El sol de la mañana apenas había despuntado en el horizonte, pero en la sala común de la Agencia de Héroes de la U.A., ya se respiraba un aire de preocupación y tensión. El mensaje de Todoroki había sido breve pero urgente, lo suficientemente alarmante como para que Ochaco, Bakugou, Iida y Kirishima dejaran todo lo que estaban haciendo y se reunieran de inmediato. La luz suave de la mañana iluminaba la habitación, pero la atmósfera era pesada, como si una nube oscura colgara sobre ellos.
Todoroki se encontraba de pie junto a la ventana, su rostro serio y la mandíbula apretada. Sus ojos observaban a sus compañeros con una mezcla de determinación y preocupación. Los demás lo miraban expectantes, sabiendo que lo que él tenía que decir no sería nada bueno.
—¿De qué se trata todo esto, Todoroki? —preguntó Bakugou, con los brazos cruzados y el ceño fruncido—. Si nos hiciste venir aquí a las seis de la mañana, más vale que sea importante.
Ochaco, sentada al lado de Bakugou, apenas podía contener su ansiedad. Desde que recibió el mensaje, una sensación de inquietud se había instalado en su estómago. —¿Ha pasado algo con Izuku? —preguntó, su voz temblando ligeramente.
Todoroki asintió, y sus ojos se oscurecieron con la gravedad de la situación. —Sí, y es peor de lo que imaginábamos. Necesito que escuchen con atención.
El silencio llenó la sala mientras todos contenían la respiración, esperando la explicación de Todoroki. Iida, con su postura siempre recta y formal, fue el primero en hablar, tratando de mantener la compostura. —Todoroki, por favor, danos todos los detalles. ¿Qué ha ocurrido con Midoriya?
Todoroki respiró hondo antes de comenzar. —Anoche, Izuku secuestró a ___. Los atrajo a un gimnasio abandonado, esperó hasta que estuvieran atrapados, y luego lo tomó por la fuerza. Hana y yo tratamos de impedirlo, pero… él era demasiado rápido. Nos sobrepasó y logró llevárselo.
Las palabras de Todoroki cayeron como un balde de agua fría. Kirishima dejó escapar un jadeo incrédulo, sus ojos se abrieron de par en par. —¿Qué demonios estás diciendo? ¿Izuku… secuestró a ___? Eso es… eso es una locura.
Ochaco, con una mano cubriendo su boca, parecía a punto de llorar. —No… no puede ser. Izuku no haría algo así. ¿Verdad? —Miró a Todoroki, buscando una negación, una señal de que todo esto era solo un malentendido.
Pero Todoroki negó con la cabeza, su expresión permanecía severa. —Lo vi con mis propios ojos. Izuku… ha cambiado. Algo en él ya no es el mismo chico que conocíamos. Su obsesión por ___ ha cruzado la línea de lo racional. No está actuando como un héroe, ni siquiera como una persona normal.
Bakugou golpeó la mesa con el puño, su rostro una mezcla de furia y confusión. —¡Maldita sea, Deku! ¿Qué demonios le pasa por la cabeza? ¡No puedes simplemente secuestrar a alguien! ¡Esto no es un juego!
Iida, normalmente tan tranquilo y lógico, ahora estaba pálido y visiblemente consternado. —Esto es… esto es impensable. Si Midoriya ha hecho algo tan terrible, no solo está poniendo en peligro su futuro como héroe, sino también su propia integridad. Debemos encontrarlo y detenerlo de inmediato.
—Y lo haremos —respondió Todoroki, asintiendo—. Pero necesito su ayuda. Esto no será fácil. Izuku ha estado planeando esto por un tiempo. Sabía exactamente qué hacer, cómo movernos y cómo atraparnos. Tiene a ___ en algún lugar y no sé hasta qué punto está dispuesto a llegar.
Ochaco, con lágrimas en los ojos, respiró profundamente para calmarse. —Tenemos que hablar con All Might y los profesores. Ellos pueden ayudarnos. No podemos manejar esto solos.
Kirishima asintió de acuerdo. —Sí, y necesitamos buscar cualquier pista que pueda darnos una idea de dónde lo tiene. Izuku debe haber dejado algo, alguna señal.
Bakugou, sin embargo, estaba menos dispuesto a esperar. —No necesitamos a All Might para esto. Conozco a Deku mejor que nadie. Si se ha vuelto tan loco como para hacer esto, lo enfrentaremos y lo traeremos de vuelta a golpes si es necesario.
—¡Bakugou! —interrumpió Iida, con una mezcla de enfado y preocupación—. No podemos simplemente recurrir a la violencia. Este es un asunto serio que requiere un enfoque estratégico. No estamos hablando de una simple pelea de entrenamiento. Esto podría tener repercusiones legales y personales graves.
Bakugou soltó un resoplido, pero Todoroki intervino antes de que la discusión escalara. —Iida tiene razón. No podemos permitirnos ser imprudentes. Izuku puede ser nuestro amigo, pero en este momento, es una amenaza tanto para ___ como para sí mismo. Necesitamos encontrarlo antes de que las cosas se salgan más de control.
El grupo asintió, a pesar de que sus corazones estaban divididos entre la lealtad hacia su amigo y el deber de proteger a alguien que estaba en peligro. Mientras el plan comenzaba a tomar forma, Ochaco se volvió hacia Todoroki.
—¿Crees que podríamos… hablar con la madre de Izuku? —preguntó con cuidado—. Ella podría saber algo que nosotros no. Quizás haya notado algo extraño en su comportamiento últimamente.
Todoroki reflexionó por un momento y luego asintió lentamente. —Es una buena idea. Inko Midoriya siempre ha sido cercana a Izuku. Si alguien sabe si algo anda mal con él, sería ella.
Horas más tarde, Ochaco e Iida se encontraban en el umbral de la casa de Inko Midoriya. La mujer les abrió la puerta con una sonrisa cálida, pero su semblante cambió rápidamente cuando vio la seriedad en sus rostros.
—Oh, Ochaco, Tenya… ¿qué los trae por aquí tan temprano? —preguntó con preocupación.
—Señora Midoriya, necesitamos hablar con usted sobre Izuku —respondió Iida con cuidado—. ¿Ha notado algo extraño en él últimamente? ¿Algo fuera de lo normal?
Inko frunció el ceño, claramente preocupada. —Bueno, Izuku ha estado un poco… distante últimamente. Pensé que era el estrés de la escuela y los entrenamientos. Pero ahora que lo mencionan, ha estado saliendo más de lo habitual y… a veces tenía una mirada extraña, como si estuviera perdido en sus pensamientos. ¿Qué está pasando? ¿Izuku está en problemas?
Ochaco intercambió una mirada con Iida antes de hablar. —Señora Midoriya, creemos que Izuku ha hecho algo muy peligroso. Estamos aquí para ayudarlo, pero necesitamos saber todo lo que usted pueda decirnos. Cualquier pequeño detalle podría ser importante.
Inko los miró con ojos llenos de temor, su rostro palideciendo al entender la gravedad de la situación. —Por favor, díganme qué ha hecho mi hijo. Izuku no es un mal chico… ¿verdad?
Ochaco tomó un respiro profundo. —No es un mal chico, pero está perdido. Lo que ha hecho no es algo que pueda ignorarse. Necesitamos encontrarlo antes de que él y ___ estén en más peligro.
Inko comenzó a llorar silenciosamente, pero asintió con determinación. —Ayúdenlo, por favor. Haré lo que sea necesario.
Con la ayuda de Inko, el grupo empezó a atar cabos. A medida que recogían más pistas, la realidad de la situación se hacía más clara. Izuku, impulsado por su obsesión, había cruzado una línea peligrosa. El tiempo se estaba acabando, y el reloj seguía corriendo.
El equipo de héroes sabía que la búsqueda de Izuku y ___ no sería fácil. Pero estaban listos para enfrentarlo, dispuestos a hacer lo necesario para salvar a ambos de un destino incierto.
![](https://img.wattpad.com/cover/375972903-288-k211880.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Tinte Verde Corazón Oscuro (Izuku Yandere X Malereader)
FanfictionLee la historia nomas