Tinte Verde Corazón Oscuro (Izuku Yandere X Malereader)

Capitulo 8

Era un día soleado cuando ___ decidió aprovechar su tiempo libre para visitar a su prima, Mei. Desde que se mudó a la ciudad y empezó en su nuevo colegio, había estado demasiado ocupado para verla. Mei era como una hermana mayor para él, siempre cuidándolo y dándole buenos consejos. Su relación era tan cercana que él sabía que pasar tiempo con ella lo ayudaría a relajarse un poco y despejar su mente de las responsabilidades diarias.

Sin embargo, Izuku, quien había estado siguiendo cuidadosamente los movimientos de ___ desde su última reunión, pronto se enteró de estos planes. Aunque él e ___ asistían a escuelas diferentes, su obsesión lo llevó a mantenerse siempre informado. Había algo en la idea de que ___ pasara tiempo con otra persona, especialmente alguien tan cercano como una prima, que lo llenaba de un malestar inquietante. ¿Quién era esta Mei? ¿Y por qué ___ parecía tan emocionado de verla?

El sábado por la mañana, ___ salió temprano para encontrarse con Mei en una cafetería cercana. Habían decidido desayunar juntos y luego pasear por un parque cercano. Cuando ___ llegó, vio a Mei esperándolo con una gran sonrisa en el rostro. “¡____!” exclamó, levantándose para abrazarlo. “¡Es tan bueno verte! ¡Ha pasado tanto tiempo!”

“¡Mei! ¡Yo también te extrañé!” respondió ___, devolviendo el abrazo con un afecto genuino.

Mientras se ponían al día sobre sus vidas, ___ no podía evitar sentirse feliz y relajado. Mei siempre había sido una fuente de apoyo y calma para él, alguien en quien confiaba plenamente. A medida que hablaban, no se dieron cuenta de que a unos metros de distancia, escondido en una esquina, Izuku los observaba. Su mirada era intensa, siguiendo cada gesto y palabra. ¿Por qué se veían tan cercanos? ¿Por qué ___ se veía tan feliz con ella? La rabia y los celos comenzaron a burbujear dentro de él.

Mei, ajena a la presencia de Izuku, continuó la conversación con entusiasmo. “Sabes, ____, siempre he pensado que tienes un aire muy atractivo. Seguramente tienes a muchas personas interesadas en ti en tu nuevo colegio,” bromeó, dándole un pequeño empujón en el hombro.

“¿Yo? No, no es así,” respondió ___ riendo. “Además, no tengo tiempo para esas cosas. Estoy demasiado ocupado.”

Izuku apretó los dientes. ¿A qué se refería con eso? ¿Estaba insinuando que podría gustarle a alguien más? No podía soportar la idea de que alguien más pudiera siquiera pensar en tener a ___.

A medida que avanzaba el día, Izuku decidió acercarse con precaución. Cuando Mei y ___ salieron de la cafetería y comenzaron a caminar hacia el parque, Izuku se movió rápidamente, asegurándose de mantenerse fuera de su vista, pero lo suficientemente cerca como para escuchar su conversación. Sus pasos eran sigilosos, y su respiración, controlada. Había aprendido a ser paciente, a esperar el momento adecuado para intervenir.

Mientras paseaban por el parque, Mei tomó el brazo de ___, riendo por algo que él había dicho. A Izuku no le gustó ese gesto. ¿Por qué tenía que estar tan cerca de él? Sus ojos se entrecerraron, sintiendo un calor incómodo recorrer su cuerpo. No. Esto no estaba bien.

Decidió que era momento de intervenir.

Se adelantó con paso decidido y, fingiendo sorpresa, se detuvo frente a ellos. “¡Oh, ___! No esperaba verte aquí,” dijo Izuku con una sonrisa que apenas enmascaraba la tensión en su voz.

___ parpadeó sorprendido al verlo. “¡Izuku! ¿Qué haces aquí?” preguntó, claramente desconcertado. “No sabía que venías a esta parte de la ciudad.”

Izuku, tratando de sonar despreocupado, respondió: “Solo estaba dando una vuelta. A veces me gusta explorar nuevos lugares para entrenar.” Su mirada se posó brevemente en Mei antes de volver a ___. “¿Quién es tu amiga?” preguntó, aunque ya había escuchado lo suficiente para saber quién era.

“Oh, ella es Mei, mi prima,” explicó ___. “Mei, él es Izuku, un amigo.”

Mei sonrió y saludó con amabilidad. “¡Hola, Izuku! Encantada de conocerte.”

Izuku asintió, devolviendo el saludo con una leve inclinación de cabeza, pero había una frialdad subyacente en su actitud. “Es un placer, Mei,” dijo, luego se volvió hacia ___. “¿Te importa si me uno a ustedes por un rato?”

Aunque ___ dudó por un momento, no vio ninguna razón para rechazar la petición de Izuku. “Claro, supongo que no hay problema,” respondió con una sonrisa.

A lo largo del resto del paseo, Izuku se mantuvo cerca, demasiado cerca. Cada vez que Mei intentaba tomar el brazo de ___ o se inclinaba hacia él para hablar, Izuku encontraba una manera de intervenir, interrumpiendo con una pregunta o haciendo un comentario que redirigiera la atención hacia él. Su presencia era intensa y constante, y pronto Mei empezó a notar algo extraño en su comportamiento.

Finalmente, cuando se detuvieron a descansar junto a una fuente, Mei se inclinó hacia ___ y le susurró: “¿Seguro que está bien? Tu amigo parece... un poco protector.”

___ se rió suavemente. “Así es Izuku. Siempre está preocupado por los demás. Es solo su manera de ser.”

Mei sonrió, pero había una chispa de duda en sus ojos. Algo no estaba del todo bien con ese chico, pensó.

Al final del día, Izuku insistió en acompañar a ___ a casa. “No quiero que algo te pase en el camino,” dijo, aunque sus palabras tenían un tono más de orden que de preocupación.

Mei se despidió de ambos con una expresión pensativa. Mientras se alejaba, no pudo evitar mirar hacia atrás, sintiendo que algo en la situación no era tan inocente como parecía.

Izuku, caminando junto a ___, finalmente habló en un tono más suave pero lleno de intención. “No me gusta que pases tanto tiempo con otras personas,” admitió, sus ojos verdes fijos en los de ___.

___ frunció el ceño, un poco sorprendido por el comentario. “Izuku, son solo amigos y familiares. No tienes que preocuparte tanto.”

Izuku no respondió de inmediato. En cambio, solo lo miró con una intensidad que hizo que ___ sintiera un escalofrío recorrer su espalda. “No quiero que te alejes de mí,” murmuró finalmente, su voz un susurro que contenía una mezcla de súplica y advertencia.

El silencio se instaló entre ellos, y ___, incómodo, decidió no presionar más el tema. Pero mientras continuaban caminando, no pudo evitar sentir que había algo oscuro y desconocido en esa relación que estaba comenzando a revelarse.

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Eu qué opinas sobre la historia? Le está gustando como esta llendo o qué onda, opinen también quiero saber su opinión o algo qué tenga qué mejorar, recuerden qué hago esto para qué la disfruten asi qué si hay algo qué les moleste Diganme y voy a intentar solucionarlo. Sólo eso qué tengas un buen día, buena tarde o buena noche.