No merezco volver segunda parte

Capítulo 22: Pequeñas cosas del pasado

-Y si algo salió mal –le digo yo, dando vueltas por la sala de espera del hospital –ya se tardaron.

-Meredith, se la llevaron hace como media hora –me dice ella, más calmada que yo – Mark dijo que nos avisaba cualquier cosa.

-Perdón –le digo sentándome a su lado –solo que todo esto me pone un poco nerviosa.

-Ven aquí –me dice ella y me atrae en sus brazos – todo estará bien, pequeña, ella es una niña muy valiente, es una Montgomery, ¿acaso lo olvidaste? –me contesta ella, sonando igual que Bea, y yo le doy una sonrisa y niego, espero tenga razón.

En eso vemos como alguien entra a la sala donde estamos, era Mark, se sentó al lado de nosotras dándonos un agua a cada quien.

-Vengo del quirófano dos –nos informa el – apenas inicio la operación, digamos que la pequeña estaba un poco inquieta, pero logre que se tranquilizara y pudieran colocarle la anestesia – yo me llevo mis manos a la cara, mi niña debe estar muy asustada.

Addison solo suspira a mi lado, sé que también se está muriendo de miedo, pero se hace la fuerte, para que yo no me preocupe más.

-Todo estará bien chicas –nos dice Mark –ahora voy a regresar ahí, porque si no, Alex es capaz de ya no dejarme entrar, prometí ser su interno y estoy haciendo todo, menos eso –Addie suelta una pequeña risa, haciéndolo sonreír.

-Gracias Mark.

-No agradezcan, todo estará bien –nos dice y sale, rumbo al quirófano.

Después de una hora, las cosas comienzan a tornarse un poco aburridas y preocupantes, el no saber qué pasa, me desespera un poco.

- ¿Quieres que repasemos la operación, para que estés más tranquila? –me dice Addie, buscando la forma de calmarme.

-No, no es necesario.

-Hola chicas, como va todo – dice Amy, sentándose al lado de nosotras.

-Bien – le dice la pelirroja - ¿tú no tienes pacientes? –ella niega.

-Cancele todos mis pendientes, para venir a estar con ustedes –Addie, solo se acerca a ella, y ella la rodea en sus brazos, brindándole esa protección que necesitaba.

-Esto es como un deja vu –dice Addie, después de un tiempo.

- ¿Por qué? –pregunta Amy.

-Hace unos años a Mer la operaron de lo mismo, solo que la historia fue un poco chistosa – dice ella, ocultando una risa.

-Ni me lo recuerdes, todavía me da pena mirar a la enfermera que me atendió esa vez – le digo ocultando mi cara.

- ¿Pues qué paso?

-Digamos que, a la señorita, se le ocurrió que le pusieran morfina, para el dolor.

-En mi defensa, enfermarse de apendicitis, duele mucho – me defiendo yo.

-Bueno, sí, pero ese no fue el problema, si no los efectos que tuvo – Addison, le comienza a contar a Amy, todo lo que paso esa vez, y ella no paraba de reír.

Recuerdo que cuando desperté de la anestesia, Addie me conto que mi palabra favorita, ahora era vagina y que las enfermeras se enteraron de cosas, que solo ella, yo y nuestra cama sabíamos, fue muy vergonzoso, pero recordar eso, en este momento, me calmo, y comencé a reírme junto con ellas.

-Ya se tardaron mucho -les digo, después de un rato y ellas solo me observan -y si...y si.... –me paro, comenzando a hablar sin parar y sin sentido, debido a mis preocupaciones.