Fragmentos Perdidos ||PopeexT/N||

Capítulo 26: La pieza faltante del rompecabezas

Le pedí ayuda a Marifa para encontrar el punto de reunión con aquellos amigos de Popee, por supuesto que no le conté mis intensiones, ni a quienes iría a ver.

— Regresare por ti al final de mis clases y nos regresamos juntas al circo —Me dijo con amabilidad— por favor no te vayas a perder.

— No lo hare, gracias por traerme.

Me dio un abrazo y se marcho. Me encontraba a la entrada de un parque al cual observe con firmeza para iniciar a caminar con determinación, sintiendo el peso de la anticipación en cada paso. A medida que me acercaba al lugar acordado, el nerviosismo comenzaba a apoderarse de mi. ¿Qué secretos podrían guardar estos amigos de Popee? ¿Qué tipo de conexión tenían con el devastador accidente del circo?.

Finalmente, llegué al banco donde los amigos de Popee me esperaban. De inmediato reconocí a aquellos chicos, ambos con miradas serias que denotaban la gravedad de la situación. Al mirarme acercar a ellos, rápidamente se levantaron y pude sentir la tensión en el aire.

— Soy Umi, amiga de Popee —Me presente antes de comenzar con la conversación— Gracias por venir.

Ambos chicos hicieron una leve reverencia y se presentaron.

— Mi nombre es Boron —Se presento el pelirrojo.

— Yo soy Seito —Continuo aquel de cabellera azul— Somos amigos de la infancia de Hanabishi.

Los tres nos sentamos en la mesa de picnic, en aquel parque tan hermoso y poco transitado. Era mas que evidente la tensión que había, incluso podría decir que ambos seguían muy dudosos sobre continuar con esto. Respire profundamente para armarme de valor intentando ocultar mi nerviosismo detrás de una expresión serena.

— Estoy lista para escuchar lo que tengan que decir —Dije con determinación.

Los dos amigos intercambiaron miradas antes de comenzar a relatar la historia. No era fácil para ellos hablar sobre este tema y tampoco tenía la intención de apresurarlos ni forzarlos. Al menos mientras me quede tiempo y paciencia.

— Pasábamos mucho tiempo juntos, nos reíamos, bromeábamos, éramos un grupo de amigos muy unidos —Comenzó el peli-azul, sonriendo mientras recordaba— A pesar de ser muy diferentes entre nosotros, siempre nos apoyábamos los unos a los otros..

Aquel chico hablo sobre la infancia de Popee, sobre las dificultades que enfrentó en su familia al ser abandonado por su padre la mayor parte de su infancia, así como el hecho de que su madre había desaparecido cuando tan solo era un bebe y las heridas emocionales que eso le había causado. Revelo detalles dolorosos sobre la relación con su padre así como lo exigente que era con él. Escuche atentamente, sin restarle importancia a ni una sola palabra que salía de su boca.

Pero poco a poco también comencé a notar como él otro chico comenzaba a desesperarse a cada palabra, hasta que ya no pudo mas. Golpeo la mesa con ambos puños ya irritado.

— ¡Basta Seito! —Detuvo el relato del mencionado— No hay manera linda de decirlo —Advirtió antes de continuar— Nosotros ocasionamos el incendio —Confeso.

Mis ojos se abrieron en grande debido a la sorpresa de escuchar aquellas palabras. Mire a Seito quien aparto la mirada tapando su boca con sus labios, pero podía notar el arrepentimiento en sus ojos que se pusieron cristalinos amenazando con derramar lagrimas. Volví mi mirada a Boron, expectante y un poco impaciente de escuchar el resto de la historia.

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Hace medio año atrás, en una tarde tranquila, una función normal, a falta de empleados, pidieron la ayuda de Boron y Seito para atender la dulcería del circo. No dudaron en ayudar a sus amigo.