2 - en proceso Lia de 17 años tiene muchos sueños, pero por el arriesgado trabajo de sus padres, es difícil para ella pensar que se puedan realizar. Hasta que conoce a Soobin, ese chico carismático y...