CAPÍTULO 18 (TORY)

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Tory

Hoy por fin salimos de vacaciones de navidad. No dejo de mirar el reloj en la pared del enorme salón donde los estudiantes de Diseño nos encontramos realizando nuestro último examen, mientras voy terminando de contestar la última pregunta.

Me levanto nada más revisar todas mis respuestas y ver que son correctas, y algunas están más que bien. Dejando mi examen sobre la mesa de la profesora salgo del aula. Suspiro antes de ver al final del pasillo a mi mejor amiga con unos globos.

Ella terminó antes que yo los exámenes, y aunque hoy es el último día para todos, algunos tuvieron la suerte de culminar con el período de examinación una semana o días antes de salir de vacaciones.

Nada más verme corre hacia mí con una enternecedora sonrisa en los labios, y me abraza, haciéndome notar su complexión delgada y su altura.

-Felicidades muñeca, apuesto que al final de la carrera obtendrás El Premio Extraordinario. Te doy lo que quieras si tu media no te hace ser la mejor de este curso en tu carrera- Dice nada más soltarme, entregándome los globos.

-Gracias tía. Y acepto, si no soy la mejor, ya que, aunque sea buena no quiere decir que no haya gente más talentosa e inteligente que yo, me darás lo que yo quiera. Y si ganas tú, te daré o haré lo que tú quieras- Hannah sonríe complacida

-Va, me parece perfecto. Pero espero que ya estés preparada para perder, porque, tía, lo tuyo no solo es inteligencia y talento, es que eres dedicada, te esfuerzas como nadie para conseguir cada cosa que te propones; eso no lo tiene cualquiera- Sonrío agradecida antes de entrelazar nuestros brazos y salir juntas.

El director quiere dar una charla de despedida antes de que nos vayamos nada más suene la campana de fin del último examen así que luego de pasar por la cafetería en busca de unos dulces y un batido, vamos caminando hacia el teatro.

  Buscamos entre las sillas que ya se van ocupando, a nuestros amigos. Mentiría si dijera que es complicado, pero el pelo verde chillón de Oliver resalta todavía más ahora, que cuando lo llevaba rosa al principio del curso.

Hannah se sienta junto a Oli y yo en el asiento consecutivo al de ella. Conversamos en lo que el sitio se va llenando de universitarios de todas las áreas y años.

-Ey- Doy un respingo cuando siento la voz de Bhiell demasiado cerca de mi oído.

Estaba tan en mi mundo que no noté cuando llegó.

-Ey- Correspondo a su saludo, mientras se acomoda en el asiento a mi lado.

Lo recorro de arriba abajo cuando no es consciente de ello.

Lleva ropa abrigada, ya que estamos a finales de diciembre y el frío está haciendo de las suyas. Su bonita piel pese a seguir siendo menos blanca que la mía, se ve algo clara. Me pregunto si yo pareceré una hoja de papel casi transparente por el color tan blanquecino de mi piel.

Estornudo y escucho como Bhiell ríe bajito a mi lado.

-No te rías idiota- Decirle eso es como darle el permiso para que se ría todavía más

-Es que estornudas demasiado tierno. Cualquiera que no te conozca pensaría que eres una delicadeza de persona y solo tienes palabras bonitas para la gente- Resoplo y me cruzo de brazos.

-Vaya, como dice cosas un simple estornudo- Sonríe y niega con la cabeza.

-Sí, pero como siempre tienes que ser la excepción, porque solo se equivoca contigo- Lo miro mal.

-Que sepas que no me ofendes- Enarca una ceja

-Y por qué te cabreas? - Frunzo los labios

-No estoy cabreada

Cada estrella de tus ojos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora