big reputation, big reputation
oh, you and me we have big reputations.
🏎️🏆🖤🍷
dónde gaia y max se odian a muerte y casi nadie lo sabe.
o donde gaia y max tienen que dejar sus diferencias atrás para salvar las reputaciones del otro.
o donde gaia...
time won't fly, it's like i'm paralyzed by it, i'd like to be my old self again but i'm still trying to find it
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Bueno, definitivamente había tenido mejores momentos en su vida. Este en su lista, encabezaba uno de los peores, con estúpidas costuras en su frente porque se había caído borracha por las escaleras, rodó los ojos, era una tonteria.
-Ay Gaia, casi nos matas del susto- dijo Geri con la mano en su corazón- dios, que susto. Gracias a Dios estás bien.
Geri había despertado para beber agua en la madrugada, cuando bajó las escaleras, se encontró con su hijastra tirada en el suelo, inconsciente, con una herida en su frente. Entre gritos llamó a emergencias y ahora Gaia estaba en la clínica.
-Lo siento, fue un accidente.
-Tu papá no responde, debe estar en la clasificación aún- dijo ella suspirando- esperaré un rato más para llamar y avisarle.
Su papá se encontraba en Italia para el gran premio, Gaia realmente odiaba pensar en preocuparlo y se sentía mal.
-Quizás debería volver a Mónaco.
Geri la miró sin entender:-¿Segura? pensé que estabas bien aquí.
-No me siento bien en ningún lado, pero quiero volver a mi casa. Quizás es algo bueno, tener mi espacio otra vez.
-No lo sé, Gaia- dijo ella con preocupación- ¿estás segura de que estarás bien sola?
-Si, estaré bien.
Mentira, pero al menos si moría, no tendría que seguir viendo la cara de preocupación de Geri y sus ojos lagrimosos, sintiendo la culpa carcomerla. James fue a visitarla unas horas después.
-Me siento muy culpable, no debí dejarte beber tanto.
-No es tu culpa, es mía por ser tan torpe. Pudo ser peor, supongo.
-Dios, me siento tan mal, ahora solo te voy a llevar a comer galletas y ya. Los clubes se acabaron para ti- dijo severo , haciéndola sonreír levemente- ¿te duele?
-Claro, pero hay cosas peores.
James se sentó a un lado de su cama, extendiendo una caja de cartón, ella la abrió y sonrió al ver unas cuantas donas.
-Gracias- sonrió, el asintió- se que casi no nos conocemos, pero no he sido totalmente honesta contigo.
