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TN se encuentra dando el pecho a su bebé en público, enfrentando las miradas y comentarios incómodos de las personas a su alrededor. Mitsuya, su esposo, sale en su defensa.
Mitsuya: TN, no deberías tener que lidiar con esto.
TN: Mitsuya, es nuestra hija pero la gente parece no entenderlo.
A medida que TN alimenta a rei las miradas curiosas y los murmullos comienzan a intensificarse.
Persona 1: ¿Por qué lo hace en público?
Persona 2: ¡Qué vergüenza!
Mitsuya, notando la incomodidad de TN, decide intervenir.
Mitsuya: ¿Hay algún problema aquí?
Persona 3: No es apropiado hacer eso en público.
Mitsuya defiende a TN, destacando el derecho de una madre a amamantar a su bebé donde sea necesario.
Mitsuya: (decidido) Mi esposa está alimentando a nuestro hija. Es un acto natural y hermoso. Si tienen algún problema, pueden mirar hacia otro lado.
Las personas se sienten incómodas con la respuesta de Mitsuya y deciden alejarse, permitiendo que TN continúe con tranquilidad.
TN: Gracias, Mitsuya. No deberíamos tener que preocuparnos por algo tan natural.
Mitsuya: Estoy aquí para protegerte, siempre.
La historia destaca la importancia de apoyar a las madres en situaciones de lactancia materna en público y promueve la normalización de este acto natural.
