STRAY KIDS REACTIONS

Freedom Pt3

⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ ⋆✦⋆⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯

Género: Stuff
Etiqueta: Pink; Red
Tipo: One Shot
Protagonista: Seungmin
Advertencias: Adulterio, agresión física, emocional y psicológica.
Aclaraciones: No se busca dañar la imagen de ningún idol involucrado, todo es ficticio y un personaje destinado a entretener, por lo que los lugares, sucesos, hechos, fechas y relaciones son ficticias, inventadas solamente para que la historia tenga sentido.

Pedido: AnnetteL33

⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ ⋆✦⋆⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯

La habitación en la que su esposo estaba, era obscura y lúgubre, pero era la habitación en la que ambos dormían; y no era que las decoraciones fueran horribles o asemejaran a algún velatorio, más bien era el sentimiento de Seungmin el que la convertía en un lugar poco agradable, pero no podía quejarse, tampoco era que como que estuvieran durmiendo juntos, ya que hace unos meses volvieron a dormir separados y la brecha entre ellos no paraba de crecer.

T/n estaba aterrorizada, sentía el final de su matrimonio demasiado cerca. Ella aún no había concebido un hijo (al menos, no hasta dónde ella sabe), y tener al heredero era la única manera de que los nobles dejaran de despreciarla, incluso si Seungmin le exigía el divorcio, uno al que, francamente no podría negarse debido a la jerarquía y que no podría permitirse; ¡un divorcio sin un hijo la destruiría!

Volvería a ser baronesa y estaría en el fondo de la cadena noble, volvería a lamer zapados y estar detrás de todos los demás nobles que, en definitiva, están más arriba que ella por origen, si pasaba eso, volvería a ser nada.

Si por lo menos tuviera un hijo, podría conservar su título de marquesa y seguir viviendo en la opulencia, pues se "habría ganado ese derecho por hacer un buen trabajo". 

Su hijo tendría las mismas oportunidades que los demás hijos de nobles y ya no tendría que ver hacia arriba a nadie, mucho menos rogar por oportunidades o un poco de atención.

Por ello, quería asegurarse de quedar en cinta. 

Los días más fértiles eran los días en los que Seungmin la tocó, pero cometió un error; con el afán de destruir a quién no le permitía escalar en el corazón de su esposo, sedujo a un hombre que no le pertenecía y que estaba comprometido con alguien más. 

Con él también compartió una misma cama por varias noches durante algunos meses, y sin darse cuenta, incluso en sus días más fértiles y pasó, las náuseas esporádicas (sobre todo en las mañanas), el rechazo a ciertos alimentos y olores, acompañado, por su puesto, del agrado excesivo por otros tantos, el sangrado no le preocupó demasiado, nunca fue algo muy regular, había veces en las que la esperanza de por fin haber quedado embarazada le duraba dos meses, hasta que la mancha roja por fin aparecía.

La verdad era que T/n ya no estaba segura sobre si estaba o no embarazada, a penas tenía dos semanas sintiéndose así y era muy pronto para saber la verdad, pero si enserio estaba en cinta, sólo rogaba que fuera de Seungmin, porque de lo contrario, sólo sería una adúltera que se aprovechó durante quince años del pobre marqués Kim, disfrutando de su riqueza, usando su nombre, y dándole rienda suelta a su lujuria interminable.

Si estaba embarazada y su esposo no era el padre, sólo se arruinaría a si misma.

— Mi señor, está demasiado obscuro aquí. Si corremos...

— Deja todo cómo está. — Seungmin la detuvo secamente cuándo tenía la intención de correr las cortinas y T/n se detuvo. — Sé que fuiste a hablar con la duquesa Lee. Quiero saber de que hablaron durante dos horas a solas. ¿No habrás ido a insultarla otra vez, verdad? — Contempló los hielos en su bebida mientras giraba cortamente la muñeca en un movimiento delicado, sólo meneando los hielos y haciendo sonar el vidrio con un tintineo bajo.

— Y... Si lo hice... ¿Qué me pasaría, me golpearías mi señor? — Seungmin no la estaba viendo, no le dirigía la mirada, pero aún así, T/n sentía que se quemaba, el aire la asfixiaba y parecía que la habitación estaba sofocándola.

— No digas tonterías, no hago esas bajezas.

— ¿Entonces que me haría?

— ¿Qué más?, obligarte a disculparte con la duquesa.

— No hablamos de nada importante, sólo la quise consolar y dimos por terminada la visita. — Ya sea por miedo, o sumisión, quizá incluso por rendición, pero la cabeza de T/n se bajó ante su marido. 

Sus manos se tomaron unas a otras y la frotó a modo de consuelo, la pared detrás de ella le impidió retroceder más de dos pasos.

— ¿Sin consultarme antes? — Esta vez, la mirada oscura llena de rabia y resentimiento de su marido la vio y sólo con eso se sintió tan desprotegida, tan insegura.

Para ese momento, T/n ya sabía que una sola mirada podía hacer que su corazón se acelerara de esa manera y que sus piernas se congelaran. Ella ya conocía ese sentimiento, lo experimentaba mucho siendo la hija menor del barón Hwang, para quién su orgullo siempre fueron los mellizos Hyunjin y Yeji, era miedo.

— Así lo quiso la anfitriona y yo solo obedecí.

— Mmm... Entiendo. Bueno si así lo quiso Soo... la duquesa Lee, entonces así será. — Le dio un sorbo al vaso de whisky y volvió la mirada a la ventana. — Prepárate para partir mañana después de la comida. — Con eso, terminó la charla y salió de la habitación sin decir una palabra.

Asegurándose de haberse quedado sola, se acercó a la ventana, y ahí estaba Soo JIn otra vez, paseando por el jardín el flores. El vestido era totalmente seductor, de tirantes finos y un escote pronunciado, acompañado de un chal cálido que mantenía a la altura de los codos, permitiendo, así, que los hombros y el escote estuviera descubierto. Esta era Soo Jin que parecía que sólo T/n era capaz de ver.

Con esta intención, los acomodó a los dos, en la habitación con una vista directa a su jardín favorito, y había estado paseando muy seguido últimamente, lo que hacía que los nervios de T/n estuvieran por el cielo, siempre insistentemente cerca de su marido, cómo si se le fuese a escapar de las manos si no lo atrapaba en ese momento.

Y también estaba él, siempre cediendo a lo que ella quería y acompañándola con una sonrisa encantadora y galantes modales, siendo todo lo que no era con T/n y todo lo que T/n anhelaba que fuera con ella.

Apretó la falda con furia e impotencia, al final no podía hacer nada, Soo Jin ya la había amenazado e incluso amordazado. Si hacía algo que a la duquesa no le gustaba, su ruina sería un hecho.

⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯ ⋆✦⋆⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯⎯