REPUTATION || max verstappen.

i can see you.

but what would you do if, i went to touch you now?
what would you do if they never found us out?

La competencia empezaría en cualquier momento, escuchaba camino al paddock que todos estaban en contra de que Max ganara, querían un nuevo campeón del mundo y el neerlandés no estaba en su lista de consideración.

Que agradables personas, pensó.

Quiso ver a Charles antes de la carrera pero no pudo, y como no iba al paddock de Ferrari, no iba a verlo hasta que todo terminara. Le deseaba mucho éxito de corazón. Era su amigo más cercano y ella pensaba que merecía ganar.

Aunque sabía que podía ser desastroso, pasó antes para ver a su padre, estaba en el garaje, y sabia que era muy posible, ver a Max, no se echó hacia atrás y caminó hasta llegar ahí.

Todo el equipo iba de aquí para allá, revisando detalles, preparando todo para empezar la carrera, no sabía a quien preguntarle donde estaba su papá y llamarlo no era opción, seguramente no veria el teléfono hasta terminada la carrera.

Siempre le había parecido interesante la distribución del garaje y todo lo que estaba detrás, de dos simples autos en la pista, había mucho más que solo llegar de primero y en ese sentido, le llamaba la atención. Tomó un snack de la mesa y caminó buscando a su papá.

-¿Gaia?

La chica se giró encontrándose con Hannah Schmitz, realmente la admiraba y no la veía hace un montón de tiempo.

-Hola Hannah, ¿cómo estás?- preguntó amablemente, acercándose a la castaña.

-Bien, ¿y tú? hace mucho no te veía, ni de este lado ni en el paddock- soltó una risita, Gaia asintió con una sonrisita.

-¿Haz visto a mi papá?

-Está ocupado atrás, no se bien que está haciendo, solo salí a buscar a Max para decirle algo.

-Bueno, si lo ves dile que estaré donde siempre- dijo tranquilamente, luego agregó rápidamente- a mi papá, no a Max.

Hannah rió.

-Si, lo sé- rodó los ojos- nos vemos más tarde, espero que sea para celebrar.

-Seguro que sí.

Hannah caminó hacia la parte de atrás, dónde Gaia sabía había más gente y que probablemente, por el caos no era buena idea entrar ahí, caminó hacia el auto exhibido frente suyo, tenía un número uno y no se veía mal.

Ella no sabía un carajo de carros, no sabía si era un carro bueno o terrible, simplemente se limitó a verlo. Pensó seriamente en quedarse ahí, mirando la carrera con los demás, ese ambiente seguramente era más divertido.

-¿Vienes a desearme suerte?- preguntó Max a sus espaldas, haciéndola sobresaltar, ella se dió la vuelta para encontrarlo de frente, ya tenía puesto su uniforme y el casco a un lado de su cuerpo.

-Quisieras- respondió- solo vine a buscar a mi papá. ¿Es este el tuyo?- señaló el monoplaza, Max asintió- que bueno.

Todas las interacciones con Max son incómodas, son incómodas, ridículas, patéticas, bochornosas y demás, no sabía porqué, se llevaba bien con varios corredores, capaz no al punto de ser amigos como con Charles, pero con Max todo siempre era diferente y extraño, tenso, incómodo, y nuevamente bochornoso.

-Está bonito ese pantalón.

-Cuando quieras te lo presto.

Era un mecanismo de defensa para ella, soltar un comentario así y tratar de pensar que con eso, el se iba a ir de ahí.