Atriane seguía aferrándose a la vida ¿Pero cómo? Ryu comenzó a correr hasta ella para bajarla del Caldero.
—Ser excepcional— Dijo M3RL1N— Ninguno de los otros dioses logró derrotar a un Rey Eterno pero tú lo has hecho.
—No soy un dios— Replicó el Trazacaminos.
—Pero que sepas que solo has alargado lo inevitable.
—Me parece muy bien. No me interesa— Dijo mientras finalmente bajaba a Atriane y la colocaba en el suelo.
—Ahora todo el virus se impregnara en el suelo del planeta y...
El Trazacaminos lanzo una onda de energía que destruyó a M3RL1N. No le interesaba nada de lo que decía. Solo quería que se callara la boca.
—Tranquilo. No morirá— Dijo Satrah apareciendo detrás de él— Me encargue de mantenerla con vida dándole un poco de mi energía.
—Gracias... No se que hubiese pas...
—Ella es más importante de lo que crees. ¿No lo sabes?
Y así el Trazacaminos había encontrado a alguien que quería llevar en su camino. La cosa era ¿Quería ir por el camino con él? Toda esta situación era algo nuevo para él.
Ryu levantó a Atriane y la llevo cargando con los dos brazos por todo el camino. El mirando al frente comenzó a salir del castillo en ruinas. Comenzó a caminar por las calles de la ciudad que ahora estaba destruida por los choques de los golpes de Ryu y Arturo. En un pequeño momento Atriane abrió los ojos y vio como Ryu la cargaba. Sonrió momentáneamente y volvió a dormirse en paz. Estaba feliz de que él hubiese logrado solucionar todo. Era la única persona en la que de verdad había logrado confiar en su vida y con una fe ciega de que si pasaba algo él estaría allí para ayudarla. El cumplió sus expectativas.
Cadáveres de gente estaban esparcidos por las calles. Todos congelados por el drástico cambio de temperatura que había sucedido por el combate. Eso le daba igual. Ya no eran su problema. No eran el problema de nadie.
Ryu comenzó a emitir energía e intentó replicar lo que logró en el espacio. Usar su aura como combustible. Dio un salto y logró mantenerse en el aire. Tenía aura de sobra para hacer esto. y puso rumbo a la parte caliente del planeta.
Bors logró llegar al planeta Camelot robando una nave espacial que movía el espacio. Pero no lograba reconocerlo apenas. Todo destruido. No había luna. Estaba el planeta congelado.
Pero noto algo rápidamente. Un gran movimiento de energía que se dirigía a la parte caliente del planeta. Sin lugar a dudas pensó que era Ryu con lo que puso en marcha la nave espacial para alcanzar a su amigo.
El Trazacaminos tumbó a Atriane en el suelo de la playa mientras él se sentaba al lado suyo. Esperando a que se despertara. Al cabo de un rato ella abrió los ojos. Miro de arriba a abajo a Ryu y sonrió mientras hacía un comentario extraño.
—Tu cabello... Ahora es negro y tus ojos tambien.
Y así era. Al usar la energía del vacío absorbió los colores de sus ojos y pelo.
—Bueno digamos que han pasado cosas.
Atriane se acercó a Ryu y lo besó. Fue el acto de afecto más natural que le habían hecho al Trazacaminos nunca.
—No te acostumbres. No te voy a dar siempre un beso así— Sonrió— Y tampoco planeo que me rescates siempre— Le golpeo la mejilla mientras le daba otro beso.
—¿No decías que no me ibas a hacer esto más?
—Esto ha sido capricho mio— Se rio mientras abrazaba a Ryu.
La situación no estaba mal para Ryu. Quizá era lo que siempre había querido. Ser feliz. No trazar el camino que le impusieran los demás. Quería trazar su camino y quería que Atriane lo hallara con él.
Finalmente Bors llegó a donde estaba la pareja sonriendo.
—Veo que has logrado salvar a la chica.
—Bueno... Si.
—¿Y este quien es?
—Bors... Digamos que es un amigo que hice.
Comenzaron a charlar de forma intrascendente y amigable.
—Bueno Ryu— Dijo Bors— ¿Y si te apetece que echemos una carrera los tres hasta la nave?
—Te vamos a dar una paliza Bors— dijo Atriane sonriendo.
Los tres se pusieron preparados para salir corriendo. Bors dio una cuenta atrás y cuando llegó a Cero, El Trazacaminos agarró a La Última Eldariana y comenzó a volar con ella.
—¡¡¡ESO ES TRAMPA!!!— Gritó Bors.
Y Juntos volaron hacia nuevas aventuras.
Fin de la segunda parte
ESTÁS LEYENDO
La saga de los Guerreros de Fuego.
AcciónHace mucho mucho tiempo no existía nada, pero sin saber como (cosa que yo sí sé que ha pasado, solo que no es el momento de contarlo) apareció el universo... ¡ANDA QUE NO HAN PASADO COSAS EN ESTE UNIVERSO! La historia que voy a contar hoy estará di...