Un Destino Inesperado.

Cap64: El Error de Menma

Capítulo 64: El Error de Menma

Era una tarde tranquila en la casa de los Uzumaki, y últimamente, Naruto y Sasuke habían notado que Menma estaba actuando de forma extraña. Parecía más reservado, nervioso, y evitaba hablar con ellos a solas. Boruto también había notado el cambio en su hermano mayor, y aunque le había preguntado, Menma solo esquivaba el tema. La pequeña Ayami, de apenas cuatro años, jugaba con sus juguetes en el suelo, lanzando palabras ininteligibles de vez en cuando mientras los demás la observaban, intentando ocultar su curiosidad por la actitud de Menma.

Naruto, siempre directo, finalmente decidió enfrentarse a su hijo mayor.

- Menma, -llamó, mientras Menma trataba de escabullirse hacia su habitación-, ¿por qué no vienes un momento? Queremos hablar contigo.

Menma tragó saliva, sabiendo que no tenía otra opción. Se acercó lentamente, tratando de mantener la compostura.

- ¿Qué pasa, papá? -preguntó, intentando sonar relajado.

Sasuke lo observaba con su típica expresión seria, y Boruto, con los brazos cruzados, también lo miraba, claramente interesado en saber qué estaba ocurriendo.

- Eso es lo que quisiéramos saber nosotros, -respondió Sasuke-. Has estado actuando raro, evadiendo nuestras preguntas. ¿Hay algo que quieras contarnos?

Menma bajó la mirada, incapaz de enfrentar los ojos de sus padres. Había estado ocultando un secreto importante, y aunque sabía que debería hablar, tenía miedo de las consecuencias. Por un momento, consideró decirlo, pero algo en su interior le impidió hacerlo.

- Yo... no es nada importante, -dijo, tratando de sonar convincente-. Solo... cosas de la escuela.

Naruto levantó una ceja, claramente no creyéndole.
- ¿Cosas de la escuela? Menma, tú no eres así. Sabes que puedes confiar en nosotros.

Ayami, quien estaba sentada en el suelo jugando con una muñeca, levantó la vista y, con sus palabras entrecortadas, dijo:
- Memma... ¡cuenta! -dijo, como si entendiera que todos estaban esperando algo.

Menma le dedicó una sonrisa nerviosa a su hermanita, pero luego desvió la mirada. Antes de que pudiera decir algo más, Mei apareció en la entrada de la casa, y al ver la escena, su rostro mostró una mezcla de nervios y preocupación. Todos la miraron, sorprendidos por su llegada inesperada.

- ¡Mei! -exclamó Naruto-, ¿qué te trae por aquí?

Mei lanzó una mirada rápida hacia Menma, como buscando apoyo, pero al ver su incomodidad, respiró profundo, decidiendo enfrentar la situación.

- Lo siento, Menma... no puedo seguir ocultándolo, -dijo con la voz temblorosa. Miró a Naruto y Sasuke, con sus ojos llenos de nerviosismo-. Hay algo importante que necesitan saber.

Sasuke y Naruto se miraron entre ellos, alarmados por el tono de Mei.

- ¿Qué sucede, Mei? -preguntó Sasuke, en un tono serio y protector.

Mei respiró hondo, y con un leve temblor en su voz, dijo:
- Estoy... estoy embarazada. -Las palabras salieron como un susurro, pero en la quietud de la sala, fueron perfectamente audibles.

La expresión de Naruto y Sasuke cambió instantáneamente. Naruto abrió los ojos con sorpresa, mientras Sasuke se mantenía en silencio, procesando lo que acababa de escuchar. Boruto miró a Menma, sorprendido y algo confundido, sin saber cómo reaccionar.

- ¿Desde cuándo sabes esto, Menma? -preguntó Sasuke en un tono firme, sus ojos clavados en su hijo mayor.

Menma, sintiendo el peso de la situación, miró a sus padres con nerviosismo.
- Hace algunas semanas, -murmuró, apenas capaz de sostener la mirada de su padre-. Mei me lo contó... pero no sabía cómo decirlo.

Naruto suspiró, frotándose la frente mientras trataba de procesar la noticia.
- Menma, ¿por qué no confiaste en nosotros? Esto es algo muy importante.

- Lo sé, papá, -dijo Menma, sus ojos llenos de arrepentimiento-. Tenía miedo de cómo reaccionarían, y no quería causarle problemas a Mei. Pensé que... tal vez... podríamos manejarlo solos.

Boruto, siempre listo para soltar un comentario sarcástico, intervino.
- Vaya, Menma, y yo que pensaba que solo estabas raro por no hacer la tarea.

Ayami, sin entender del todo lo que estaba pasando, se acercó a Mei y le sonrió, luego volteó a mirar a Menma con una mirada inocente.
- Memma... ¿qué pasó?

Menma se inclinó y acarició la cabeza de su hermanita.
- Nada, Ayami. Todo está bien, -le dijo, aunque sus ojos mostraban la mezcla de sentimientos que lo abrumaban.

Naruto, suavizando su expresión, se acercó a Mei y le habló en tono amable.
- Mei, lo que necesitas ahora es apoyo, y nosotros estamos aquí para ayudarte. No te preocupes, encontraremos la manera de manejar esto juntos.

Sasuke miró a Menma, sus ojos serios pero llenos de comprensión.
- Menma, estamos aquí para ti, siempre. Lo importante es que seamos sinceros los unos con los otros, ¿de acuerdo?

Mei, con lágrimas en los ojos, asintió, sintiéndose aliviada y agradecida por el apoyo de la familia de Menma. Menma, aún algo temeroso, asintió también, sabiendo que había cometido un error, pero sintiendo que su familia estaba dispuesta a perdonarlo y ayudarlo.

Naruto, siempre travieso y con una sonrisa cariñosa, se acercó a Sasuke y, en un intento de romper el ambiente tenso, le dio un pequeño beso en la mejilla, haciéndolo sonrojar.

- ¿Ves, Sasuke? En esta familia somos un equipo, -dijo, guiñando un ojo hacia Menma.

Sasuke rodó los ojos, pero una pequeña sonrisa apareció en su rostro.
- Naruto, siempre tan oportuno con tus bromas...

Boruto se rió, y hasta Ayami, aunque no entendía lo que estaba pasando, se unió a la risa al ver la expresión divertida de todos.

Finalmente, el ambiente se alivió, y Menma miró a Mei, sintiendo que, a pesar de sus errores, no estaba solo.