Capítulo 29: Lidiando con el Segundo Embarazo
Sasuke estaba sentado en el sofá esa noche, leyendo un libro. Aunque sus ojos seguían las palabras impresas, su mente estaba ocupada con pensamientos sobre el nuevo embarazo. Sabía que se avecinaban más cambios, y aunque ya había pasado por esto una vez, sentía que su irritabilidad y sensibilidad eran más intensas esta vez. Era algo que lo molestaba.
"Siento que cualquier cosa me enfada... ¿Esto será por el embarazo otra vez?" pensó Sasuke, suspirando suavemente y cerrando el libro por un momento.
Mientras tanto, Naruto y Menma charlaban animadamente en la cocina. Naruto sonreía ampliamente mientras hablaba con su hijo sobre invitar a Kiba para una comida en casa. Menma estaba emocionado ante la idea de pasar tiempo con su amigo, mientras Sasuke escuchaba desde el salón.
"¿Kiba va a venir?" pensó Sasuke, sintiendo una ligera punzada de celos. Algo en su interior se tensaba cada vez que pensaba en otros hombres cerca de Naruto. Aunque confiaba en su esposo, no podía evitar sentir esa posesividad latente.
— Kiba es un buen amigo, Menma — decía Naruto alegremente —. Y además, es bastante guapo, ¿no te parece?
Menma soltó una risita divertida mientras Sasuke fruncía el ceño desde el sofá. Al escuchar eso, la irritación y los celos dentro de él crecieron rápidamente. Cerró el libro con un golpe seco y se puso de pie de inmediato, cruzándose de brazos mientras miraba a Naruto con una mezcla de molestia y celos.
— ¿Guapo? — dijo Sasuke, interrumpiendo la conversación de su esposo e hijo —. ¿Por qué dirías eso? ¿Es que acaso es más atractivo que yo?
Naruto, sorprendido, se giró rápidamente hacia Sasuke, su rostro mostraba una mezcla de nerviosismo y confusión.
— ¡No, no, claro que no! Yo solo... — tartamudeó Naruto, intentando encontrar las palabras correctas.
Menma, viendo que la situación entre sus padres comenzaba a ponerse tensa, decidió subir a su habitación, dejando a sus padres solos.
Sasuke, aún furioso, se acercó a Naruto y lo agarró de la oreja, tirando de él ligeramente.
— ¡Soy tu esposo! — dijo Sasuke, con un tono que mostraba claramente sus celos y posesividad —. Y además, estoy embarazado de nuestro segundo hijo. ¿Por qué hablarías así de otro hombre?
Naruto, nervioso, intentaba calmar la situación.
— ¡Lo siento, Sasuke! No quise decir eso... Sabes que eres el único para mí — dijo Naruto, intentando calmar a su esposo.
Sasuke, aún molesto, lo miró con frialdad, pero decidió calmarse. Su rostro seguía serio, aunque el enojo comenzaba a disiparse lentamente.
— Solo ten cuidado con lo que dices — respondió Sasuke, aunque su tono era menos severo.
Naruto sonrió suavemente, abrazando a Sasuke por detrás y acariciando su vientre con ternura.
— Lo siento... Te amo, ¿sabes? — dijo Naruto con cariño.
Sasuke dejó escapar un suspiro y, aunque seguía serio, permitió que el abrazo de Naruto lo relajara un poco.
— Lo sé — respondió Sasuke, frío pero amoroso.
A la mañana siguiente, ambos decidieron salir a caminar juntos, tomados de la mano, disfrutando de un momento tranquilo. Menma estaba fuera, pasando tiempo con sus amigos. Mientras caminaban, Naruto soltó la mano de Sasuke para estirarse un poco, lo que hizo que Sasuke frunciera el ceño.
— ¿Por qué soltaste mi mano? — preguntó Sasuke con un tono posesivo, claramente molesto.
— Solo me estaba estirando, Sasuke. No es nada malo — respondió Naruto con un tono algo desafiante.
— Siempre haces lo mismo. No me gusta — dijo Sasuke, cruzándose de brazos.
Naruto sonrió y tomó nuevamente la mano de Sasuke con cariño.
— Lo siento. No quería hacerte sentir mal — dijo Naruto suavemente.
Sasuke, aunque molesto, dejó que su esposo tomara su mano. Pero de pronto, Sasuke llevó una mano a su vientre, sintiendo una pequeña punzada de hambre y antojo.
— Tengo antojo de algo... — murmuró Sasuke, casi para sí mismo.
Naruto, escuchando esto, inmediatamente se acercó a un puesto de ramen cercano y pidió dos tazones.
— Aquí tienes — dijo Naruto, entregándole uno a Sasuke.
Sasuke lo miró con desaprobación, claramente molesto.
— No quiero ramen. No tengo antojo de eso... — respondió Sasuke con irritación. — Quiero Mochi de Fresa.
Naruto, algo nervioso, rápidamente se disculpó.
— Lo siento, pensé que te gustaría... Te lo conseguiré ahora mismo — dijo Naruto, buscando rápidamente el antojo de Sasuke.
Finalmente, Naruto volvió con lo que Sasuke quería, y Sasuke dejó escapar un suspiro de alivio al recibirlo.
— Gracias... — dijo Sasuke, tomando la comida y calmándose.
— Cualquier cosa por ti, amor — respondió Naruto con una sonrisa.
Ambos continuaron su paseo, disfrutando de la tranquilidad mientras Sasuke se sentía un poco más cómodo, sabiendo que Naruto siempre estaba dispuesto a complacer sus deseos.
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Un Destino Inesperado.
RandomEsto trata básicamente del SasuNaru y toda la paranoia. Espero disfruten.