X Cap. 20

695 85 46
                                    

— Es diferente. No había visto uno igual.

— ¿Muy pequeño?

— No. —fue sincero. — ¡Es enorme!

Jason se apoyó contra la puerta riendo y si su cabeza se golpeó tan fuerte como sonó, las personas que estaban en el interior no lo notaron.

— Me lo regaló mi hermana, el mes pasado por mí cumpleaños. Dijo que era moderno, pero si te soy sincero para mí todos lucen igual.

Tyler lo tomó de su mano cuidadoso y aunque estaba impresionado se sintió ofendido con el peso.

— No cabe en mi mano.

No lo hacía, el móvil oscuro que trataba de capturar cerrando la palma de su mano era más grande de lo que imaginó. Nunca había portado un celular como suyo, solo tenía en su poder el pequeño escarabajo a teclas que le dio Pete para mantenerlo vigilado.

— No es ilegal, pero sé como conseguir uno así en cualquier momento.

Tyler se lo devolvió. Los únicos celulares así de bonitos y costosos que había visto eran los de Debby y Josh. El de la castaña uno rosa con pantalla plegable y el de Josh con protector de diseño ejecutivo. Ambos muy serios.

— Tengo juegos descargados. — Jason prendió la pantalla y tecleo unos números para mostrar una lista de aplicaciones en funcionamiento. Seleccionó uno al azar y la pantalla se ilumino, apareció un punto rojo.

— Tocalo. —ordenó. Y Tyler lo hizo. —Ahora deslizate por la pantalla. Ves esos puntos azules, acercaré a ellos.

— ¿Cómo? —Tyler arrastraba el dedo pero el punto azul no lo seguía. — No me hace caso.

— No lo cubras solo guialo. Así. —Jason paseo el dedo por otra región de la pantalla y en efecto el puntillo lo siguió. — Y vas comiendo.

Tyler siguió el proceso y cuando se acercó a un par de puntos amarillos, notó que su punto rojo crecía. — ¡Los he absorbido! —exclamó.

Jason se rasco la cabeza.

— Tengo más juegos así en la consola.

Tyler asintió sonriente.

— Si quieres que juguemos otro día, solo dime.Puedo llevarte a mi cuarto cuando quieras.


*_*_*_*_*_*_*

— No sé con qué te ofendí. —gritó.

Jasson caminaba tras el castaño, quién aunque desconocía el camino, trataba de crear la mejor distancia posible entre sus pasos y los del más alto. 


— No lo hiciste. —decía Tyler, pero sabía que era mentira.

Cada que podía intentaba llegar a él. — ¿Entonces por qué te estás escapado de mí?

— No lo hago. —insistía, pero sus pasos presurosos lo dejaban en evidencia, trató de cruzar una calle pero el color de semáforo lo hizo dudar.

¿Cuando se cruzaba? ¿En rojo, en verde? Tan fuera de sí estaba que emprendió camino en la opción incorrecta y fue la bocina de un auto lo que hizo que se detuviera por el susto.

— Ya deja de correr. —lo capturó el alto. —  ¿Estamos en una maratón?

Jason estaba riendo, y su risa tranquilizo a un Tyler que lo miraba de brazos cruzados.

— ¿De qué te ríes? 

— Tu cara me contó un chiste.

Se mofo con interés.

— Que estúpido. —sonrió.

*_*_*_*_*_*

La oficina del director tenía dos interruptores, el de la izquierda, que tenía un capa más clara que su contraría, no funcionaba. Lo sabía porque no es la primera vez que estaba sentado frente al director de su escuela.

— Sr. Dun ¿Sabe por qué está aquí?

Josh se llevó la mano al pecho. — Culpa mía no es.

— Sr. Dun, desde que fue incluido en el proyecto de prácticas profesionales, ha cumplido con todas las evaluaciones satisfactoriamente. Y solo recibimos porras de tus intervenciones en la sala de urgencias.

El pelirosa no pudo ocultar su modestia. — Sus palabras son precisas.

— Aun está pendiente el tema de su cabello. Claro. —señaló. — Sin embargo, la razón que oculto para tenerlo ante mi presencia hoy, involucra a su último reporte de cálculo.

— ¿Cálculo? —inquirió.

El  hombre  descanso los brazos sobre  el escritorio: — Su último trabajo teórico.

Josh se lo pensó un poco, en tanto un mensaje que hizo vibrar a su celular.  Y recordó el trabajo de cálculo. 


— Ya veo. —dijo.

El expectante director se ajustó los anteojos y asintió también.

— El becado me quitó del trabajo.

El carraspeó del director no lo afecto, en cuanto siguió oyendo lo que le decía el anciano hombre, pensó en el culpable.

— El Sr. Mallete presentó un reporte de cálculo muy bueno, se incluyó la totalidad de la elaboración y los resultados. No estuvo incluído usted, por tanto, le informo que ha reprobado esa materia.

Joder.

Era ridículo, no podía creerlo. Cómo cayó en algo tan infantil.

— Hablaré con Jason ahora mismo. Yo hice gran parte del trabajo, no me puede sacar porque está de berrinchudo. 

— De ser esos los motivos. Le sugiero que hable con su compañero de equipo. Tiene una hora para conseguir una modificación en sus notas.

Josh se despidió de la autoridad. — Gracias, señor. Lo solucionaré. 



*-*-*-*-*-*-*-*

Un grupo de adolescentes no dejaba de mirar hacia su lugar, en específico, a su nuevo amigo. Jasson no lucía como un chico tímido, pero tampoco parecía ser el alma de las fiestas. Luego de convencerlo de que aceptará su invitación a comer helado, le pidió que ordenará lo que quería.  

— Vete al diablo. —gritó contra el movil. — Mirarme hacerlo.  Más no dejó que el remitente aludiera mensaje alguno.

Tyler bajó la mirada a su tazón de helado, y siguió comiendo.

— Disculpa por eso. —dijo Jasson.

Asintió pero el silencio siguió presente.

— Empecemos otra vez. — Jasson le extendió la mano. — Soy Jasson Mallete, amigo de tus amigos, y estudiante de enfermería en proceso.

Tyler recibió el saludo: — Tyler, yo soy ...

— ¿Eres?

— Soy, solo Tyler. —intentó sonreír. 

Jasson lo aprobó: — Bien. Solo Tyler. Espero que seamos buenos amigos. Y lo seremos créeme. A mí también me botan del cuarto mis compañeros.

— ¿También?

— Si. En el Campus de la universidad no todos los compañeros nos llevamos bien. Tú entenderás. Por cierto, ¿No eres muy joven para ser universitario?

— .....


Chico de Alquiler // JoshlerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora