Chico de Alquiler // Joshler

x Cap. 54

El oficio de auxiliar de apoyo es un pequeño cargo que relega el personal de enfermería a particulares. Labor que se ejecuta dentro de una institución médica que cumple el humilde servicio de brindar asistencia de registro. 

—Pero, Jasson, yo no estudie —aquejó Tyler avergonzado frente al ordenador de su amigo.

Jasson jalo la silla de plástico libre y se sentó junto al más joven.

—Si no sabes usar una computadora, puedes llevar el registro en un cuaderno. Comprare uno aquí mismo, o podemos tomar uno de la oficina de Josh. A él le han llenado los útiles de escritorio la semana pasada. 

—No —dijo Tyler con presura—. No quiero incomodar —diciendo esto tomo el ratón del computador y empezó a deslizarlo por el borde de la mesa, la flecha blanca en la pantalla no se movía. Miró a Jasson desconcertado. 

—De todas formas, iremos a incomodar —le dijo este, volviendo al tema—. Estamos en su área de trabajo. El director del hospital me dio la autorización para contratar al auxiliar de apoyo y necesitamos el permiso del área, para que ese seas tú. Eso lo tiene que firmar Josh.

—No puede. ¿No firmar y ya? —preguntó Tyler, la ansiedad haciendo que se lleve las uñas a los labios.

—Esto es un trabajo Tyler. Tendrás una pequeña remuneración, la tercera parte de un sueldo, no es mucho, pero ganarás dinero por primera vez en tu vida y será para ti.

—Ya ganaba dinero de más pequeño —recordó el más joven entristecido—. Supongo que esta es la forma decente.

—Tyler basta, intentas dejar de pensar en eso por un momento. Hazlo, inténtalo, tú puedes ganar.

—¿A quién le voy a ganar yo, Jasson? no soy nadie —murmuro el más joven inclinando la cabeza un poco, los pensamientos negativos tomando el control—. Menos ahora podría ser algo. Algo. No, ya no. Esto es todo lo que soy, solo lo que fui. No puedo ser más que eso.

Los pasos fuera de la oficina resonaron, no había movimiento en la sala al medio día, pero tampoco se podía abusar del tiempo libre, menos aun cuando era el horario de refrigerio de Jasson, y este había usado sus horas para enseñarle a Tyler el trabajo que cumpliría como su asistente de registro, cargo que venía solicitando al director desde hace meses, debido a que la luna de miel del doctor de área sobrecargó a todos sus compañeros. Sin embargo, Tyler era importante para él, le consideraba un amigo.

—Dices todo eso, pero no quieres oírlo. Déjate en paz, Tyler. Por favor.

Le miró este con los ojos avergonzado y se escondió bajo la casaca que su amigo le había prestado. Escondiendo su cabeza en la capucha de algodón y ajustándola con la cuerda.

—Tal vez este trabajo no sea buena idea...—comentó Jasson.

Tyler se apresuró en tomarle del brazo, estirándose en un sobresalto.

—Jasson no, por favor —empezó a rogar—. Yo necesito esto. Por favor, Jasson. Necesito trabajar para vivir. Estoy solo, por favor.

—No estas solo —le dijo Jasson con molestia, pero luego volvió a mirarlo con cariño—. Yo voy a cuidar de ti hasta que termines de independizarte, no soy un experto, nunca tuve hermanos. Debby es lo más cercano a alguien de mi edad que tengo, y ahora tú, Tyler. No te dejare solo en ningún momento, pero necesito que confíes en ti. Si tu no haces eso, no podemos avanzar.

Diciéndole esto estaba, ayudándolo a enderezarse en la silla mientras le quitaba la capucha de la cara cuando un carraspeó los hizo mirar hacía la puerta de ingreso de la oficina.

—Que bonito, tan temprano y ya dándose mimos.

Era Josh, y estaba, visiblemente celoso.

—Guárdenlo para su casa ¿No?, Debby, y yo nos enteramos esta mañana. Estábamos muy contentos por ello, dijimos "nuestro Tyler tendrá un compañero de piso, que alivio, no tendrá que estar solito" Y mírense, ya andan pegados hasta aquí.

—Iba a llevarte su contrato para que pongas tu sello —empezó a hablar Jasson poniéndose de pie para caminar hacía el doctor.

—Ve a dejarlo en mi oficina —dijo Josh.

Jasson hizo los puños, pero tenía que obedecer, después de todo él solo era el enfermero.

—Volveré rápido Tyler.

Josh se sonrió. 

—También, lleva las altas a los pacientes del tercer piso, hay tres familias esperando y ya es medio día. La gente necesita volver a sus casas, retomar su vida real, no todo es estar sentados todo el santo día, Jasson.

Jasson, enojado, salió apresurado de la oficina. Su voluntad de ayudar a Tyler le hizo olvidar por un momento que Josh le hacia la vida imposible en el trabajo, y que estaba expuesto a que Tyler supiera que este le humillaba constantemente. De todas formas, tenía que cumplir el mandato, era su trabajo después de todo. Furioso, echó a andar más rápido. 

Josh ingreso a paso firme, traía la bata blanca con la que desayunaba todas las mañanas. Llego a Tyler y lw quitó la cachupa de la cabeza.

—No quería meter a Jasson en problemas —se adelantó el castaño—. Por favor sé amable con él.

—Si tú eres amable conmigo me lo puedo pensar.

Tyler le miró sin maldad.

—He tratado de ser lo mejor posible contigo y con Debby, a ella y a ti, les debo mi vida.

La nube negra se alejó de la cabeza del recién llegado, y se animó en sentarse frente al ordenador que Tyler tenía sobre el escritorio. 

—¿Que estaban haciendo?

—Jasson me enseñaba a usar esta computadora, pero no sé cómo. Ni siquiera puedo mover esa flecha. No sé cómo. Tengo miedo, haré todo mal. 

Josh le tranquilizó con palabras bondadosas, y puso su mano sobre la suya que estaba sobre el ratón del ordenador.

—Tienes que hacer un click, así —y presiono sobre la derecha—. Y luego solo lo mueves en círculos, no por toda la mesa, en un círculo pequeño que asemeja la pantalla. Inténtalo. 

—¿Solo?

—No, conmigo. 

Tyler lo intento, y la flecha empezó a moverse.

—¡Se está moviendo! —exclamó. Encogido estaba, pero por su hazaña de irguió en el asiento, y Josh se le acerco disimulado —¡Lo hice funcionar!

—¡Claro que sí! —compartió su alegría—. Ahora lleva esa flecha hacia el cuadro verde, ese es una hoja de cálculo, ahí vas a escribir todo lo que Jason te pida.

—¿Hay hojas en esta computadora?

—Oh Tyler, olvida al idiota de Jasson. Yo te voy a enseñar todo sobre usar computadoras. Ven a mi oficina, ahi tengo otro ordenador que no uso, vas a aprender ahí y luego empezaras a llenar los registros de los enfermeros. No solo estarás trabajando para Jasson, sino para los doce enfermeros. Por eso tienes que aprender rápido.

Tyler palideció y dirigía la mano hacía sus labios para volver a piñizcarse con ansiedad, pero el doctor le detuvo. 

—No te atrevas a lastimar ese rostro —le dijo, alejando la mano del que se hería—. No te lo puedo permitir. Me gusta mucho no lo arruines.