Aegon y Rose se separaron del abrazo, y Aegon miró a su alrededor, asegurándose de que nadie estuviera cerca para escuchar lo que tenía que decir. Con un suspiro, comenzó a contarle todo lo que había pasado en Poniente desde que se separaron.
"Daenerys... ahora es la Reina de Poniente. Conquistó Desembarco del Rey, pero no fue como todos esperaban. La ciudad fue destruida por fuego y sangre, y muchos murieron. Me han hecho prisionero, y ahora me tienen luchando por mi vida en este infierno. Jon, Sansa, todos se han vuelto contra mí... he sido vendido como un esclavo para mantenerme lejos de Poniente. Y aquí estoy."
Rose escuchaba en silencio, su mirada oscureciéndose con cada palabra. La noticia de Daenerys como reina no la sorprendió tanto, pero la idea de Aegon siendo traicionado y vendido la llenaba de tristeza y rabia. Finalmente, cuando él terminó de hablar, ella tomó aire y comenzó su propia historia.
"Yo llegué aquí... de una manera diferente. Después de que nos separamos en Essos, terminé siendo capturada por unos piratas. Me vendieron a un mercader en estas islas, y terminé trabajando para él en el mercado. Durante unos meses, fui una simple sirvienta, pero aprendí rápido a manejar el dinero y las apuestas. El mercader me enseñó a manejar las apuestas de los gladiadores, y así me convertí en la chica de las apuestas. Nadie sospecha que fui una esclava, y aprendí a hacerme valer en este mundo. Aquí es donde estoy ahora... atrapada, pero no derrotada."
Aegon la miró con admiración. Sabía que Rose era fuerte, pero escuchar su historia lo llenó de un respeto renovado por ella. Después de un momento, Aegon preguntó:
"¿Y cómo es que conoces a Khinra?"
Rose sonrió con una mezcla de ironía y curiosidad. "La princesa es una clienta habitual. Aunque no suele venir en persona, siempre manda a algún esclavo de confianza para apostar por los gladiadores. Tiene un ojo muy agudo para las peleas, y parece que le has llamado la atención, Aegon. No es solo tu nombre lo que te hace especial. Algo en ti la ha intrigado."
Aegon sonrió débilmente, recordando sus encuentros con princesas de tiempos pasados. "No es la primera vez que una princesa se interesa por mí."
Rose se rió suavemente y asintió. "Bueno, esta vez no se trata solo de interés. Aegon, tienes que ganar el Torneo del Solsticio. Si lo haces, el pueblo pedirá para ti la lanza de madera, la única forma de conseguir tu libertad."
"Cuéntame más sobre ese torneo," pidió Aegon, curioso.
Rose asintió y comenzó a explicarle. "El Torneo del Solsticio es la mayor competición en las Islas del Verano. Guerreros de todo el mundo conocido vienen para representar a las casas nobles de las islas. Hay casas poderosas aquí: los Kalloa, expertos en arquería y conocidos por su riqueza en joyas; los Zhani, maestros en el arte de la lanza y el escudo, y los Farakka, guerreros temidos que luchan con espadas dobles y los Taa los reyes de las islas que ya los conoces. Cada casa elige a un campeón, ya sea un gladiador o un guerrero contratado. El torneo no es solo una exhibición de habilidades de combate, es un evento sagrado en honor al dios Sol, y el vencedor gana prestigio para la casa a la que representa. Para un gladiador, la victoria significa libertad... la lanza de madera."
Aegon la miró con intensidad. "Y cuando gane ese torneo, ¿cómo piensas que pueda volver a Poniente?"
Rose, siempre con un plan, respondió rápidamente. "Conozco a un tipo. Se mueve entre las sombras del puerto, un contrabandista llamado Quhuru Mo . Él podría conseguirnos un barco. No será fácil, pero si logramos el oro suficiente y las conexiones adecuadas, podremos salir de aquí."
Aegon asintió, sintiendo cómo la idea de la libertad comenzaba a cobrar vida en su mente. "Bien. Empecemos con el plan entonces. Me prepararé para el torneo y, cuando gane, encontraremos la forma de salir de estas malditas islas."
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THE FIRST OF HIS NAME
FanfictionEn las profundidades de los misteriosos confines de Volantis, donde la magia y el misterio se funden en un torbellino de poderes antiguos, un sacerdotisa roja en trance vislumbra una visión: una figura envuelta en llamas, con cabellos de plata ondea...